Se?ales confusas
Desaparece la amenaza de deflaci¨®n, pero el paro se confirma como el gran problema de 2010
El ejercicio econ¨®mico de 2009 concluy¨® con dos evidencias de signo opuesto. La primera es que la amenaza deflacionista, agitada como un espantajo por la oposici¨®n pol¨ªtica m¨¢s visceral, ha sido desmentida por la realidad. El a?o pasado los precios subieron el 0,9% en tasa anual, seg¨²n el ¨ªndice armonizado que elabora el Instituto Nacional de Estad¨ªstica.
Aunque es la tasa m¨¢s baja desde que se mide la inflaci¨®n (1962), lo cierto es que los precios suben por segundo mes consecutivo despu¨¦s de ocho de continuos descensos y confirman un pron¨®stico de subidas moderadas durante todo el a?o gracias sobre todo a la presi¨®n de los precios de la energ¨ªa. Importa precisar la causa, porque lo cierto es que la recuperaci¨®n de los precios no se debe a la reactivaci¨®n de la demanda interna. El consumo seguir¨¢ bajo m¨ªnimos al menos durante todo el primer semestre de 2010.
La segunda evidencia apunta a que el desempleo seguir¨¢ siendo el estrangulamiento decisivo de la econom¨ªa espa?ola durante este ejercicio. El paro registrado en las oficinas del Inem aument¨® durante 2009 en 769.640 personas y afect¨® a un total de 3.923.603 trabajadores. Una comparaci¨®n estad¨ªstica sencilla demuestra que este aumento es inferior al de 2008, cuando el paro subi¨® en 999.416 personas. Ahora bien, no conviene apresurarse a festejar una desaceleraci¨®n del paro o en decidir, como anunci¨® ayer el secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado, que "hemos dejado atr¨¢s lo m¨¢s duro del ajuste laboral". La tendencia que marca el Inem debe ser confirmada por la medida aut¨¦ntica del desempleo, que es la que realiza la Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA). Y no s¨®lo porque detecta con m¨¢s precisi¨®n el volumen real de parados -pr¨®ximo a los 4,5 millones- sino porque permite examinar la evoluci¨®n de las personas dispuestas a trabajar y mide el efecto des¨¢nimo que produce la recesi¨®n.
Ser¨ªa m¨¢s prudente celebrar la desaceleraci¨®n del paro cuando se hayan comprobado los efectos que tendr¨¢n algunas decisiones econ¨®micas de gran alcance sobre la actividad econ¨®mica espa?ola. Esas decisiones son la retirada paulatina de las facilidades crediticias del Banco Central Europeo, la subida de tipos que sugiere el propio BCE o la desaparici¨®n de los programas nacionales de est¨ªmulo econ¨®mico. La desaceleraci¨®n del paro registrado en diciembre es s¨®lo un signo, esperanzador si se quiere, pero confuso y parcial todav¨ªa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.