Las 'viudas negras', la nueva arma de los terroristas

Las mujeres se han convertido en la otra cara del terror. Son Las viudas negras de Chechenia: esposas, hermanas o hijas de los ca¨ªdos en los enfrentamientos de 1994 y 2000. La participaci¨®n femenina en atentados suicidas atribuidos a la insurgencia del C¨¢ucaso Norte ya no es una tendencia. En la ¨²ltima d¨¦cada, cerca del 40% de los ataques han sido obra de f¨¦minas.

Para Magnus Ranstorp, uno de los mayores expertos internacionales en terrorismo, la intervenci¨®n de cuatro mujeres en los ataques de ayer contra el metro de Mosc¨² apunta directamente a las viudas negras y remite al v¨ªnculo ¨¦tnico. Pese a las vacilaciones iniciales del Gobierno del presidente Dimitri Medv¨¦dev, Ranstorp, director de uno de los centros del Instituto Sueco de Defensa, ve en estas mujeres un motivo m¨¢s para descartar la influencia de Bin Laden en la lucha independentista. "Nunca ha habido muchos extranjeros de Al Qaeda, a pesar de algunos que, como Mohamed Atta [ide¨®logo del 11-S], quer¨ªan unirse, inicialmente, a la lucha en en C¨¢ucaso", asegura.

Desde 2000, la guerrilla ha convertido a las chechenas en un arma. El informe sobre mujeres suicidas de Pedro Ba?os, profesor del Centro Superior de Estudios de la Defensa, recoge que para las mujeres es m¨¢s f¨¢cil pasar desapercibidas, levantan menos sospechas y no les impulsa una idea, sino el desamparo y la venganza. Tanto la propaganda rusa como la chechena han utilizado ambos argumentos, atribuyendo a las suicidas un fanatismo radical o una absoluta desesperaci¨®n. Solas, no tienen nada que perder.

El ¨²ltimo objetivo, una estaci¨®n cercana a las oficinas del servicio de inteligencia ruso, es, adem¨¢s, "ilustrativo del hecho de que quieren golpear simb¨®licamente movidas por la venganza", explica Ranstorp. Las mujeres han protagonizado casi la mitad de los ataques de la insurgencia cauc¨¢sica contra Rusia desde 2002, cuando la irrupci¨®n de medio centenar de militantes (22 de ellos mujeres) en el teatro Dubrovka dej¨® 117 muertos. Un a?o despu¨¦s, en junio de 2003, Zarema Muzhakhoyeva, la esposa de 22 a?os de un independentista checheno fallecido, se convirti¨® en la primera viuda negra. "No os odiaba antes, os odio ahora, y cuando vuelva os har¨¦ volar a todos", dijo tras sobrevivir a un atentado fallido.

"Con frecuencia son mujeres pr¨®ximas a los terroristas", explica a France Presse Vladimir Vassiliev, jefe del comit¨¦ de seguridad de la Duma (c¨¢mara baja del Parlamento). El fen¨®meno no se circunscribe al C¨¢ucaso. El terrorismo femenino llega a Sri Lanka, Irak o Palestina, incluso se vincula a la amenaza islamista en los ¨²ltimos a?os, ya se trate de militantes radicales o j¨®venes repudiadas. Entre las viudas tambi¨¦n hay embarazadas, madres solteras o incluso deficientes mentales que son chantajeadas para inmolarse por la causa, ha contado Yulia Yuzik, autora de Las novias de Al¨¢. Seg¨²n la periodista rusa, s¨®lo una de cada diez est¨¢ dispuesta a morir por una idea.