Por decreto y sin negociaci¨®n previa

Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero suspir¨® aliviado cuando, sobre las 12.15 de ayer, comprob¨® que hab¨ªa superado la que ha sido la votaci¨®n m¨¢s comprometida en su mandato. Era consciente de que en ella se jugaba la credibilidad de Espa?a ante la Uni¨®n Europea y la propia como pol¨ªtico. Y, parad¨®jicamente, era una votaci¨®n que apenas pod¨ªa condicionar porque no ten¨ªa nada que negociar. El impopular decreto o se tomaba o se dejaba, pero no lo pod¨ªa trocear. Todo ¨¦l era un mensaje para ganar credibilidad ante los mercados y la Uni¨®n Europea.

As¨ª pues, el papel de Zapatero, esta semana, se ha limitado a invocar a la responsabilidad de los l¨ªderes de los grupos parlamentarios para que con el sentido de su voto evitaran lo que estaba convencido que pasar¨ªa si perd¨ªa la votaci¨®n: un desastre para la credibilidad de Espa?a en el exterior. En esa tarea se ha implicado, sobre todo, con el portavoz de CiU, Josep Duran Lleida, con el que ha hablado varias veces.

A la vicepresidenta segunda, Elena Salgado, y al portavoz socialista, Jos¨¦ Antonio Alonso, les encarg¨® hablar con los representantes de los grupos. Apenas lo hicieron con la izquierda y la derecha, que ya hab¨ªan anunciado su voto negativo. Centraron su trabajo de convicci¨®n, que no de negociaci¨®n, en CiU, Coalici¨®n Canaria, UPN y PNV.

La sorpresa la dio el PNV, la v¨ªspera de la votaci¨®n, al anunciar su pronunciamiento negativo. Una sorpresa que fue relativa para Zapatero y Alonso, porque no aceptaron la negociaci¨®n que el PNV propon¨ªa a su interlocutora, Salgado: que el aplazamiento de las obras de infraestructuras no se aplicase a la Y vasca y que se aplazase un a?o m¨¢s la cesi¨®n de las pol¨ªticas activas de empleo para el Gobierno vasco, una medida que perjudicaba al lehendakari, Patxi L¨®pez.

No obstante, que el PNV no enviase a su n¨²mero uno, Josu Erkoreka, a defender el no, al contrario que el PP con Rajoy, hace pensar a Zapatero que los puentes no est¨¢n rotos con los peneuvistas. Zapatero y Alonso no tienen f¨¢cil reconstruir esas alianzas -con PNV y Coalici¨®n Canaria, porque CiU ya ha dicho que no-, pero tampoco son imposibles. La clave estar¨¢ en septiembre, con los Presupuestos. Antes, Zapatero afrontar¨¢ un calendario de reformas, menos duras que el decreto aprobado ayer. La primera, la del mercado laboral, este fin de semana. Por eso ha suspendido su viaje a Brasil.