Camps vuelve a ser juzgado por cohecho

Francisco Camps, presidente de la Comunidad Valenciana, regres¨® ayer a las puertas del banquillo de los acusados por un supuesto delito de cohecho impropio. Regres¨® al mismo lugar donde le dej¨® el juez Jos¨¦ Flors, que investig¨® el caso. El mismo lugar del que le sacaron dos magistrados del Tribunal Superior de Justicia, uno de ellos el presidente de este organismo, Juan Luis de la R¨²a, que decidieron archivar la causa, ahora reabierta por el Supremo. La sospecha de corrupci¨®n amenaza la carrera pol¨ªtica de Camps pero, seg¨²n anunci¨® ayer, se siente "con fuerza para seguir liderando el PP" y cuenta con el apoyo de su jefe pol¨ªtico, Mariano Rajoy.

En su retorno como imputado a la causa judicial derivada del caso G¨¹rtel le acompa?an Victor Campos, su ex vicepresidente; Ricardo Costa, ex secretario general y ex portavoz parlamentario del PP; y Rafael Betoret, ex jefe de gabinete de la Consejer¨ªa de Turismo. Todos ellos recibieron trajes, americanas y pantalones durante varios a?os de ?lvaro P¨¦rez, El Bigotes, presidente de Orange Market, la empresa de la trama corrupta a la que el Gobierno valenciano adjudic¨® a dedo decenas de contratos durante cuatro a?os.

La Sala Penal da la raz¨®n al Ministerio P¨²blico contra el archivo de la causa

El Bigotes gast¨® 30.000 euros en trajes para los cuatro altos cargos

La Sala Penal del Tribunal Supremo acord¨® ayer, por unanimidad de sus cinco miembros, dar la raz¨®n al ministerio fiscal contra el archivo de la investigaci¨®n abierta a Camps, Costa, Campos y Betoret por haber aceptado trajes como regalo de ?lvaro P¨¦rez, el "amiguito del alma" del presidente valenciano. La sentencia del Supremo, que se har¨¢ p¨²blica en los pr¨®ximos d¨ªas, acepta el primer motivo de casaci¨®n esgrimido por la fiscal¨ªa, por indebida aplicaci¨®n de la relaci¨®n de causalidad exigida en el art¨ªculo 426 del C¨®digo Penal, relativo al delito de cohecho impropio.

El Tribunal Superior de Valencia no acept¨® que hubiese una relaci¨®n de causalidad entre la d¨¢diva admitida (los trajes) y la funci¨®n p¨²blica desempe?ada por los imputados. Seg¨²n el Tribunal de Valencia, para que se diese esa relaci¨®n resultaba preciso la concurrencia de un acto por parte de la autoridad o funcionario en atenci¨®n a la d¨¢diva admitida, o bien que el regalo se hubiese entregado en recompensa de un acto ya realizado. El Bigotes gast¨® 30.000 euros en trajes para los cuatro altos cargos del Gobierno valenciano a partir de que la facturaci¨®n de su empresa se multiplicara por 10 como consecuencia de la adjudicaci¨®n de contratos por distintas consejer¨ªas de la Comunidad Valenciana. Pese a este hecho comprobado, dos de los tres magistrados del Tribunal Superior de Valencia entendieron que los regalos no eran en agradecimiento de los contratos recibidos.

El fiscal aleg¨® que esa interpretaci¨®n vaciar¨ªa de contenido el delito de cohecho impropio, pues no ser¨ªa sancionable la admisi¨®n de regalos por funcionarios o autoridades cualquiera que fuera su valor: tanto si era un inmueble, un veh¨ªculo de lujo o un mill¨®n de euros. Incluso en supuestos como el de la trama G¨¹rtel, en el que, seg¨²n el fiscal, consta acreditada una contrataci¨®n superior al mill¨®n de euros anuales entre la Administraci¨®n p¨²blica a la que pertenecen los imputados y las empresas de los particulares que habr¨ªan entregado los regalos.

Seg¨²n expuso el fiscal en su recurso, la jurisprudencia del Supremo estima cometido el delito de cohecho impropio del art¨ªculo 426.1 "cuando el regalo se acepte por raz¨®n del cargo del funcionario, sin requerir la realizaci¨®n de acto alguno por parte de este". Con ello, lo que se pretende es "poner en n¨®mina" al beneficiario, coloc¨¢ndole en la situaci¨®n de absoluto agradecimiento a su benefactor, de tal forma que cuando con posterioridad se le pida que realice actos a favor del donante, sean estos cuales sean, aquel no tenga posibilidades f¨ªsicas o morales para negarse. Estos argumentos del fiscal le llevan a discrepar tambi¨¦n del archivo acordado respecto de Costa. Para el fiscal, Costa ostenta tambi¨¦n la condici¨®n de autoridad como miembro del Parlamento valenciano, sin que, a los efectos del art¨ªculo 426 se establezca diferencia alguna entre miembros del Ejecutivo o del Legislativo. La "situaci¨®n relevante de Costa en el PP ser¨ªa exactamente igual de la que pudiera predicarse de Camps, Campos y Betoret en la Generalidad", se?al¨® el fiscal.