Energ¨ªa y color h¨²ngaro

La danza tradicional h¨²ngara posee unas caracter¨ªsticas de fuerza, dise?o e identidad ancestrales que la han hecho tener su reflejo tanto esc¨¦nico como dentro de la m¨²sica culta. En los ballets de Tchaikovsky o Delibes, por ejemplo, no faltan sus metros y estilos particulares, como en toda la tradici¨®n cor¨¦utica del baile escol¨¢stico de car¨¢cter; algunos estudios lo asocian, en origen lineal, al baile flamenco primigenio.

El espect¨¢culo Nagyida tiene la estructura y la est¨¦tica de un musical contempor¨¢neo; es divertido, ¨¢gil y se impone una din¨¢mica grupal que arrasa sobre cualquier destaque solista. Es as¨ª que, aun siendo demasiado largo (m¨¢s de dos horas), el tiempo pasa al ritmo endiablado y potente que tiene h¨¢bilmente mezclado en sus genes lo z¨ªngaro, tanto en lo pl¨¢stico como en lo gestual.

El core¨®grafo S¨¢ndor R¨®-man se siente evidentemente influenciado por la danza celta y otros bailes ajenos en s¨ª mismos al poso balc¨¢nico y propio del acerbo magiar, de modo que mezcla con libertad elementos que hoy est¨¢n aceptados dentro del mundo global del espect¨¢culo de divertimento, apto para los m¨¢s peque?os, que ven un sinf¨ªn de aventuras y situaciones que recuerdan cuentos de tradici¨®n.

El argumento del sitio de la fortaleza de Nagyida por las tropas austriacas es llevado al terreno fant¨¢stico, donde la resistencia cobra un valor simb¨®lico y se diluye en una curiosa y l¨²dica aceptaci¨®n de la derrota.