Las comunidades se aplican en el ajuste del sector p¨²blico
El ahorro se centra en consejer¨ªas y entes regionales
Los mercados pisan los talones a la Administraci¨®n, pagana del terremoto financiero. Con la crisis fiscal en su apogeo, a Gobierno, comunidades y ayuntamientos no les queda otra que aligerar a toque de corneta su estructura administrativa. Las agencias de calificaci¨®n de riesgos y los organismos internacionales dudan de la capacidad de ajuste de los Ejecutivos aut¨®nomos, dada la tendencia a aumentar su per¨ªmetro en los ¨²ltimos a?os, ya sea por la asunci¨®n de competencias (sanidad, educaci¨®n, dependencia) vinculadas al crecimiento demogr¨¢fico, ya sea por decisiones propias. Pero las medidas adoptadas en los ¨²ltimos meses, aunque sea de forma desigual, dicen otra cosa.
La ca¨ªda de ingresos se agrava, en el caso de las comunidades aut¨®nomas, porque a partir de 2011 tendr¨¢n que devolver lo que el Gobierno les dio de m¨¢s el a?o pasado por una err¨®nea estimaci¨®n de la recaudaci¨®n fiscal. Las estimaciones sobre cu¨¢l ser¨¢ el retorno a las arcas estatales fluct¨²a entre los 20.000 y los 25.000 millones de euros. Adem¨¢s, Gobierno y comunidades est¨¢n revisando los Presupuestos para 2010 con la idea de reconducir el d¨¦ficit auton¨®mico del 2,5% al 1,3% en cuatro a?os.
S¨®lo dos Gobiernos han elevado tasas o impuestos para mejorar ingresos
Las autonom¨ªas mantienen el gasto en servicios esenciales
Esos ajustes ya se han plasmado en los planes de reequilibrio de 10 comunidades, aprobados hace un mes. Algunas comunidades han hecho oficial el recorte (Extremadura, 368 millones), otros se han divulgado por la oposici¨®n (Cantabria, 60 millones) o la prensa local (Arag¨®n, casi 100 millones por excesos en la previsi¨®n de ingresos). Seg¨²n la vicepresidenta econ¨®mica, Elena Salgado, s¨®lo Navarra se librar¨¢ de hacer un ajuste adicional, mientras que Madrid no debe presentar plan alguno, por no superar un d¨¦ficit del 0,75% del PIB.
El Gobierno central ha postergado a la pr¨®xima semana su plan para reorganizar su estructura administrativa, aunque ha descartado, por ahora, reducir ministerios. Las comunidades aqu¨ª llevan trabajo adelantado. "Hemos reducido cinco consejer¨ªas y 22 direcciones generales", aducen en la Consejer¨ªa de Econom¨ªa (PP) madrile?a.
En los ¨²ltimos cambios de Gobierno priman las fusiones de departamentos. Alberto N¨²?ez Feij¨®o (Galicia, PP) pas¨® de 13 a 10 consejer¨ªas. Jos¨¦ Antonio Gri?¨¢n (Andaluc¨ªa, PSOE), de 15 a 13. Baleares (PSOE) ha fusionado Medio Ambiente y Ordenaci¨®n Urban¨ªstica. Jos¨¦ Mar¨ªa Barreda (Castilla-La Mancha, PSOE) baj¨® de 14 a 10 hace dos a?os. Y Murcia (PP) se ha quedado en nueve, tres menos que la pasada legislatura.
El siguiente objetivo son los entes p¨²blicos, que en las comunidades han crecido a un ritmo elevado (un 28% en seis a?os), con especial atenci¨®n a las empresas p¨²blicas, las que m¨¢s transferencias se llevan. La Junta extreme?a las reducir¨¢ de 18 a seis antes de que acabe el a?o. En Galicia, 48 entes se quedar¨¢n en el camino. Asturias ha limitado a 25 millones anuales las transferencias a las empresas p¨²blicas.
Todas las comunidades presentar¨¢n antes de junio un plan de racionalizaci¨®n de su sector p¨²blico. En la Generalitat catalana, por ejemplo, est¨¢n a la espera de las conclusiones de un grupo de trabajo formado por cinco expertos.
En los ingresos, las medidas son m¨¢s t¨ªmidas: Castilla y Le¨®n ha revisado al alza sus tasas y precios p¨²blicos; Cantabria ha recuperado parte del impuesto de sucesiones y ha elevado del 7% al 8% el tipo de los impuestos patrimoniales.
Pero en el gasto, la panoplia es amplia: renegociaciones para rebajar alquileres o los servicios de telecomunicaciones, concentraci¨®n de sedes, recortes de inversi¨®n (el presupuesto de la Consejer¨ªa catalana de Obras P¨²blicas se redujo a la mitad este a?o), congelaci¨®n generalizada de sueldos de altos cargos, tijeretazos en protocolo y suscripciones, y paralizaci¨®n de cualquier mejora en los equipamientos.
En empleo p¨²blico, el Gobierno marca los objetivos (moderaci¨®n salarial y limitar la oferta a cubrir el 10% de las vacantes), pero alguna comunidad, como Baleares o Madrid han congelados acuerdos en educaci¨®n y sanidad, ¨¢reas en las que el pacto estatal con los sindicatos permite excepciones. Y un mensaje se repite. En palabras de un portavoz de la Consejer¨ªa de Hacienda catalana: "El esfuerzo para reducir el gasto se hace blindando las partidas vinculadas a la financiaci¨®n de servicios esenciales del Estado de bienestar que, no hay que olvidar, son de competencia auton¨®mica".
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