Pi?era dedicar¨¢ su Gobierno a la reconstrucci¨®n del pa¨ªs

El terremoto y maremoto del s¨¢bado pasado marcar¨¢n la agenda de tres de los cuatro a?os de duraci¨®n que tendr¨¢ el Gobierno de derechas encabezado por el presidente electo, Sebasti¨¢n Pi?era, quien asumir¨¢ el poder en una semana, el jueves 11. En una reuni¨®n con el futuro gabinete ministerial, Pi?era advirti¨® a sus ministros que el programa de Gobierno se deber¨¢ readecuar a las tareas de seguridad, abastecimiento y reconstrucci¨®n del pa¨ªs.

La ceremonia de traspaso de mando del pr¨®ximo jueves ser¨¢ austera, seg¨²n acordaron en una reuni¨®n la presidenta Michelle Bachelet y Pi?era. Ambos han actuado sin mayores roces entre ellos desde el terremoto, aunque ¨¦stos s¨ª han existido entre algunos miembros de sus equipos m¨¢s cercanos. A la secretaria de Estado de EE UU, Hillary Clinton, Bachelet ya le inform¨® de que Chile requerir¨¢ cr¨¦ditos blandos para abordar la reconstrucci¨®n, a pesar de que esta tarea no la efectuar¨¢ su Administraci¨®n. Pi?era ha pedido a sus ministros moderar las cr¨ªticas y mostrar su apoyo a la tarea del Gobierno.

El presidente electo dise?a un plan para tres de los cuatro a?os de mandato

Los empresarios se dan prisa para restablecer los servicios b¨¢sicos

Los analistas coinciden en que a Bachelet le ha correspondido hacer frente a la parte m¨¢s compleja de las consecuencias del terremoto, el embate mismo de la naturaleza y las primeras medidas paliativas, donde ya han surgido algunas cr¨ªticas por la lentitud en las decisiones. Bachelet se ha defendido esgrimiendo la magnitud de la crisis, su extensi¨®n territorial y humana, y el destrozo causado a las infraestructuras y las comunicaciones.

En cambio, a Pi?era le corresponder¨¢ ser presidente en el per¨ªodo de la reconstrucci¨®n, con una econom¨ªa que cuenta con recursos suficientes para abordar las tareas sin desequilibrar las finanzas p¨²blicas. Las inauguraciones y cortes de cintas quedar¨¢n en manos de su Gobierno. El presidente electo dej¨® a cargo de su futuro ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, la primera prioridad, el problema de la seguridad y el abastecimiento de alimentos, agua potable y electricidad. Pi?era ha comentado que es partidario de ampliar a otras regiones el estado de excepci¨®n, que permite el uso de tropas y aplicar el toque de queda.

Reunidos ayer con Bachelet, los m¨¢ximos dirigentes empresariales del pa¨ªs se comprometieron a trabajar para recuperar la normalidad lo antes posible. El Banco Santander prometi¨® una l¨ªnea de cr¨¦dito de 2.345 millones de euros. Los empresarios informaron al p¨²blico que no es necesario comprar v¨ªveres para almacenar porque existen reservas suficientes y ¨¦stas pronto comenzar¨¢n a ser distribuidas con la regularidad previa a la cat¨¢strofe.

Justamente esa normalidad es lo que empez¨® a percibirse ayer en Concepci¨®n, la ciudad m¨¢s cercana al epicentro y escenario de violencia en las ¨²ltimas 48 horas. Los pillajes se acabaron por la mano dura del Ej¨¦rcito y la polic¨ªa. Ayer reabrieron dos supermercados y otros ocho empezar¨¢n a funcionar en los pr¨®ximos d¨ªas. Las compras con tarjeta de cr¨¦dito se pueden efectuar si problema.

Una buena noticia tambi¨¦n supuso el rescate con vida de 79 personas de entre los escombros del edificio que se derrumb¨® por completo en Concepci¨®n a consecuencia del terremoto. El comandante de Bomberos Juan Carlos Subercaseaux ha informado de que apenas unas seis personas se encuentran desaparecidas, las cuales se podr¨ªan encontrar en los 20 apartamentos que faltan por revisar del edificio de 15 plantas que qued¨® reducido a escombros.

"Tem¨ªamos que un centenar de personas hubieran muerto al desplomarse el edificio, pero gracias a Dios el n¨²mero es mucho menor", dijo Subercaseaux, al detallar que s¨®lo han hallado siete cad¨¢veres. El edificio Alto R¨ªo de Concepci¨®n ha sido uno de los inmuebles m¨¢s afectados por el terremoto y el posterior maremoto que desat¨® y que se han cobrado la vida de 800 personas en Chile.

Pero el miedo sigue latente. A ¨²ltima hora de ayer, la ciudad vivi¨® una fuerte r¨¦plica y una alerta de maremoto, que, aunque result¨® falsa, puso la ciudad patas arriba durante media hora. "A los cerros, a los cerros", dec¨ªa la gente. La ministra de Vivienda, Patricia Poblete, coment¨® ayer en el centro de Concepci¨®n que iban a tener que demoler varios edificios. A su lado, el arquitecto Oswaldo Arenas achacaba a la relajaci¨®n en la aplicaci¨®n de la norma de construcci¨®n antis¨ªsmica el hecho de que haya tantos edificios nuevos afectados. "Se construy¨® mucho al l¨ªmite de la normativa", dijo. El general Guillermo Ram¨ªrez, jefe m¨¢ximo de la ciudad en estos d¨ªas, decidir¨¢ cu¨¢ndo se har¨¢n algunas de las demoliciones.

En el cuartel de carabineros la gente espera para llamar gratuitamente a sus familiares o para preguntar por los detenidos durante los saqueos de las noches pasadas. "Por suerte vinieron los milicos, se acab¨® el tab¨² chileno", dice el gerente del hotel Almagro, completamente lleno pero sin luz ni agua pese a que el tel¨¦fono y la electricidad volvieron ayer a parte de la ciudad. No hay agua pero s¨ª wifi. De ah¨ª las colas kilom¨¦tricas de gente cargando garrafas hacia las fuentes p¨²blicas y hacia las gasolineras, custodiadas por tanquetas del Ej¨¦rcito.

Al lado del hotel Almagro, media docena de militares hac¨ªan guardia en la puerta del supermercado Unimarc, arrasado el s¨¢bado. La misma suerte corri¨® el s¨²per Santa Isabel, una calle m¨¢s arriba, y la tienda de vestidos La Polar. "El siguiente era yo, pero llegaron ellos y se arregl¨®", dice el gerente, que no se ha movido del hotel desde el s¨¢bado. "?Se me nota?", pregunta toc¨¢ndose la barba. Mientras habla se produce la r¨¦plica. Se mueve el suelo. Cae una figura de yeso del hall. Poco m¨¢s. "?Grado siete?", aventura como quien colecciona sismos.