El actor trasatl¨¢ntico
Eduardo Blanco, hijo de gallegos y uno de los habituales del cine del 'oscarizado' Campanella, pide m¨¢s proyectos culturales entre su tierra de origen y Argentina
Salt¨® a la fama con su papel c¨®mico en El hijo de la novia, del ahora oscarizado Juan Jos¨¦ Campanella, pero Eduardo Blanco es un actor de dilatada trayectoria que en los ¨²ltimos a?os ha aprovechado el ¨¦xito para participar en proyectos cinematogr¨¢ficos a ambos lados del Atl¨¢ntico. Cruzar el oc¨¦ano se ha convertido en algo casi rutinario para ¨¦l, alguien que tiene el viaje transatl¨¢ntico en su ADN porque es hijo de gallegos que buscaron una nueva oportunidad en Argentina. Su relaci¨®n con la tierra de sus padres cambi¨® a partir del momento en que viaj¨® a Lal¨ªn y visit¨® la tumba de su abuela donde no pudo reprimir las l¨¢grimas: "Ah¨ª me di cuenta de que uno no es s¨®lo de donde nace sino tambi¨¦n de donde tiene a sus muertos". En los ¨²ltimos tiempos Blanco se ha convertido en una especie de embajador no oficial de la cultura gallega en Buenos Aires y su presencia es habitual en actos p¨²blicos que tienen relaci¨®n con la que considera su tierra tanto como la Argentina en la que naci¨® y vive.
"Uno no es s¨®lo de donde nace sino tambi¨¦n de donde tiene a sus muertos"
"Deber¨ªa implicarse a los j¨®venes para dejar atr¨¢s la Galicia de los chistes"
Entre los trabajos que forman su filmograf¨ªa se encuentran las pel¨ªculas El mismo amor, la misma lluvia y Luna de Avellaneda, dirigidas ambas por Campanella y realizadas en Argentina, y la serie espa?ola Aqu¨ª no hay quien viva. Curiosamente, pese a su fuerte vinculaci¨®n con Galicia no ha participado en ning¨²n proyecto con capital gallego ni ha rodado en la comunidad aut¨®noma. "He rodado en casi toda Espa?a pero no en Galicia. Hubo alguna oportunidad que no lleg¨® a concretarse pero en alg¨²n momento tiene que surgir alg¨²n proyecto para realizar all¨¢", explica Blanco, que hace pocas semanas volvi¨® a visitar Espa?a para participar como invitado en la gala de los premios Goya.
Blanco no encuentra diferencias significativas entre trabajar como actor en Espa?a y Argentina. "Hay m¨¢s diferencias entre trabajar para una productora u otra que la que pueda existir entre los pa¨ªses", comenta. De lo que est¨¢ seguro es que los estrechos v¨ªnculos entre espa?oles y argentinos permitir¨ªan incrementar la colaboraci¨®n entre ambas orillas del Atl¨¢ntico, tanto en el cine como en otros campos de la cultura. "Creo que son necesarios m¨¢s apoyos por parte de las instituciones para que puedan surgir de forma espont¨¢nea mas proyectos en los que se mezclen ambos mundos". En esta l¨ªnea recuerda la existencia de ayudas como el plan Ra¨ªces, que espoleaba la realizaci¨®n de proyectos audiovisuales con participaci¨®n de recursos humanos y financieros gallegos y argentinos. "Habr¨ªa que seguir trabajando en esa l¨ªnea", a?ade.
Respecto a la imagen que tienen los gallegos hoy en Argentina, Blanco considera que a¨²n sigue vigente el t¨®pico que identifica a ¨¦stos con gente poco ilustrada, pero cree que eso es algo que tambi¨¦n significa una oportunidad para dar a conocer la Galicia de hoy y demostrar que las cosas han cambiado mucho. "Yo no me enfado cuando me cuentan un chiste de gallegos. Es algo que forma parte de nuestra historia e incluso lo he vivido dentro de mi propia familia, que eran gente de campo, pero eso lejos de avergonzarme lo que hace es enorgullecerme porque supieron salir adelante pese a las carencias que ten¨ªan", explica el actor, quien considera necesario hacer una labor para que las nuevas generaciones de origen gallego que est¨¢n naciendo en Argentina conozcan mejor la tierra de sus antepasados. "Ser¨ªa important¨ªsimo que se hagan m¨¢s proyectos conjuntos y que impliquen a gente de las nuevas generaciones para acabar de dejar atr¨¢s la Galicia de los chistes", concluye.
Blanco considera que la reciente concesi¨®n del Oscar a la ¨²ltima pel¨ªcula de Campanella, El secreto de sus ojos, puede ser una oportunidad para que el cine hecho en castellano siga ganando terreno. "El idioma nos une a 600 millones de hablantes en todo el mundo y tenemos que defenderlo. Uno de los terrenos en los que hay que actuar es en la distribuci¨®n y la exhibici¨®n porque no todo consiste en producir pel¨ªculas sino tambi¨¦n en tener salas donde exhibirlas. Los pol¨ªticos tienen que generar condiciones para que un productor arriesgue su dinero y haga una pel¨ªcula en espa?ol", se?ala el actor. Blanco no particip¨® en El secreto de sus ojos pese a ser uno de los actores con los que cuenta habitualmente Campanella, pero eso no evit¨® que haya participaci¨®n gallega en la pel¨ªcula. "Mi hijo est¨¢ presente con un peque?o papel as¨ª que se puede decir que los gallegos tambi¨¦n aportamos algo al Oscar", comenta Blanco entre risas.
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