Feij¨®o aparca su doctrina de campa?a

En el tramo final de la legislatura pasada, el PP present¨® en un juzgado de Santiago una denuncia por la v¨ªa penal -basada en un informe de Agust¨ªn Hern¨¢ndez y que firmaba el tesorero Luis B¨¢rcenas-, contra la adjudicaci¨®n de la autov¨ªa del Barbanza aprobada por la Conseller¨ªa de Pol¨ªtica Territorial de Mar¨ªa Jos¨¦ Caride. Bast¨® con que el juez decano de Santiago, Javier M¨ªguez Poza -viejo conocido del PP, casado con una de sus concejales en Ames- aceptase a tr¨¢mite la denuncia en febrero de 2008 con un auto incendiario, de tres folios, que imputaba a cuatro funcionarios de la conseller¨ªa y advert¨ªa de "numerosos indicios de delito". El PP, con su presidente a la cabeza redobl¨® la campa?a contra el bipartito y exigi¨® a Touri?o que apartase de cualquier contrataci¨®n a Caride. Seg¨²n los populares, el bipartito estaba "lleno de imputados por pr¨¢cticas corruptas", singularmente "la mitad de la conseller¨ªa de Caride".

A medida que se acercaban las auton¨®micas, las acusaciones subieron de tono hasta que, en septiembre de 2008, Feij¨®o habl¨® directamente de "adjudicaci¨®n ama?ada a empresas amigas" y pidi¨® directamente la dimisi¨®n de Caride.Pasadas las elecciones, con Feij¨®o de vuelta en la Xunta, M¨ªguez Poza archiv¨® esa causa, que ni siguiera lleg¨® a juicio. Empezaron entonces los l¨ªos judiciales para el PP, que cambi¨® radicalmente de discurso: Feij¨®o ya no cree que haya que adoptar disciplinas contra sus imputados.