Lejos
Este fin de semana se han entregado los C¨¦sar del cine franc¨¦s. Pero como muchos de ustedes habr¨¢n notado y van a notar a lo largo de esta semana, la diferencia en el tratamiento de nuestros medios del cine europeo y del cine norteamericano es espectacular. Da igual que en un caso tengamos un oc¨¦ano por medio y en otro apenas unos kil¨®metros. La industria impone sus intereses y sus prioridades en nuestra mirada de una forma bestial. Tan h¨¢bil que muchas veces ni lo notamos. Somos libres, oigo decir, y las carcajadas resuenan en el continente. De los C¨¦sar, ni un detalle ni un v¨ªdeo en los noticieros m¨¢s importantes. Ya me dir¨¢n el lunes que viene si los Oscar de Hollywood recibir¨¢n un tratamiento similar o m¨¢s bien tienden a la sobredosis. Somos Europa, s¨ª, pero s¨®lo para la crisis bancaria y otras verg¨¹enzas no siempre provocadas en nuestro continente.
Y eso que la gala del cine franc¨¦s siempre contiene el grado de apuesta hortera, de falsa elegancia, de humor blanco que contiene cualquier gala. Con esa habilidad de los vecinos del Norte para tocar el coraz¨®n americano, este a?o concedieron el premio de honor a Harrison Ford, que vive horas bajas en Hollywood y a quien, como a otros antes, Francia recuerda que siempre le quedar¨¢ Par¨ªs. En la gala de este a?o pudimos comprobar que en su quinto galard¨®n la rota en l¨¢grimas Isabelle Adjani cada vez se parece m¨¢s a Liz Taylor. Puede ser una pista del peligro que corren tantas delicad¨ªsimas bellezas francesas como Audrey Tatou o Marion Cotillard. Tuvimos suerte de que la pel¨ªcula ganadora, Un profeta, fuera la ¨²nica estrenada en Espa?a de entre las finalistas principales. As¨ª al menos no nos sentimos tan hu¨¦rfanos de informaci¨®n. Francia es cada vez un pa¨ªs definitivamente mestizo en su cultura popular. El conductor de la gala fue el c¨®mico nacido en Marruecos Gad Elmaleh, y Tahar Rahim, de origen argelino, recibi¨® el premio al mejor actor y al mejor actor revelaci¨®n por la pel¨ªcula de Jacques Audiard. Este actor procede de la serie de televisi¨®n francesa La commune, que retrat¨® con bastante ¨¦xito los bajos fondos suburbiales y en la que participaba ?ngela Molina, pero que en una demostraci¨®n m¨¢s del apag¨®n al que nos vemos sometidos ni lleg¨® por aqu¨ª ni llegar¨¢ jam¨¢s.
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