El silencio se rompe en la Cruz Blanca

La Congregaci¨®n de los Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca se ha visto salpicada por el esc¨¢ndalo de los supuestos abusos sexuales y malos tratos. En apenas dos semanas, la sospecha se ha extendido sobre estos frailes que llevan d¨¦cadas atendiendo en C¨®rdoba a discapacitados intelectuales. Dos de los tres religiosos que dirigen el centro cordob¨¦s -entre ellos, Manuel Ortiz, el franciscano responsable de la Casa de San Francisco de As¨ªs- est¨¢n imputados por abusos y malos tratos a los internos. Adem¨¢s, un ex trabajador ha sido tambi¨¦n imputado por abusos y un aspirante a entrar en la congregaci¨®n permanece en prisi¨®n preventiva acusado de los mismos delitos.

En la Casa de San Francisco de As¨ªs, que est¨¢ concertada con la Junta de Andaluc¨ªa, se asiste a unas 50 personas, todas con discapacidades ps¨ªquicas. Cuatro testigos vinculados a la instituci¨®n relataron ante la polic¨ªa los presuntos episodios de abusos y malos tratos contra una quincena de internos, seg¨²n se?alan fuentes del caso.

Las agresiones "son habituales y se remontan tiempo atr¨¢s"

Un juzgado cordob¨¦s archiv¨® otra denuncia en junio de 2007

Aunque el silencio se ha roto ahora, los presuntos abusos y malos tratos vienen de lejos. "Son habituales, se remontan tiempo atr¨¢s", se?alan las mismas fuentes. De hecho, el ¨²ltimo imputado dej¨® de trabajar en la Casa de San Francisco de As¨ªs hace tres a?os. Tampoco es la primera vez que se investiga al centro: el Juzgado de Instrucci¨®n 5 de C¨®rdoba archiv¨® el 26 de junio de 2007 otra denuncia por abusos.

La historia de esta investigaci¨®n arranca en octubre de 2009, en la mesa del subdelegado del Gobierno en C¨®rdoba. Un escrito an¨®nimo alertaba de los abusos sexuales cometidos contra un interno. El supuesto agresor era ?ngel C. U. P., un aspirante a entrar en la congregaci¨®n que trabajaba en el centro cordob¨¦s. El subdelegado avis¨® a la fiscal¨ªa y a la polic¨ªa. La Reina, que ten¨ªa previsto visitar el centro el 9 de octubre, suspendi¨® la cita.

Cuando la polic¨ªa acudi¨® a la Casa de San Francisco de As¨ªs, el supuesto abusador ya no estaba all¨ª. As¨ª, comenz¨® una b¨²squeda que culmin¨® cuando los agentes dieron con ¨¦l en uno de los centros Reto de Granada, una instituci¨®n dedicada a la reinserci¨®n de toxic¨®manos. Lo detuvieron y confes¨® los presuntos abusos cometidos en agosto de 2009. La v¨ªctima era un interno con un 86% de discapacidad ps¨ªquica. Ingres¨® en prisi¨®n de forma preventiva y el juicio ser¨¢ en junio. La fiscal¨ªa pide seis a?os de c¨¢rcel. La congregaci¨®n ha pagado ya 5.000 euros a la familia.

Cuando salt¨® aquel primer esc¨¢ndalo, algunos familiares de los internos se quejaron de que Manuel Ortiz, el religioso responsable del centro, no les facilitaba informaci¨®n y de que, a pesar de conocer los hechos, no hab¨ªa denunciado el caso.

Pero la atenci¨®n sobre la Casa de San Francisco de As¨ªs se fue diluyendo. Hasta hace un par de meses. A la polic¨ªa le lleg¨® otro largo an¨®nimo. Y ya no se relataba un caso concreto. Era una sucesi¨®n de episodios de agresiones y abusos que implicaban al director del centro y a otros miembros de la instituci¨®n.

La unidad adscrita de la Polic¨ªa Judicial se hizo cargo de la investigaci¨®n y, "a trav¨¦s de una persona vinculada a la instituci¨®n", los agentes localizaron a cuatro personas dispuestas a hablar, seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n. Cuando concluyeron sus pesquisas, el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 6 se encarg¨® de completarlas tomando declaraci¨®n a los internos, que, al tratarse de discapacitados, s¨®lo pod¨ªan testificar con un perito y ante el juez. Finalmente, el mi¨¦rcoles 12 de mayo la magistrada decidi¨® imputar a Manuel Ortiz y a otro miembro de la congregaci¨®n. Y les impuso una orden de alejamiento de 500 metros que les impide tambi¨¦n comunicarse con los internos. Contra el tercer imputado en esta segunda fase no se dict¨® esta medida al ser un ex trabajador.

"?Por qu¨¦ han tardado tanto? ?Por qu¨¦ lo cuentan ahora". Son las preguntas que uno de los agentes que han participado en la investigaci¨®n se hace en voz alta. Los defensores de los religiosos sostienen que todo se debe a una venganza por problemas laborales. "Las motivaciones no nos interesan, s¨®lo los hechos", se responde este mismo agente que ha sorteado el silencio en la Cruz Blanca de C¨®rdoba.