EE UU y Jap¨®n refuerzan su alianza militar ante el reto de Corea del Norte
Clinton y el primer ministro Hatoyama negocian sobre la base de Okinawa
La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, visit¨® ayer Jap¨®n y su encuentro con el primer ministro, Yukio Hatoyama, se sald¨® con una en¨¦rgica condena al r¨¦gimen norcoreano. Era un asunto insoslayable, despu¨¦s de que la v¨ªspera una comisi¨®n internacional de investigadores asegurara que el hundimiento de la corbeta surcoreana Cheonan, que cost¨® la vida a sus 46 tripulantes el 26 de marzo, fue provocado por un torpedo disparado por un submarino norcoreano. Clinton y Hatoyama tambi¨¦n acordaron seguir reforzando su alianza militar y manifestaron su compromiso por alcanzar la semana pr¨®xima un acuerdo definitivo sobre la pol¨¦mica reubicaci¨®n -otro tema ineludible en la relaci¨®n entre ambos pa¨ªses- de la base estadounidense de Futenma, en la isla de Okinawa.
Clinton advierte de una "dura respuesta internacional" contra Pyongyang
Socios del Gobierno de coalici¨®n japon¨¦s rechazan cualquier pacto sobre Okinawa
El emplazamiento de la base ha provocado meses de desencuentros entre ambas potencias. Finalmente, Futenma ser¨¢ trasladada al norte de la isla, en contra de lo que prometi¨® Hatoyama tras ganar las elecciones el a?o pasado. La decisi¨®n agrada a Washington, pero no a la opini¨®n p¨²blica de Okinawa ni a los socios de Gabinete del primer ministro -el Partido Social Dem¨®crata y el Nuevo Partido Popular-, que amenazan con abandonar la coalici¨®n de gobierno si se hace efectivo el acuerdo. Son dos grupos clave para que las pol¨ªticas del Partido Dem¨®crata de Hatoyama no resulten bloqueadas durante el resto de la legislatura, ya que tambi¨¦n son sus socios en la C¨¢mara alta. Una p¨¦sima noticia para el debilitado Ejecutivo japon¨¦s, que ya solo cuenta con el apoyo de un 32% del electorado, seg¨²n las ¨²ltimas encuestas.
Tampoco las administraciones locales apoyan la permanencia de la base, y mucho menos la opini¨®n p¨²blica de Okinawa, que en los ¨²ltimos meses ha mostrado su descontento con manifestaciones masivas.
Sobre el ataque a la corbeta surcoreana no hay la m¨¢s m¨ªnima disensi¨®n. "Como hemos visto tras los resultados de la investigaci¨®n sobre el hundimiento del Cheonan, salta a la vista que ambos pa¨ªses encaramos peligros y desaf¨ªos comunes", manifest¨® Clinton tras la entrevista con Hatoyama y el canciller, Katsuya Okada. En opini¨®n de Clinton, es necesaria una "fuerte respuesta internacional" ante el "acto de agresi¨®n" norcoreano. "No ser¨¢ y no puede ser", a?adi¨® Clinton, "tratado como un asunto regional, sino internacional". La jefa de la diplomacia estadounidense eludi¨® precisar el contenido de esa respuesta.
El primer ministro japon¨¦s, por su parte, expres¨® su deseo de fortalecer a¨²n m¨¢s la alianza entre ambos pa¨ªses y mostr¨® su apoyo total a Estados Unidos a la hora de condenar en el ¨¢mbito internacional al r¨¦gimen de Pyongyang.
Tras la publicaci¨®n de los resultados de la comisi¨®n investigadora, Se¨²l, Washington y Tokio se apresuraron a condenar el jueves el supuesto ataque norcoreano contra el buque de guerra surcoreano y amenazaron con buscar sanciones de forma conjunta contra el r¨¦gimen de Kim Jong-Il en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Por su lado, Pyongyang sostiene que el informe de la comisi¨®n es un montaje y su Comisi¨®n Nacional de Defensa amenaz¨® el mismo jueves con tomar represalias b¨¦licas si se le imponen sanciones.
Por todo ello, naufraga de momento la esperanza de que se retomen las negociaciones a seis bandas sobre el desarme nuclear de Corea del Norte. El Gobierno chino se hab¨ªa ofrecido esta semana a ejercer de anfitri¨®n para reiniciar las conversaciones aduciendo que Kim Jong-Il le hab¨ªa comunicado su consentimiento, pero ahora queda tambi¨¦n por ver si Pek¨ªn da por buenas las conclusiones del informe sobre el hundimiento del buque Cheonan, el ataque m¨¢s mort¨ªfero contra intereses surcoreanos atribuido a Pyongyang desde el atentado que en 1987 cost¨® la vida a los 115 pasajeros y tripulantes del vuelo 858 de Korean Air.
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