Ian Carmichael, el digno buf¨®n de la escena brit¨¢nica

Ian Carmichael siempre aspir¨® a que le tomaran en serio, pero nunca lo consigui¨®. Fallecido el 5 de febrero en Grosmont (norte de Inglaterra), a los 89 a?os, fue uno de los c¨®micos brit¨¢nicos m¨¢s populares en los sesenta. Alcanz¨® fama interpretando a una serie de dandis est¨²pidos pero afables que se enfrentaban a situaciones que les superaban. Carmichael se convirti¨® en un icono de la posguerra, manteniendo su dignidad de gentleman en los papeles m¨¢s absurdos. Un buf¨®n que, de alguna manera, siempre consegu¨ªa salir adelante.

Nacido en Hull (1920), estudi¨® en la Royal Academy of Dramatic Art y su debut, en 1939, fue tan ins¨®lito como el resto de su carrera: hizo de robot mudo en RUR, obra de teatro surrealista. Su primera gira, un espect¨¢culo de variedades, se vio interrumpida al ser llamado a filas. Tres d¨ªas despu¨¦s del D¨ªa D desembarcaba como soldado en Normand¨ªa.

"Quer¨ªa ser un protagonista rom¨¢ntico, pero me prefer¨ªan divertido"

Tras la guerra, busc¨® hueco en el cine. Rastreando por superproducciones se le puede encontrar con Clark Gable y Lana Turner en Brumas de traici¨®n (1954), o a las ¨®rdenes de Terence Young en Tempestad sobre el Nilo (1955). Para entonces ya se hab¨ªa dado cuenta de que causaba mejor impresi¨®n cuando actuaba en comedias. Desisti¨® en sus intentos de ser actor de teatro cl¨¢sico y, aunque no las soportaba, protagoniz¨® s¨¢tiras en el West End, donde se ridiculizaban las fobias y pasiones de los londinenses.

Fueron dos hermanos gemelos, los directores y productores John y Roy Boulting, los que le convirtieron en una estrella. Con ellos rod¨® cinco pel¨ªculas consecutivas, destacando Private's Progress (1956) y I'm all right, Jack (1959), en la que compart¨ªa protagonismo con Peter Sellers y Richard Attenborough. Tras este periodo qued¨® definitivamente encasillado como un entra?able buf¨®n.

En los sesenta, conquist¨® la televisi¨®n brit¨¢nica con una serie basada en las novelas de P. G. Wodehouse, The world of Bertie Wooster. Rechaz¨® el papel muchas veces, pero tuvo que aceptarlo cuando su primera (y ¨²nica) incursi¨®n en Broadway fracas¨®. Triunf¨® como Bertie Wooster, memo de clase alta y sonrisa infantil al que su mayordomo sacaba de todos los apuros. Carmichael se ofrec¨ªa a sus productores para adoptar otros registros, pero ¨¦stos no cre¨ªan que pudiese hacer un papel serio sin provocar carcajadas. Su frustraci¨®n toc¨® techo, y empezo a criticar a su propio personaje: "Bertie tiene s¨®lo una faceta: es un maldito idiota".

En los setenta fue lord Peter Wimsey, el detective arist¨®crata de las novelas de misterio de Dorothy Sayers. La serie sirvi¨® para que Carmichael interpretase, por fin, a alguien inteligente. Desde hace 20 a?os viv¨ªa semirretirado,salvo breves apariciones en cine y televisi¨®n. El arquetipo al que hab¨ªa dedicado su vida, el rico tonto que provoca la risa f¨¢cil, ya no hac¨ªa gracia. El humor se mov¨ªa por otros derroteros menos ligeros y m¨¢s ¨¢cidos. En 2003 fue condecorado como oficial del Imperio Brit¨¢nico durante el cumplea?os de la reina Isabel.

Siempre dijo que le hubiese gustado disfrutar del tipo de papeles que normalmente se ofrec¨ªan a Cary Grant: "Quer¨ªa ser un protagonista rom¨¢ntico, pero es dif¨ªcil cuando el p¨²blico quiere que seas divertido todo el rato".