La ¨²ltima ara?a de Louise Bourgeois
Venecia expone la producci¨®n m¨¢s reciente de la artista, fallecida el 31 de mayo a los 98 a?os - La muestra se convierte en un homenaje a la escultora de todo un siglo
Louise Bourgeois nunca pens¨® en una despedida. Quer¨ªa ofrecer una visi¨®n de los dramas y temores que conforman su arte. Pero, desde el pasado s¨¢bado y hasta el mes de septiembre, se ofrece en Venecia el que ha resultado ser un homenaje p¨®stumo a la artista, fallecida el pasado d¨ªa 31 de mayo a los 98 a?os. Como un s¨ªmbolo, tambi¨¦n son 98 las obras que, bajo el t¨ªtulo Louise Bourgeois, The Fabric Works, se exhiben en los antiguos Almacenes de la Sal, transformados por Renzo Piano en el Museo de la Fundaci¨®n Vedova. Casi un centenar de obras que ofrecen una detallada panor¨¢mica de los sentimientos que perturban al ser humano: la memoria, el dolor, las complejas relaciones familiares, un collage de las emociones de la escultora nacida en Par¨ªs y nacionalizada estadounidense.
El comisario de la muestra, Germano Celant, explica que, al preparar la exposici¨®n, la escultora nunca pens¨® en un resumen general de su obra sino m¨¢s bien en una exposici¨®n normal, eso s¨ª, con muchos in¨¦ditos que evidencian su incansable energ¨ªa creativa. "Ella no pensaba en la muerte, solo pensaba en seguir trabajando. Se neg¨® a que hici¨¦ramos un cat¨¢logo general, como le propusimos, quer¨ªa un cat¨¢logo espec¨ªfico de la muestra veneciana", comenta Celant. Y a?ade: "Es una l¨¢stima que se haya ido. Es cierto que sufri¨® mucho en su vida, pero tambi¨¦n supo disfrutarla".
En la exposici¨®n no pod¨ªa faltar el s¨ªmbolo de su obra, una gigantesca ara?a que da la bienvenida a los visitantes en la puerta de las bodegas del siglo IV veneciano. Se trata de Crouching Spider (2003), ya expuesta en la Bienal de Arte de Venecia de 2009, una alegor¨ªa de la figura materna. "La asocio a mi madre, porque la ara?a es un animal que se esconde en los ¨¢ngulos y pone trampas. Los ¨¢ngulos dan seguridad. Pero ella no ca¨ªa nunca en la trampa, por el contrario, trataba de poner trampas a los otros", escribi¨® la artista en el cat¨¢logo.
Louise Bourgeois prepar¨® The Fabric Works en colaboraci¨®n con su asesor en Nueva York Jerry Gorovoy, y cuid¨® cada detalle de la muestra. Incluso tres d¨ªas antes de su muerte aport¨® su opini¨®n sobre la cubierta del cat¨¢logo. Bourgeois decidi¨® tambi¨¦n que en la primera parte de la muestra estuvieran obras emblem¨¢ticas de su carrera: Bullet Hole (2002), Peaux de lapins, chiffons ferrailes ¨¤ vendre (2006) y Conscious and Unconscious (2008).
Muchos de los cuadros son in¨¦ditos y evidencian que, a pesar de su edad, no paraba de crear. Como la serie de cuadros realizada entre 2002 y 2008 con telas de vestidos suyos, de su madre o de otros seres queridos, que eran para ella una forma de "repensar la vida", seg¨²n Celant. En total son 140 obras, de las cuales 80 se exponen en Venecia. "Vestirse es tambi¨¦n un ejercicio de la memoria. Me hace explorar el pasado, pensar en c¨®mo me sent¨ªa cuando llevaba cierto vestido. Los trajes son se?ales de tr¨¢nsito en la b¨²squeda del pasado", escribi¨® la artista. Sedas, lanas y trozos de ropa, que montados forman im¨¢genes del universo de Bourgeois. Un universo ahora cerrado.
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