Ferrara, salami y metaf¨ªsica
Un recorrido en bici por la ciudad amurrallada del delta del Po que inspir¨® el cuadro 'Las musas inquietantes'. Pasteler¨ªas y bares de jazz sobre un tel¨®n de fondo sacado de la Edad Media
M¨¢s que por los ojos, Ferrara entra por los o¨ªdos. Antes de la muralla barriguda, del castillo con su foso, del elegante equilibrio de las avenidas renacentistas, encandila su silencio. Rodeado por nueve kil¨®metros de fortificaci¨®n de ladrillo visto y casi completamente peatonal, el casco antiguo vive en un sosiego de una rara fuerza enigm¨¢tica. No por nada sirvi¨® de escenario a la ambigua pintura de Giorgio de Chirico Las musas inquietantes, la primera obra metaf¨ªsica (1916). "En Ferrara tuve una iluminaci¨®n: el castillo dominaba la plaza callada, inm¨®vil", escribi¨® el artista. "Adem¨¢s de la realidad f¨ªsica, percib¨ª la metaf¨ªsica". En este paisaje de hechizo, donde la prisa est¨¢ prohibida, todo el mundo se mueve en bici. As¨ª que la forma aut¨¦ntica de visitarlo es alquilar una.
9.30 Pedales preliminares
La cooperativa Nuovamente alquila sus riciclette en dos oficinas (Corso Porta Po, 180-184 (1), y Via Darsena, 132 (2); www.cafedelapaix.it/ricicletta.htm; 6,50 euros por 24 horas), c¨®modas tanto para quien llega en tren cuanto para quien deja el coche en el aparcamiento gratuito Ex Mof (entrada por Via Darsena, siempre abierto). Ahora s¨ª se puede hincar el diente en el centro redondo como una tarta. La media luna meridional, un enredo de callejuelas, se remonta al medievo; la septentrional, m¨¢s cuadriculada, es un himno a la racionalidad majestuosa del Renacimiento. Los horarios de los museos obligan a invertir el orden hist¨®rico y arrancar por la Addizione Erculea, ampliaci¨®n urban¨ªstica que el duque Ercole I d'Este (1471-1505) encarg¨® al arquitecto Biagio Rossetti.
10.00 Kandinski, en el palacio
La dinast¨ªa estense anim¨® una de las cortes m¨¢s refinadas y cultas de Europa. Las fachadas del Corso Ercole I, v¨ªa principal de la ciudad, reflejan un gusto elegante, pero sobrio; funcional, pero teatral, cuyo ¨¢pice es el precioso palacio dei Diamanti, con su almohadillado de 8.000 bloques de m¨¢rmol. En el piano nobile (la planta noble), la Pinacoteca Nazionale (3) guarda obras desde el medievo hasta el siglo XVIII (Corso Ercole I d'Este, 21; de martes a domingo, de 9.00 a 14.00; jueves, hasta las 19.00; 4 euros). En la planta baja ofrecen exposiciones, del 28 de febrero al 10 de junio, De Braque a Kandinski a Chagall, (abierto todos los d¨ªas, de 9.00 a 19.00; 10 euros; www.palazzodiamanti.it).
11.30 A los pies de la muralla
Del encaje de luz y sombra del Diamanti se pasa al amplio parque Massari (4) (Corso Porta Mare, 65), jard¨ªn a lo ingl¨¦s con fuentes y estatuas. Un recorrido a lo largo de la muralla de Porta degli Angeli (E) hasta Punta de la Giovecca (F) resulta placentero y ¨²til para alcanzar la parte baja de Ferrara. El carril bici sigue la cortina de ladrillos rojos.
12.00 ?Abajo el aburrimiento!
El palacio Schifanoia (7) (Via Scandiana, 23; www.artecultura.fe.it; de 9.00 a 18.00; lunes, cerrado; 6 euros) fue construido en 1385. Su nombre es todo un programa: schifa la noia significa literalmente "rechaza el aburrimiento". Duques y duquesas se dedicaban a tan duras actividades como leer y aplaudir en obras teatrales o conciertos. La sala dei Mesi luce uno de los frescos m¨¢s importantes del siglo XV italiano. Obra colectiva de maestros ferrareses, representa alegor¨ªas de los 12 meses del a?o.
