Depredadores contumaces
Asesinatos, encarcelamientos, secuestros, exilios, amenazas, agresiones, cierres de medios de comunicaci¨®n... Cifras penosas, y en aumento, que pesan sobre los periodistas en todo el mundo. En poco m¨¢s de un mes, siete periodistas han sido asesinados en Honduras, convertido ya en el pa¨ªs m¨¢s peligroso del mundo para estos profesionales; cuatro en M¨¦xico en lo que va de a?o. En las c¨¢rceles de Cuba permanecen presos 25 periodistas, y m¨¢s de un centenar fueron encarcelados el a?o pasado en Ir¨¢n, donde 26 contin¨²an todav¨ªa entre rejas. Sin contar los 50 que han tenido que exiliarse a la carrera, pr¨¢cticamente con lo puesto.
?Qu¨¦ est¨¢ pasando con la libertad de prensa en el mundo? ?Por qu¨¦ tantos gobernantes, monarcas, militares, traficantes, polic¨ªas, terroristas y organizaciones criminales de todo tipo, tienen patente de corso para cometer tropel¨ªas sin par? ?D¨®nde ha quedado la defensa por los pa¨ªses democr¨¢ticos, por sus l¨ªderes pol¨ªticos, instituciones y ciudadanos, del sacrosanto derecho a la libertad de expresi¨®n e informaci¨®n promulgada en la Declaraci¨®n Universal de los Derechos Humanos y recogida en sus Constituciones? Porque no es inusual que gobernantes dem¨®cratas sin tacha se fotograf¨ªen sonrientes, y sin que se les caiga la cara de verg¨¹enza, con alguno de los protagonistas de la lista de Depredadores de la Libertad de Prensa que hoy publica Reporteros Sin Fronteras, coincidiendo con el D¨ªa Internacional de la Libertad de Prensa. Se comprende que los intereses econ¨®micos pesan m¨¢s que los derechos humanos que se han comprometido a defender, pero ?puede un ministro espa?ol sonre¨ªr junto al dictador Teodoro Obiang, "el dios de Guinea Ecuatorial", que mantiene un control f¨¦rreo sobre la informaci¨®n -el pa¨ªs s¨®lo cuenta con un corresponsal extranjero, estrechamente vigilado- y escuchar c¨®mo ataca a los periodistas espa?oles sin que se le altere el gesto?
Honduras, con siete periodistas asesinados, es ahora el pa¨ªs m¨¢s peligroso para estos profesionales
Se puede alegar que estas cosas no pasan en los pa¨ªses democr¨¢ticos, que semejantes lindezas est¨¢n reservadas a las dictaduras, a los pa¨ªses fallidos o en guerra. No se lo crean. Aunque evidentemente las dictaduras y sus conocidos d¨¦spotas se llevan la palma, en la lista de depredadores hay tambi¨¦n pa¨ªses con el marchamo de dem¨®cratas donde los periodistas no pueden ejercer libremente su profesi¨®n sin arriesgar la vida o la libertad. Pa¨ªses como Italia, Espa?a, Israel o M¨¦xico. Sus depredadores son grupos terroristas, como ETA en Espa?a -todav¨ªa varias decenas de periodistas trabajan y viven con escolta-, o mafias, como en Italia, donde las denuncias del autor de Gomorra, Roberto Saviano, amenazado de muerte -igual que Lirio Abbate, autor de Los c¨®mplices, y la periodista de Il Mattino de N¨¢poles, Rosaria Capacchione-, no han logrado inmutar al gran acaparador de la comunicaci¨®n italiana, p¨²blica y privada, Silvio Berlusconi. El jefe de Gobierno italiano amenazaba en noviembre pasado con "estrangular" a los autores de pel¨ªculas y libros como Gomorra, porque colaboran a la popularidad de la mafia y dan una mala imagen de Italia.
?Y qu¨¦ decir del primer ministro ruso Vlad¨ªmir Putin, firme partidario del "control" de los medios de comunicaci¨®n -en 2009 asesinaron en Rusia a cinco periodistas-, o del todopoderoso presidente chino Hu Jintao, a quien cortejan los l¨ªderes de todos los pa¨ªses democr¨¢ticos, porque los millones de consumidores chinos nublan la visi¨®n de sus c¨¢rceles que encierran, entre centenares de disidentes, a 30 periodistas y numerosos internautas, alguno tan famoso como Liu Xiabo?
No nos enga?emos. Estas son s¨®lo algunas de las cabezas m¨¢s visibles, pero hay otros depredadores que amenazan la libertad de prensa. Menos cruentos pero tambi¨¦n letales. Son los que con la disculpa de la crisis econ¨®mica aprovechan para aligerar plantillas en los medios de comunicaci¨®n, ?y de qu¨¦ forma!; para pagar salarios irrisorios; para utilizar "enviados especiales" a los sitios en conflicto, que en realidad son colaboradores mal equipados, mal pagados, y sin protecci¨®n alguna; para acongojar a los periodistas hasta el punto de convertirles en sumisos y acr¨ªticos profesionales.
Los que pregonan y ensalzan la gratuidad de la informaci¨®n en Internet, como si el trabajo period¨ªstico riguroso y de calidad surgiera por generaci¨®n espont¨¢nea y no necesitara de grandes inversiones. Y no se puede negar que la crisis econ¨®mica, que coincide con la tecnol¨®gica, est¨¢ siendo dura con los medios de comunicaci¨®n, en especial con los de papel impreso. Pero no la convirtamos en la gran coartada, porque acabaremos tirando piedras contra la libertad de prensa que necesita de profesionales cr¨ªticos, adem¨¢s de honestos. Y un periodista acobardado es un periodista obediente, y una f¨¢cil presa de la autocensura.
En la lista de Depredadores de Reporteros Sin Fronteras, hay 40 nombres. La mayor¨ªa repiten de a?os anteriores, Ahmadinejad, Ra¨²l Castro, Gaddafi, Hu Jintao, Teodoro Obiang, el mul¨¢ Omar... Son los contumaces, los que no quieren desertar del galard¨®n de figura sin escr¨²pulos. Ya se sabe, ellos no tienen que dar, o no dan, cuentas a nadie. Y esa seguridad es no s¨®lo una de las mayores amenazas que pesan contra la libertad de expresi¨®n, los periodistas y los medios de comunicaci¨®n, sino tambi¨¦n sobre la democracia. Porque sin una prensa libre, sin unos periodistas libres, no hay democracia posible.
Mal¨¦n Azn¨¢rez es vicepresidenta de Reporteros Sin Fronteras-Espa?a.
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