Madrid, capital del granito

Rafael Moneo, el ¨²nico premio Pritzker espa?ol, equivalente al Nobel de arquitectura, dec¨ªa durante un reciente paseo por la Gran V¨ªa, al llegar a la Red de San Luis: "A veces nos estamos pasando en superficie pavimentada". Una reflexi¨®n que ampli¨® a la nueva plaza de Callao: "Estos pavimentos son demasiado primarios, demasiado duros. Antip¨¢ticos".

El modelo tradicional de plaza en el que exist¨ªa una intenci¨®n de combinar el pavimento duro con materiales terrizos y zonas verdes -como la plaza de la Paja- est¨¢ desapareciendo en todos los nuevos proyectos del Ayuntamiento. Las plazas son ahora explanadas gigantes de piedra, secas y duras. ?Por qu¨¦ tanto granito en las calles cuando las torna grises, retiene la suciedad, reproduce el calor y no drena?

"Lo ¨²nico que no favorece el aumento de temperatura y que es drenante son las superficies terrizas, pero si llueve se embarran y con mucho calor se seca y levantan mucho polvo", indica Jos¨¦ Luis Infanz¨®n, subdirector de Proyectos Singulares del ?rea de Urbanismo, que tuvo que redactar un informe sobre las virtudes del granito para calmar las reclamaciones vecinales contra su uso en el proyecto Madrid-R¨ªo en el que participa.

La memoria ensalza la resistencia del material a la rotura por congelamiento y su superficie rugosa antideslizante. Es esta rugosidad, precisamente, la que favorece que la superficie mantenga la mugre y los chicles pero, seg¨²n Infanz¨®n, "no hay pavimentos exteriores que no retengan la suciedad y si existen son inseguros para los peatones".

El arquitecto Carlos de Ria?o, coautor del proyecto Eje-Recoletos, reconoce que "hay un exceso de pavimento duro" y que es "partidario de mezclarlo con suelos terrizos", pero que "hay que mantenerlos". Otro arquitecto, Tito Alonso, aprueba el dise?o de los nuevos espacios, pero advierte que "hay que evitar las playas de granito" y apela al an¨¢lisis, el dise?o y la consideraci¨®n de otros materiales para conseguir "plazas m¨¢s an¨®nimas y menos de autor".