M¨¢laga revisa los caballos de Picasso

Pablo Ruiz Picasso siempre admir¨® al caballo, animal recurrente en su obra desde sus primeros pinitos art¨ªsticos hasta sus ¨²ltimas creaciones. La primera pintura que se conserva de Picasso la realiz¨® en M¨¢laga, con ocho a?os, y en ella ya aparece un caballo.

Con Picasso. Caballos, el Museo Picasso M¨¢laga ofrece hasta el 5 de septiembre una revisi¨®n del significado del animal en su trayectoria a trav¨¦s de 54 piezas, principalmente ¨®leos, dibujos y grabados. La comisaria de la exposici¨®n, Dominique Dupuis-Labb¨¦, explic¨® ayer que esta atracci¨®n del pintor por el caballo era conocida, pero que al abordar esta exposici¨®n se encontr¨® con que esa relaci¨®n era muy intensa. "Es un elemento esencial en Picasso, casi como la mujer", resalt¨® la comisaria. "El que sea un animal a la vez viril y femenino pudo ser la raz¨®n por la que a Picasso le gustaba tanto", a?adi¨®. Seg¨²n Dupuis-Labb¨¦, el caballo "estimul¨® tambi¨¦n el imaginario del artista, que lo utiliz¨® como s¨ªmbolo de vida y de juventud, pero tambi¨¦n de muerte o de tristeza". Las obras se agrupan seg¨²n su tem¨¢ticas: apuntes de juventud, tauromaquia, circo, el caballo como ser mitol¨®gico o la guerra. Entre ellas hay excepcionales dibujos como Muchacho y caballo (1906), Jinete desnudo (1919), El rapto (1920) y Corrida (1934).