Florida, entre la solidaridad y el miedo
La Iglesia cat¨®lica propone acoger a los hu¨¦rfanos haitianos por razones humanitarias - Washington prev¨¦ conceder los visados s¨®lo caso por caso
La tragedia de Hait¨ª ha conmocionado a Florida, que acoge la mayor comunidad de inmigrantes haitianos en EE UU. El Estado vive el drama del terremoto entre la solidaridad y el temor a un ¨¦xodo masivo. Como si estuviera dividido entre el coraz¨®n caliente del pueblo y la cabeza fr¨ªa de las autoridades. EE UU se ha volcado en apoyo de Hait¨ª, pero los anteriores casos de llegada en masa de inmigrantes, como los cubanos, obligan a mantener la cautela.
La solidaridad de Florida est¨¢ presente en Hait¨ª con muchos medios humanos y materiales desde el primer momento tras el terremoto. El Estado se est¨¢ preparando para acoger a los damnificados, pero con cuentagotas. As¨ª est¨¢ sucediendo, por ejemplo, en el hospital Jackson Memorial de Miami, donde han sido atendidos medio centenar de heridos, en su mayor¨ªa haitianos con pasaporte estadounidense. "Tambi¨¦n atenderemos a los haitianos", asegur¨® un portavoz del centro sanitario, pero tras pasar por los filtros migratorios.
Medio mill¨®n de inmigrantes viven en EE UU, muchos de ellos en Miami
El Comando Sur del Ej¨¦rcito y la Guardia Costera est¨¢n preparados para un posible ¨¦xodo de haitianos hacia Florida. Esta eventualidad fue descartada en un principio, pero ha vuelto a ser tenida en cuenta tras comprobarse que miles de afectados por el terremoto se dirigen hacia la costa norte de Hait¨ª. Desde all¨ª han salido en el pasado muchos barcos para intentar llegar a EE UU. La mayor¨ªa, sin ¨¦xito. Unos 1.600 balseros haitianos fueron interceptados en el mar en 2008 por las autoridades de EE UU. En Florida son habituales las noticias sobre naufragios tr¨¢gicos, como el registrado el pasado julio en aguas del Caribe, con 15 haitianos desaparecidos. Pero otros logran llegar a salvo a las costas estadounidenses en lanchas r¨¢pidas tras pagar hasta 15.000 d¨®lares (unos 10.500 euros) a contrabandistas cubanos.
El ejemplo de los ni?os hu¨¦rfanos es ahora el m¨¢s significativo. El pasado jueves, la archidi¨®cesis de Miami lanz¨® la idea de una nueva Operaci¨®n Pedro Pan con los hu¨¦rfanos haitianos, como la que en 1960 se llev¨® a cabo con ni?os cubanos para acogerlos en Florida. El pasado 26 de diciembre se cumplieron 49 a?os desde que empezaron a llegar a EE UU los primeros de los m¨¢s de 14.000 menores de entre 5 y 17 a?os enviados desde Cuba. Todos pensaban entonces en un r¨¢pido reencuentro familiar, incluso dentro de Cuba, porque se confiaba en una r¨¢pida ca¨ªda del r¨¦gimen castrista. Para un buen n¨²mero de esos ni?os, la realidad fue muy dura: solos, sin su familia, y a veces sin conseguir integrarse en los hogares de adopci¨®n.
La Iglesia cat¨®lica pide ahora al Gobierno estadounidense que conceda visados por motivos humanitarios para los hu¨¦rfanos haitianos. Pero el Departamento de Ni?os y Familias de EE UU ya ha advertido, por boca de su secretario, George Sheldon, que no ve factible la medida. Se agilizar¨¢n las adopciones oficiales e incluso hay organizaciones humanitarias como 4Kids que est¨¢n buscando familias para programas de acogimiento temporal. Pero no habr¨¢ una invasi¨®n de ni?os haitianos. "Cada caso se ver¨¢ individualmente", precis¨® Sheldon. As¨ª, se permitir¨¢ entrar para recibir atenci¨®n m¨¦dica a ni?os confirmados legalmente como hu¨¦rfanos y que est¨¦n en proceso de adopci¨®n en EE UU o sean candidatos a la misma, explic¨® la secretaria de Seguridad Interior, Janet Napolitano.
S¨®lo los inmigrantes haitianos indocumentados que se encontraban en EE UU antes del terremoto han recibido un permiso de residencia temporal. Hace poco menos de un a?o, cientos de miembros de la comunidad haitiana de Florida protestaban airadamente ante un centro de detenci¨®n para que no fueran deportados 30.000 haitianos sin papeles.
No parecen haber sido suficientes los cuatro huracanes que ha padecido Hait¨ª desde entonces. Ha sido necesario que se registrara un gran terremoto para hacer concesiones a los inmigrantes haitianos.
Las l¨¢grimas de dolor inundaron el fin de semana la Peque?a Hait¨ª, el barrio donde residen la mayor¨ªa de emigrantes de ese pa¨ªs en Miami. La iglesia de Notre Dame, centro de ayuda espiritual y material para las v¨ªctimas del se¨ªsmo, fue visitada el s¨¢bado por el vicepresidente, Joe Biden.
Aunque no existe un censo definido, el n¨²mero de haitianos que viven en EE UU ronda el medio mill¨®n, lo que representa una tercera parte de la emigraci¨®n total procedente del pa¨ªs m¨¢s pobre de toda Am¨¦rica. Ahora, muchos de los haitianos de Florida sue?an con volver a ver a los familiares que no han muerto bajo los escombros.
Espaldarazo a la ONU
El Consejo de Seguridad de la ONU respald¨® ayer de forma un¨¢nime la petici¨®n del secretario general, Ban Ki- moon, de enviar 3.500 efectivos adicionales para reforzar la Misi¨®n de Estabilizaci¨®n de Naciones Unidas en Hait¨ª (Minustah) con el fin de ayudar a mantener el orden y apoyar los esfuerzos humanitarios en el pa¨ªs caribe?o.
La Minustah contar¨¢ a partir de ahora con 12.651 soldados y polic¨ªas, frente a los alrededor de 9.000 que hab¨ªa antes del terremoto. El refuerzo se mantendr¨¢, en principio, durante seis meses.
Los 15 miembros del Consejo de Seguridad (entre permanentes y rotatorios) justificaron la resoluci¨®n por las "nefastas circunstancias y la urgente necesidad de una respuesta" para Hait¨ª. "Estoy (...) agradecido al Consejo por su r¨¢pida acci¨®n", afirm¨® Ban tras la votaci¨®n, considerando que se trata de "una clara se?al de que el mundo est¨¢ con Hait¨ª".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.