Una investigaci¨®n m¨¦dica encallada

El doctor Miguel Mu?oz asegura que se qued¨® "descompuesto" el primer d¨ªa que un compa?ero del Hospital Virgen del Roc¨ªo de Sevilla fue a buscarlo a la UCI pedi¨¢trica, donde trabaja, para que le ayudara a frenar el linfoma que padec¨ªa su hijo. Era el a?o 2003, Mu?oz llevaba m¨¢s de 15 a?os investigando en sus horas libres un tratamiento contra el c¨¢ncer, pero nunca hab¨ªa aplicado en humanos sus hallazgos de laboratorio. Acababa de salir al mercado el aprepitant, un medicamento que act¨²a como un antagonista de la sustancia P (una mol¨¦cula presente en el organismo) en los receptores NK-1, el mecanismo en el que se asientan los estudios de Mu?oz. "Hab¨ªa publicaciones que nos permit¨ªan saber que hasta 300 miligramos al d¨ªa de este f¨¢rmaco no hac¨ªan da?o, as¨ª que probamos", recuerda Mu?oz. El m¨¦dico afirma que en aquel ni?o enfermo, que ten¨ªa cuatro a?os y estaba desahuciado, ya no hay ni rastro del c¨¢ncer.

"No puedes tratar por desesperaci¨®n, es contrario a la ¨¦tica", dice Rocha

"Es un martirio que cada persona con c¨¢ncer me busque", afirma Mu?oz

Este fue el primero de los tres casos que Mu?oz y su compa?era de investigaci¨®n, Marisa Rosso, incluyeron en el anteproyecto que remitieron a la Agencia Espa?ola de Medicamentos para que autorizara un ensayo cl¨ªnico sobre los efectos anticancerosos del aprepitant. El visto bueno lleg¨® el 7 de julio de 2005, pero el estudio a¨²n no ha empezado. Y mientras, el equipo de Mu?oz ha asesorado a m¨¢s de una decena de pacientes en el uso de aprepitant en altas dosis para tratar los tumores.

"Me ha buscado todo el mundo, me piden ayuda, no puedo hacer otra cosa", sostiene el m¨¦dico, que asegura que su "¨²nico af¨¢n" es ayudar a los pacientes. "Trabajo en la UCI, me dedico a investigar por las tardes y los fines de semana, pero no cobro por ello", cuenta Mu?oz, que se reconoce "muy enfadado" por la actitud, a su juicio despectiva, de algunos responsables del Servicio Andaluz de Salud hacia sus estudios. "Llevo 25 a?os investigando, tenemos decenas de publicaciones en las revistas m¨¢s prestigiosas y un ensayo aprobado por todas las instancias que no sabemos por qu¨¦ no ha empezado", se lamenta.

El retraso en el inicio del ensayo fue ya en 2006 objeto de una queja ante el Defensor del Pueblo Andaluz, que se resolvi¨® instando a la Consejer¨ªa de Salud a que pusiera en marcha el estudio. A la vista de que la situaci¨®n sigue igual, la oficina de Chamizo se plantea ahora reabrir esta queja.

La causa de la dilaci¨®n hay que buscarla en la falta de entendimiento entre el equipo de investigadores y Salud. Mu?oz patent¨® en 2004 el uso antitumoral del aprepitant. "Yo no me he llevado 25 a?os investigando para que otros abusen de la gente", advierte. Pero el m¨¦dico asegura ahora que est¨¢ dispuesto a ceder la patente al SAS a cambio de que su equipo disfrute de un buen porcentaje de los posibles beneficios futuros del f¨¢rmaco, que el ensayo empiece en 15 d¨ªas y que lo financie la Junta.

Salud considera que esta propuesta del m¨¦dico, recibida el mes pasado, es "inasumible", en palabras del secretario general de Calidad y Modernizaci¨®n de la Consejer¨ªa de Salud, Jos¨¦ Luis Rocha. "Cualquier servicio de salud est¨¢ deseando que uno de sus profesionales haga un descubrimiento potencialmente relevante", admite Rocha, que cree que la culpa de que el ensayo no haya empezado parte de la "actitud singular" de Mu?oz y su equipo. Frente a la falta de apoyo p¨²blico y las zancadillas que denuncian los investigadores, el secretario de Calidad considera que el grupo "ha rechazado cualquier posibilidad de acuerdo" y ha actuado con "falta de rigor y de metodolog¨ªa".

"Cuando alguien quiere hacer un ensayo necesita dos cosas: la autorizaci¨®n de la Agencia Espa?ola de Medicamentos y financiaci¨®n", a?ade. Mu?oz tiene lo primero, pero le falta el dinero y, seg¨²n Rocha, la Junta no tiene constancia de que se haya presentado a ninguna convocatoria p¨²blica de financiaci¨®n de ensayos. "Quieren que lo financiemos directamente nosotros y eso no lo hacemos nunca, no podemos". Adem¨¢s, advierte de que la autorizaci¨®n de la agencia estatal ya est¨¢ caducada y que "habr¨¢ que empezar de cero". "Se han perdido cinco a?os", concluye Rocha.

Al margen de la tardanza en el inicio del ensayo, la Junta est¨¢ investigando los casos en los que Mu?oz y su equipo han asesorado a enfermos para el uso de aprepitant como antitumoral. Se conocen seis usos compasivos autorizados por la agencia estatal para el Virgen del Roc¨ªo y otros tres para el Virgen de las Nieves de Granada. "Nunca se debi¨® autorizar el uso compasivo sin conocer la toxicidad del f¨¢rmaco. T¨² no puedes tratar por desesperaci¨®n, esto es contrario a cualquier postulado ¨¦tico", advierte Rocha. Mu?oz, sin embargo, recuerda que si los usos compasivos se han hecho "al margen de la ley" es responsabilidad "del ministerio o de los m¨¦dicos que los firmaron".

Para el secretario de Calidad, "a¨²n m¨¢s grave" que los usos compasivos es que los investigadores hayan "colaborado" en casos en los que las familias han costeado el f¨¢rmaco al no contar con la aprobaci¨®n de la agencia estatal. Los investigadores insisten en que ellos son los primeros que quieren que todo se normalice. "Lo ¨²nico que deseamos es que se haga el ensayo. No puedo seguir viviendo as¨ª, que cada persona que tenga un c¨¢ncer en su familia venga a buscarme. Es un martirio", afirma Mu?oz.