Desaf¨ªo extremo para las aves

El cambio clim¨¢tico est¨¢ provocando en las aves, desde las ¨²ltimas d¨¦cadas, unos efectos similares a los que produjeron varios milenios de glaciaciones. Al igual que entonces, las especies capaces de adaptarse al entorno ser¨¢n las que, a medio plazo, sobrevivir¨¢n. Las que no lo hagan tienen muchas probabilidades de extinguirse o, al menos, que su poblaci¨®n sufra un grave descenso. Peter Marra, investigador del centro Smithsonian para la investigaci¨®n de las aves migratorias en Washington (EE UU), cree que la situaci¨®n de las aves es "muy preocupante" y que, en el pr¨®ximo medio siglo, "veremos cambios muy importantes". Ian Newton, de la Universidad de Oxford, va m¨¢s all¨¢: "Los expertos hablan de que el 20% de las especies de aves podr¨ªan extinguirse, yo creo que ese ser¨ªa el m¨¢ximo".

Los expertos reunidos en Algeciras para el segundo congreso de migraci¨®n de aves y cambio clim¨¢tico trataron los efectos del calentamiento global en las aves y constataron que una especie de ave, la curruca capirotada, ya ha experimentado cambios gen¨¦ticos para adecuarse a la nueva situaci¨®n clim¨¢tica. El investigador de la Universidad Complutense Francisco Pulido es el responsable de esta investigaci¨®n.

El cambio clim¨¢tico est¨¢ planteando un desaf¨ªo extremo a las aves, que tienen dos opciones: mutar para adaptarse a la nueva situaci¨®n o cambiar su comportamiento y su h¨¢bitat. Las que no puedan hacerlo evolutivamente tendr¨¢n que cambiar tanto sus zonas de cr¨ªa, como su invernada y los tiempos en que ¨¦stas se producen. Los m¨¢s de 200 expertos reunidos en Algeciras han debatido estos cambios y Miguel Ferrer, presidente de la Fundaci¨®n Migres (organizadora del evento) ha asegurado que m¨¢s de 20.000 millones de aves est¨¢n cambiando ya sus h¨¢bitos migratorios. Entre las aves m¨¢s afectadas por su poca capacidad de adaptaci¨®n se encuentran especies peque?as como el colirrojo y el papamoscas cerrojillo, cuyas poblaciones ya se han reducido hasta un 80% en los pa¨ªses del centro de Europa.

El presidente de Migres asegura que el estrecho de Gibraltar es un laboratorio inigualable de observaci¨®n de las aves -en sus escasos kil¨®metros confluyen dos mares, corrientes, y es atravesado cada a?o por m¨¢s de 30 millones de aves de 380 especies- y cree que estos animales son un instrumento perfecto para medir los efectos del cambio clim¨¢tico y una oportunidad para conocer el escenario futuro e intentar evitarlo.

Las aves est¨¢n cambiando las fechas de migraci¨®n, acortando las distancias y con ellas muchas posibilidades de aumentar la biodiversidad. Ferrer cree que peligra "el propio fen¨®meno de la migraci¨®n". La cig¨¹e?a blanca, por ejemplo, est¨¢ dejando de emigrar a ?frica y se queda en Espa?a, donde sus ratios de poblaci¨®n est¨¢n aumentando considerablemente. Tambi¨¦n han dejado de cruzar el Estrecho y se consideran sedentarias a causa del calentamiento global el ¨¢guila calzada y la culebrera.

En el otro sentido, tambi¨¦n hay aves que tradicionalmente se quedaban en ?frica y ahora est¨¢n llegando a Europa, como el buitre de rupell o el ratonero moro. Pero no s¨®lo modifican su comportamiento las aves migratorias; Ferrer asegura que el 39% de las especies sedentarias estudiadas tambi¨¦n ha cambiado sus ¨¢reas de reproducci¨®n.

Los expertos ornit¨®logos han valorado los adelantos tecnol¨®gicos. "Hemos podido realizar el seguimiento de la aguja colinegra, un ave que recorre m¨¢s de 17.000 kil¨®metros sin parar gracias a la nueva tecnolog¨ªa", afirma Ferrer.