Los jefes de los servicios europeos de espionaje dise?an su futuro en Madrid

El parador de Alcal¨¢ de Henares (Madrid) acogi¨® el pasado 5 de mayo la cumbre menos publicitada de la presidencia espa?ola de la UE: la que reuni¨® a los jefes de los principales servicios de espionaje europeos. Ni una fotograf¨ªa, ni una nota de prensa, ni una referencia en la web oficial, en la que se rese?an hasta los m¨¢s nimios encuentros de bur¨®cratas y expertos. Y, sin embargo, la categor¨ªa de los invitados reunidos en Alcal¨¢ hizo que acudiera a saludarlos la vicepresidenta primera del Gobierno, Mar¨ªa Teresa Fern¨¢ndez de la Vega. All¨ª estaban los m¨¢ximos responsables de los principales servicios de inteligencia interior de Europa: el Mi5 brit¨¢nico, la Oficina Federal de Defensa de la Constituci¨®n alemana (BfV), la Direcci¨®n Central de Inteligencia Interior francesa (DCRI), la Agencia de Inteligencia y Seguridad Interna italiana (AISI) o el Centro Nacional de Inteligencia espa?ol (CNI), que actu¨® como anfitri¨®n. En total, 29 servicios secretos, todos los de la UE m¨¢s los de Noruega y Suiza, que forman parte del CTG (Grupo Contraterrorista), creado tras los atentados del 11-S en EE UU.

La amenaza del terrorismo 'yihadista' fue el eje del encuentro

Los miembros del CTG se re¨²nen, con tanta discreci¨®n que casi nunca trasciende, dos veces al a?o, en el pa¨ªs que ostenta la presidencia semestral de la UE. Procede del llamado Club de Berna, un foro informal que durante d¨¦cadas sirvi¨® para propiciar el contacto entre los jefes de los servicios de espionaje occidentales, pero se ha especializado en la puesta en com¨²n de an¨¢lisis de inteligencia sobre el riesgo que representa la irrupci¨®n del terrorismo yihadista; sus procedimientos, m¨¦todos de financiaci¨®n o sistema de reclutamiento.

La cita de Alcal¨¢ de Henares coincidi¨® con el atentado frustrado de Times Square (Nueva York), lo que volvi¨® a poner sobre la mesa la dificultad de neutralizar a este enemigo invisible, pero la principal novedad fue la presencia en el plenario del coordinador antiterrorista europeo, el belga Gilles de Kerchove.

El anterior Alto Representante para la Pol¨ªtica Exterior y de Seguridad Com¨²n (PESC), el espa?ol Javier Solana, cre¨® el SitCen (Centro de Situaci¨®n) como una oficina encargada de suministrar informaci¨®n sensible y an¨¢lisis de inteligencia al Consejo Europeo. Sin embargo, la entrada en vigor del Tratado de Lisboa, el pasado 1 de diciembre, brinda la oportunidad de dar un salto cualitativo, ya que prev¨¦ la creaci¨®n de un Servicio Europeo de Acci¨®n Exterior (SEAE) o la adopci¨®n de una pol¨ªtica de defensa com¨²n.

"Los servicios de espionaje ser¨¢n, probablemente, el ¨²ltimo reducto de la soberan¨ªa de los Estados, mucho m¨¢s remisos a compartir la informaci¨®n que la moneda", afirma un experto, "pero si queremos tener una diplomacia europea y una defensa europea, la creaci¨®n de un servicio de inteligencia europeo caer¨¢ por su propio peso. El terrorismo, los ciberataques, la inmigraci¨®n ilegal, el narcotr¨¢fico o la especulaci¨®n contra el euro no amenazan a un pa¨ªs concreto sino a Europa en su conjunto".

De momento, en el discurso que dirigi¨® a los jefes de los esp¨ªas en Alcal¨¢ de Henares, Fern¨¢ndez de la Vega les inst¨® a superar viejos recelos e intensificar la cooperaci¨®n. El director del CNI, el general F¨¦lix Sanz Rold¨¢n, qued¨® comisionado para reunirse con la sucesora de Solana, la brit¨¢nica Catherine Ashton, y trasladarle las conclusiones de la reuni¨®n: c¨®mo ven los servicios de inteligencia su futuro en la nueva Uni¨®n Europea.