El PP propone una soluci¨®n para las cajas que choca con Feij¨®o y Camps

Despu¨¦s de mucho tiempo de ambig¨¹edades, el PP se moj¨® ayer de manera definitiva en el asunto de las cajas de ahorro. Tanto, que choc¨® de frente con el rumbo que mantienen algunos de sus m¨¢s poderosos barones auton¨®micos, como Alberto N¨²?ez Feij¨®o, presidente de Galicia, o Francisco Camps, de la Comunidad Valenciana.

Ambos promueven fusiones de cajas dentro de sus comunidades: Caixa Nova y Caixa Galicia por un lado, Bancaja y CAM por otro, mientras el Gobierno y el Banco de Espa?a impulsan una fusi¨®n Caja Madrid-CAM-Caixa Galicia. Rajoy, despu¨¦s de decir que la fusi¨®n gallega "obligar¨ªa a cerrar un porr¨®n de oficinas", cambi¨® de opini¨®n y acept¨® la idea de Feij¨®o. Hace s¨®lo un mes, el l¨ªder del PP dijo en Badajoz: "Si se quiere fusionar las cajas de Galicia, estoy de acuerdo. El Gobierno no tiene que poner pegas si sale una entidad solvente".

Los populares pretenden devolver al Estado control sobre las entidades

El partido expone un documento que da pasos hacia la privatizaci¨®n

Sin embargo, el PP ha cambiado el rumbo totalmente. Y ahora est¨¢ m¨¢s cerca del Gobierno. Lo que plantea el documento presentado ayer por Crist¨®bal Montoro supone devolver al Estado parte del control sobre las cajas en detrimento de las comunidades. Hasta el punto de proponer la creaci¨®n de cajas de "¨¢mbito nacional" para "facilitar fusiones entre cajas de distintas comunidades".

El boom inmobiliario dop¨® el crecimiento de las cajas de ahorros. Y la crisis fuerza ahora el ajuste. La v¨ªa menos dolorosa es la fusi¨®n, que el Gobierno apoya con dinero p¨²blico a trav¨¦s del Fondo de Reestructuraci¨®n Ordenada Bancaria (FROB). Pero la crisis tambi¨¦n ha evidenciado la dificultad de culminar fusiones entre entidades de distintas comunidades, sobre todo cuando cada Gobierno regional quiere aprovechar la ocasi¨®n para empujar la creaci¨®n de una ¨²nica entidad en su territorio bajo control auton¨®mico.

Incluso la secretaria general del PP, Mar¨ªa Dolores de Cospedal, mantiene una actitud entre ambigua y contradictoria al hablar de Caja Castilla-La Mancha con dos versiones, una en Madrid y otra en Toledo.

La propuesta del PP no se anda con rodeos. Plantea eliminar "el veto auton¨®mico" para las fusiones que requieran el apoyo del FROB. Y propone dar a organismos p¨²blicos estatales la supervisi¨®n de ese "nuevo tipo de cajas" de ¨¢mbito nacional, un atajo cuando las comunidades aut¨®nomas obstaculicen las fusiones. Tampoco reh¨²ye el debate sobre la naturaleza jur¨ªdica de las cajas, tan querido por el PP nacional y tan problem¨¢tico cuando el asunto se traslada a los barones auton¨®micos.

El documento da pasos firmes hacia la privatizaci¨®n de las entidades por dos v¨ªas. En las nuevas integraciones que usan ficha bancaria para constituir la entidad (el Sistema Institucional de Protecci¨®n), se permitir¨ªa combinar el capital fundacional de las cajas "con aportaciones de mercado". Y a las cuotas participativas, instrumentos que permiten a las cajas captar capital en el mercado, se les dar¨ªa "derechos pol¨ªticos".

A pesar del evidente viraje, no parece que el PP haya logrado convencer a sus barones, especialmente al gallego, para que cambien de opini¨®n. Fuentes de la Xunta de Galicia insist¨ªan ayer en que ellos siguen adelante con la apuesta por una fusi¨®n dentro de la comunidad.

El PP de esta comunidad se queda con el apoyo p¨²blico de Rajoy a la fusi¨®n gallega, y ayer asegur¨® que no ve el documento incompatible con esa idea. Pero el texto se?ala claramente que hay que eliminar el veto auton¨®mico a las fusiones, precisamente lo contrario de lo que el Gobierno gallego ha reclamado.