CC OO y UGT se rebelan contra el plan del Gobierno

El ajetreado ¨²ltimo viernes de enero ha dejado sobre el tapete un plan para retrasar las jubilaciones y otro de austeridad econ¨®mica, aprobados por el Consejo de Ministros, y la publicaci¨®n de unas desastrosas cifras de paro y empleo en 2009. Las tres cosas han dejado muy mal sabor de boca a los sindicatos, sobre todo en lo que se refiere al retraso de las jubilaciones. La propuesta no ha sido remitida a los representantes de los trabajadores. Ser¨¢ despu¨¦s del debate parlamentario de la subcomisi¨®n del Pacto de Toledo por la que obligatoriamente tiene que pasar cuando puedan meter la cuchara, aunque tanto UGT como Comisiones Obreras tienen fundadas esperanzas de que no lo tengan que hacer porque se habr¨¢ resuelto en la citada subcomisi¨®n que vela por las pensiones.

Los sindicatos exigen que se respeten los acuerdos sociales

Los dirigentes sindicales piden una reforma fiscal para recaudar m¨¢s

"No compartimos la propuesta, esperamos que tras el debate parlamentario no siga adelante", se?ala C¨¢ndido M¨¦ndez, secretario general de UGT. "Y no lo compartimos, primero porque supone un recorte de las prestaciones y segundo porque est¨¢ a contrapelo de la realidad del pa¨ªs", seg¨²n M¨¦ndez. Para este l¨ªder sindical, las estrategias empresariales van precisamente por la v¨ªa de retardar la contrataci¨®n de j¨®venes y de forzar la salida de los mayores de 50 a?os. "Se deber¨ªan discutir medidas para restringir los despidos de los mayores de 50, que dif¨ªcilmente encuentran trabajo", apunta. "El sistema tiene una salud razonable y no justifica cambios", manifiesta Ignacio Fern¨¢ndez Toxo, secretario general de CC OO, que a?ade: "Vamos a plantear una campa?a para que llegue a todas las empresas y que se produzca una reconsideraci¨®n de la propuesta, tambi¨¦n seremos consecuentes, es decir, aplicaremos los acuerdos que ya existen, y esperaremos las conclusiones del Pacto de Toledo; a partir de ah¨ª, si no se modifica el plan seremos beligerantes".

Los dos dirigentes sindicales coinciden al se?alar que existe una jubilaci¨®n flexible que permite adelantar o atrasar y que existe recorrido entre la jubilaci¨®n real y la obligatoria para hacerlas converger. La ley, como recuerdan los sindicatos, ya contempla que se puede incentivar el retraso de la jubilaci¨®n con el 2% cada a?o y con el 3% si tiene m¨¢s de 40 cotizados. Adem¨¢s, la jubilaci¨®n real en Espa?a est¨¢ en los 63 a?os y 10 meses, mientras en Alemania, pa¨ªs que ha puesto en marcha medidas para retrasarla, est¨¢ algo por encima de los 61 a?os.

Seg¨²n Toxo, "siempre que se acomete la viabilidad del sistema p¨²blico de pensiones se acaba recurriendo a la l¨®gica del recorte del gasto, cuando se deber¨ªa hacer por la v¨ªa de los ingresos". M¨¦ndez a?ade otro dato sobre esta discusi¨®n: "De las 30 comparecencias que ha habido en la subcomisi¨®n, la pr¨¢ctica totalidad no ha hablado de retrasar la edad de jubilaci¨®n. Yo, en concreto, propuse recuperar la b¨²squeda de fuentes alternativas de financiaci¨®n manteniendo la cotizaci¨®n como la principal, pero considerarla como exclusiva".

Sobre el plan de austeridad, el l¨ªder de UGT afirma: "Yo creo que el Gobierno ha querido mandar un mensaje a los mercados financieros; pero al Gobierno le han aplastado los acontecimientos y como tiene el cors¨¦ de la UE no ha tenido m¨¢s remedio que tomar medidas. Sin embargo, ten¨ªa que haberse batido el cobre en Europa e intentar que en el denominado Plan de Estabilidad y Crecimiento se conjugue primero el crecimiento que la estabilidad".

El l¨ªder de CC OO recuerda que su sindicato ya sostuvo que "las cuentas que se hab¨ªan incluido en los Presupuestos del Estado no pod¨ªan cuadrar, que el encaje que se hac¨ªa era un espejismo".

Los dos inciden en la necesidad de abordar una reforma fiscal en profundidad para mejorar los ingresos, garantizar el gasto social y acometer el pago de la deuda. "Es preciso hacer un sistema m¨¢s progresivo; buscar f¨®rmulas para mejorar la capacidad de recaudaci¨®n y, en ese sentido, deber¨ªan tenerse en cuenta la ca¨ªda de ingresos por la actividad inmobiliaria, sobre todo en algunas comunidades aut¨®nomas", dice M¨¦ndez. Para Toxo, tambi¨¦n debe "el combate contra el fraude fiscal, de haberlo hecho no estar¨ªamos ante el sinsentido de haber aprobado los Presupuestos y un mes despu¨¦s tomando medidas de ajuste".

La gran pregunta para los sindicalistas es de d¨®nde se recorta. En cualquier caso, ven positivo que se mantenga el compromiso del gasto social, que no lo han tocado como han hecho otros Gobiernos. Pero recuerdan: "Hay que ver si se cumple el compromiso con los empleados p¨²blicos con las retribuciones. Se subi¨® este a?o el 0,3% con el compromiso de la vicepresidenta Fern¨¢ndez de la Vega de recuperar el poder adquisitivo a lo largo de la legislatura, esperemos que lo cumplan". M¨¦ndez remata: "Estamos obligados a pasar de un modelo de factor trabajo a otro de factor productividad y, o se buscan f¨®rmulas para financiar ese cambio de modelo, o todo queda en papel mojado".

Por ¨²ltimo, sobre el paro hay un elemento preocupante: la reducci¨®n de la poblaci¨®n activa y la destrucci¨®n neta de empleo. Los sindicatos est¨¢n comprometidos en el di¨¢logo social tanto bipartito (con la patronal) como tripartito (con la patronal y el Gobierno) para buscar las v¨ªas de conseguirlo y hacer posible el binomio de protecci¨®n del empleo y los salarios, "que no son incompatibles". "Lo mejor para generar confianza es ofrecer un acuerdo con los empresarios que sirva de paraguas para los pr¨®ximos a?os y que regule los salarios (poder adquisitivo), los beneficios empresariales (las inversiones) y el empleo, acabando con la temporalidad. Pero si no hay actividad econ¨®mica, no se crea empleo", completa Toxo.