No s¨®lo de experiencia vive un t¨¦cnico
El ¨¦xito de Pascual representa el valor a?adido que a veces supone conocer 'la casa'
La experiencia es un grado. Sin duda. Si se presenta con una buena hoja de servicios, a¨²n m¨¢s. Pero ni te asegura el ¨¦xito ni invalida otros caminos. Ser¨¢ por cierto conservadurismo o por tener a mano la excusa de haber apostado por un gran nombre, la idea de que un gran club o una gran selecci¨®n deben ser dirigidos por gente baqueteada, talluda y que haya demostrado c¨®mo se gana un gran t¨ªtulo sigue siendo predominante, por lo que casos como el de Xavi Pascual, forjado en un modesto equipo de la LEB, el Aracena, y perfeccionado como segundo en el propio Bar?a, siguen siendo m¨¢s excepci¨®n que regla. Incluso hay que recordar que al ahora exitoso t¨¦cnico azulgrana le tembl¨® la silla unos meses. Su elecci¨®n para llevar el tim¨®n una vez que la situaci¨®n con Dusko Ivanovic se volvi¨® irrespirable no se torn¨® apuesta firme hasta que Ettore Messina rechaz¨® el puesto un a?o antes de aceptar el del Madrid. Y cuando el CSKA fue verdugo europeo del Bar?a m¨¢s de una cr¨ªtica apunt¨® hacia la desventaja de Pascual respecto a Messina u otro cl¨¢sico, Zeljko Obradovic.
Inevitable compararle con Guardiola. Les une la identificaci¨®n con su club de toda la vida
Aunque hubiese algo de carambola, la solvencia y la naturalidad con que Pascual ha manejado el equipo, su entorno, la prensa, los egos y su relaci¨®n con Chichi Creus desmiente la necesidad de a?os de formaci¨®n en la alta competici¨®n como ¨²nica v¨ªa hacia los grandes logros y nos acerca a un personaje muy respetable pese a su corta trayectoria. Aunque no le guste en exceso, la comparaci¨®n con Pep Guardiola es inevitable, pues les une su identificaci¨®n y compromiso con su club de toda la vida y comparten ideas principales de su filosof¨ªa, como la fidelidad a un estilo como base. Ante la experiencia adquirida en otros clubes por los afamados entrenadores, gente como Pascual contrapone un gran conocimiento de los mecanismos de la casa, cuesti¨®n importante para entender que Ivanovic triunfe en Vitoria y fracase en Barcelona.
El trabajo de Pascual desde febrero de 2008, cuando relev¨® a Ivanovic, ha sido impecable. En la inmediata reconstrucci¨®n deportiva y an¨ªmica de un cojunto en muy mal estado para irlo puliendo y completando en los dos siguientes cursos con ideas y fichajes casi siempre acertados. En su elegante comportamiento, tanto en la cancha como p¨²blicamente con sus jugadores o en sus apariciones en los medios, no se le conocen ataques de divismo. Y, por supuesto, en la apuesta por un baloncesto que no se alimente s¨®lo de victorias, sino de juego. Bajo su mando, seguro que m¨¢s fuerte de lo que muestran sus suaves maneras, el Bar?a ha vuelto a convertirse en la referencia, cuesti¨®n que viene bien para que jugadores desequilibrantes, ante sus muchas opciones, fichen por la tuya.
Con el t¨ªtulo de la Euroliga, Xavi Pascual, de 37 a?os, barcelon¨¦s de Gav¨¤, completa una historia que deber¨ªa servir de ejemplo para algunos clubes y de acicate para un mont¨®n de t¨¦cnicos que se declaran en desventaja respecto a las vacas sagradas de este deporte o, simplemente, los extranjeros.
El ¨¦xito es una ecuaci¨®n compleja y la experiencia es s¨®lo una de sus muchas variables. No estar¨ªa de m¨¢s que no se le diese m¨¢s valor del que tiene, pues esto limitar¨ªa las posibilidades para que los otros Xavi Pascual que habr¨¢ por ah¨ª tengan su oportunidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.