La culpa es del erotismo

En su intento por apaciguar el esc¨¢ndalo de los sacerdotes pederastas en M¨¦xico, la jerarqu¨ªa cat¨®lica de este pa¨ªs s¨®lo ha tenido en los ¨²ltimos d¨ªas salidas en falso. Primero, se?alaron que el "libertinaje" de la sociedad es una de las causas. "Tratando de explicar" esa declaraci¨®n, el obispo Felipe Arizmendi, de San Crist¨®bal de las Casas (Chiapas), dijo que ante la "invasi¨®n de erotismo no es f¨¢cil mantenerse en el celibato y en el respeto a los ni?os".

A rega?adientes, la Iglesia cat¨®lica mexicana comienza a reconocer lo que se negaba a ver: que el fallecido Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo, fue un depredador sexual que abus¨® de ni?os y j¨®venes (se ha denunciado qeu incluso de sus hijos).

El "libertinaje" de la sociedad mexicana, agregaron pastores cat¨®licos, es fomentado por la educaci¨®n sexual que imparte el Estado. El cardenal Norberto Rivera, arzobispo de la Ciudad de M¨¦xico, afirm¨® que no tendr¨¢n tolerancia con los pederastas. Pero hay varias denuncias ante las que en su momento, este purpurado no hizo lo que estaba en sus manos para llevarlos a los tribunales.