La crisis baja las muertes por accidente laboral al m¨ªnimo en m¨¢s de 30 a?os

La penuria que vive el mercado laboral desde hace dos a?os ha suavizado uno de los indicadores tradicionalmente m¨¢s adversos: la siniestralidad. Las muertes por accidente de trabajo cayeron a su m¨ªnimo nivel desde que hay datos fiables -m¨¢s de 30 a?os- en 2009, con 826 personas fallecidas, seg¨²n datos del Ministerio de Trabajo. Las cifras, reci¨¦n actualizadas en la p¨¢gina web de este departamento, arrojan un fuerte descenso del 22,4%, atribuible en gran medida a la ca¨ªda de la actividad, que reduce el n¨²mero de ocupados. Se trata, por tanto, de una mejora pasiva de los riesgos laborales.

Aunque todos los accidentes caen respecto a 2008, la mayor reducci¨®n (casi el 24%) se produjo en los que requirieron baja. El motivo es que las actividades ligadas a la construcci¨®n, m¨¢s propensas a lesiones graves, han sufrido un mayor retroceso que otras, lo que reduce el peso de los casos m¨¢s graves sobre el total. La menor siniestralidad laboral afecta tanto a los accidentes en jornada de trabajo (632) como a los in it¨ªnere (los que se producen en el trayecto de casa al trabajo o viceversa, 194). Sumados los dos grupos, los fallecimientos quedan lejos de los 1.000 por a?o que hasta ahora siempre se hab¨ªan superado.

Los accidentes laborales llevan desde 2005 registrando reducciones significativas. Entonces, en pleno auge econ¨®mico, la menor virulencia de los datos se asociaba al impulso de Gobierno, sindicatos y patronal por luchar contra la siniestralidad, una de las mayores lacras del mercado de trabajo. Pero desde 2007, las reducciones responden casi exclusivamente a la destrucci¨®n de empleo, pues el ¨ªndice de incidencia de los accidentes mortales (el n¨²mero de fallecidos por cada 100.000 afiliados, m¨¢s indicativo de las tendencias) se ha mantenido en 5,1. Falta por conocer el dato de 2009, que no figuraba en el avance conocido ayer. La mejora de la siniestralidad laboral se convierte as¨ª en un reflejo autom¨¢tico del menor pulso econ¨®mico, pues las medidas para combatirla se han visto desplazadas en los ¨²ltimos a?os por otras m¨¢s centradas en atajar el paro.

Casi la mitad de las muertes en jornada laboral corresponde al sector servicios, el que emplea a m¨¢s personas, aunque el 26,3% se produce en la construcci¨®n. En los a?os del boom inmobiliario, este sector concentraba un porcentaje mayor de fallecimientos, cercano a un tercio del total.

Lejos del accidente tipo asociado a la ca¨ªda del andamio, los infartos y los accidentes de tr¨¢fico causan m¨¢s de la mitad de todos los siniestros. El resto se reparte entre atrapamientos, choques y otras causas. Los hombres son, en su inmensa mayor¨ªa (el 94,6%), las principales v¨ªctimas de las muertes durante la jornada de trabajo.