13.00 Calabaza y embutidos
Tanto arte cosquillea el apetito. En el jard¨ªn del palacio existe hoy el Ristorante Schifanoia (www.ristorante-schifanoia-ferrara.com; 00 39 053 26 06 99). Es una gozada sentarse bajo los cerezos y degustar una tabla de embutidos o un pasticcio di maccheroni (pan relleno de macarrones). Si el tiempo no propicia una pausa al aire libre, el m¨¢s refinado Quel Fantastico Giovedi (8) es toda una experiencia culinaria, gracias a los cappellacci di zucca, pasta fresca rellena de calabaza, y al salama da sugo, un embutido de cerdo (Via Castelnuovo, 9; 00 39 0532 76 05 70).
15.00 El gueto
Una buena idea para digerir es perderse por las callejuelas del gueto. La comunidad jud¨ªa de Ferrara es muy antigua. Muchos, expulsados de Espa?a (1492), Portugal (1498) y Alemania (1530), encontraron refugio en la liberal corte estense. Fue el Estado pontificio, que se apoder¨® de la ciudad en 1598, quien encerr¨® a los jud¨ªos. El coraz¨®n del gueto lat¨ªa entre la Piazzetta Lampronti I y las calles Vignatagliata, Vittoria y Mazzini, donde se encuentra el Museo Hebraico (9) junto a una sinagoga (Mazzini, 95; www.comune.fe.it). El recinto que segregaba a los jud¨ªos cay¨® en 1859, pero la posterior persecuci¨®n fascista diezm¨® a una de las comunidades hebreas m¨¢s populosas y floridas de Italia.
16.00 Retorno al medievo
El castillo - J conserva la imponencia, el foso, los puentes levadizos y las torres originales de finales del siglo XIV. Ercole I a?adi¨® elegantes galer¨ªas en piedra blanca, un piso y el techo. Se puede visitar el interior (de 9.30 a 17.30; lunes, cerrado; 7 euros). Entre monumento y monumento, no viene mal regalarse un helado artesanal o un chocolate caliente. La Pasticceria Gelateria Leon d'Oro (11) (Piazza Cattedrale, 8-10) es una instituci¨®n para los vecinos, que suelen quedar en su terraza o llevarse una torta tenerina, de chocolate negro, o un pan pepato, rosca de almendras, cacahuetes y fruta escarchada, toda una obligaci¨®n moral para el turista de paladar fino.
18.00 Sacro y profano
A este para¨ªso profano le hace de contrapunto la catedral (12), construida a partir del siglo XII (de lunes a s¨¢bado, de 7.30 a 12.00 y de 15.00 a 18.30; domingos y festivos, de 7.30 a 12.30 y de 15.30 a 19.30; entrada gratuita). La fachada luce un bell¨ªsimo juicio universal: los muertos salen de sus ata¨²des, el arc¨¢ngel Gabriel pesa las almas, un peque?o demonio intenta forzar el plato de la b¨¢scula, y a los condenados les espera en el infierno el diablo con la boca abierta.
19.30 Jazz y vino tinto
Un estrecho callej¨®n lleva a la que se dice es la osteria (taberna) m¨¢s antigua del mundo. Al Brindisi (13) (Adelardi, 11; abierto todos los d¨ªas, de 11.00 a 1.00) exist¨ªa ya en 1435. Es el lugar perfecto para una copa de vino o para cenar. El Ferrara Jazz Club (14), gracias a la estupenda ambientaci¨®n en un torre¨®n de la muralla y a la fina programaci¨®n, regala momentos inolvidables (Torrione San Giovanni; www.jazzclubferrara.com; bar y restaurante, a partir de las 19.30; conciertos, a las 21.30).
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