El 'hijab' no es problema en Almer¨ªa
La vestimenta de las mujeres musulmanas nunca ha sido pol¨¦mico por s¨ª misma
Karima Chaddoudi evoca el caso de Najwa y no duda. Si a alguna de sus tres hijas la apartaran de la escuela por usar el hiyab la apoyar¨ªa hasta el final. "Exigir¨ªa respeto. No hay derecho a molestar a una cr¨ªa por una decisi¨®n que a nadie afecta", afirma esta marroqu¨ª que preside la asociaci¨®n de Mujeres Inmigrantes de Almer¨ªa. "Aqu¨ª no hay ese tipo de problemas. Algunos compa?eros a veces se burlan, pero nada m¨¢s", sostiene. Sus palabras las comparte la comunidad educativa, que ni depara en el uso del pa?uelo. Empez¨® a lucirse en los noventa, cuando ya hac¨ªa a?os que la inmigraci¨®n crec¨ªa al ritmo que lo hac¨ªa el mar de pl¨¢stico almeriense. Desde entonces, y pese a contar con una tasa de alumnos inmigrantes del 16,3%, no se ha contabilizado en Almer¨ªa ni un caso de alumnas apartadas o cuestionadas por llevar el hiyab, asegura la Delegaci¨®n de Educaci¨®n.
Educaci¨®n dice que ninguna ni?a ha sido cuestionada por la citada prenda
Las ¨²nicas quejas se han registrado en algunas clases de Educaci¨®n F¨ªsica
Colectivos de inmigrantes y de musulmanes, directores, padres y alumnos avalan esta versi¨®n. "Me ha llamado la atenci¨®n lo ocurrido en Pozuelo por la total libertad que hay aqu¨ª". Jes¨²s E. Rodr¨ªguez, director del IES Alhamilla, en la capital, oye en la radio el aluvi¨®n de noticias que ha generado el caso de Najwa mientras ve a una alumna con un hiyab rojo. "No aprecias lo normales que son las cosas hasta que lo contrario te lo recuerda", reflexiona tras lo ocurrido en el Camino Jos¨¦ Cela de Madrid.
Con 850 alumnos, el 10% de ellos inmigrantes, este centro defiende un lema: "la libertad religiosa es la libertad religiosa". En esta l¨ªnea, afirma, se mueven el 99,9% de los centros de la provincia, entre ellos el IES Las Norias de El Ejido, donde el 60% del alumnado es inmigrante. "El respeto a las creencias y la no discriminaci¨®n se han inculcado de forma progresiva y son valores con los que convivimos diariamente". Su m¨¢ximo responsable, Francisco Montoya, resume: "Hay tolerancia total".
De ello dan fe Llariane, Nadia y Khadija, tres alumnas del centro en el que cien adolescentes se cubren con el hiyab. Una empez¨® a llevarlo en enero. Otra, presume de hab¨¦rselo puesto por primera vez seis a?os atr¨¢s. "Aqu¨ª, nunca ha pasado nada, nadie se mete con nosotras", narran sobre el pa?uelo, que llevan porque les "gusta", dicen pizpiretas. Su instituto limita el uso del hiyab para algunos ejercicios de gimnasia por cuestiones de seguridad. Esta materia es la ¨²nica relacionada con el pa?uelo por la que se han generado quejas: tres en toda la provincia entre este curso y el anterior.
"Han sido casos puntuales resueltos sin conflicto, porque aqu¨ª no lo hay. La integraci¨®n es palpable y se lucha por ella", afirma Rom¨¢n Puentes, presidente de la Federaci¨®n de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Almer¨ªa. "La convivencia est¨¢ instaurada", defiende antes de opinar que este "¨¦xito" parte apuesta por la ense?anza p¨²blica en Andaluc¨ªa. La formaci¨®n constante y de a?os a equipos directivos, profesorado, padres y alumnos en convivencia y resoluci¨®n de conflictos ha hecho el resto.
En Almer¨ªa, el uso del hiyab est¨¢ tan interiorizado que la comunidad educativa ni se plantea que pueda generar conflicto. Cualquier otro planteamiento, afirman, "debe partir de cierto desconocimiento, porque no vemos explicaci¨®n a la restricci¨®n desde el punto de vista formativo". El debate lo zanja el director del IES Las Norias con una reflexi¨®n que abre un interrogante. "No me veo con clarividencia para decidir si su uso es o no adecuado. ?Qui¨¦n puede tener esta capacidad?".
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