Malabares econ¨®micos y pol¨ªticos
En Roda de Bar¨¤ (Tarragona), la deuda de sus 6.000 habitantes quita el sue?o a la alcaldesa, Mayte Huerta. Deben 2.379 euros cada uno. Est¨¢n desbordados. La recaudaci¨®n por licencia de obras se ha esfumado, pero las facturas por los servicios b¨¢sicos de una urbanizaci¨®n construida durante las vacas gordas -y que permanece a medio habitar- siguen llegando. Y las de los proveedores, que cada vez tardan m¨¢s en cobrar. Los fondos de inversi¨®n local les dieron un respiro. Pero s¨®lo un tiempo. Se plantearon hacer incluso un Expediente de Regulaci¨®n de Empleo para 40 trabajadores, que no prosper¨®. A la falta de liquidez a?aden los problemas para aplicar un plan de saneamiento. "No tenemos el apoyo de la oposici¨®n para presentarlo a la Generalitat", lamenta Huerta, que se pone nerviosa con s¨®lo pensar que su municipio, el tercero m¨¢s ahogado de Catalu?a, es se?alado de nuevo como ejemplo del desastre en las arcas municipales. Lo peor de todo es que Roda de Bar¨¤ no es un caso excepcional en Catalu?a. En Santa Susanna (Barcelona) deben 9,5 millones de euros. En Castells-Plaja D'Aro (Girona), 18,5 millones. Y as¨ª hasta m¨¢s de tres centenares de municipios, que en 2008 estaban en mayor o menor medida con el agua al cuello en cuesti¨®n de deudas. Toca hacer malabares presupuestarios y pol¨ªticos, para acordar planes de saneamiento. En 2007, s¨®lo cinco municipios pidieron aplicarlos. Un a?o despu¨¦s, ya lo demandaron 33, seg¨²n la Generalitat.
Cada Ayuntamiento ha recorrido un camino distinto hacia las deudas. En algunos casos pasa por macrourbanizaciones, en otros por guarder¨ªas o por un crecimiento desmesurado de la plantilla municipal.
En Tiurana (Lleida), los pr¨¦stamos llegaron con la construcci¨®n de las piscinas. Al alcalde, ?ngel Villarte, no le importa que le pregunten c¨®mo puede ser que su localidad, con s¨®lo 78 habitantes, sea la s¨¦ptima con m¨¢s deudas por persona de Espa?a. "Ya sabe, mejor que hablen de uno, aunque sea para mal", bromea. Le encanta que la gente sepa que existen, aunque sea porque acumula 335.000 euros en pr¨¦stamos. Y es que Tiurana estuvo a punto de desaparecer. El pantano de Rialb aneg¨® el pueblo en 1995. En 2001 empez¨® a resucitar, reconstruido fuera de las aguas. "No me preocupan los pr¨¦stamos, porque no es una deuda real. En el pueblo construimos unas piscinas, y para pagar a los proveedores, y que no tuvieran que esperar al dinero de la Generalitat, pedimos un pr¨¦stamo y adelantamos el dinero", recuerda Villarte. De eso hace tiempo, y la Administraci¨®n ya ha devuelto parte del capital. "Pero decidimos no cancelar el pr¨¦stamo. Es al 1% de inter¨¦s. ?Qui¨¦n encuentra ahora algo as¨ª?", plantea. Tienen deuda, s¨ª, pero los impuestos del pantano les aportan unos 180.000 euros al a?o. "Aqu¨ª a¨²n hay mucho por hacer. Cuando el pueblo tenga todo lo que hace falta, ya veremos si cancelamos el pr¨¦stamo", zanja.
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