Lakers, Celtics y LeBron
Cuando empezaron los playoffs de la NBA de este a?o, habr¨ªa supuesto que cualquier columna que escribiera en estos momentos ser¨ªa sobre el pron¨®stico del tercer partido de la final entre los Lakers y los Cavaliers. El posible culebr¨®n del enfrentamiento entre Kobe Bryant y LeBron James era demasiado bueno para que la NBA lo dejara pasar. Adem¨¢s, ambos equipos parec¨ªan ser los mejores de sus respectivas conferencias, por lo que dicho desenlace le habr¨ªa parecido perfectamente razonable incluso al m¨¢s obstinado de los te¨®ricos de la conspiraci¨®n.
Pero la vida nos da sorpresas. Bastan unas semanas para que todo cambie. Si no, que le pregunten a la buena gente de Cajasur (?a que cre¨ªan que nosotros los estadounidenses no prestamos atenci¨®n?).
Como sabe cualquier ni?o de 12 a?os, los mejores circos tienen tres pistas, no dos. James es una excelente tercera pista
Ahora que James ha sido desterrado al gulag de los que no participan en los playoffs, nos hemos quedado haci¨¦ndonos preguntas sobre el futuro del hombre que quiz¨¢s podr¨ªa ser, o que es, el mejor de todos los tiempos. Sin ¨¦l, nos vemos envueltos en una final llena de dramatismo en s¨ª misma, con un sinf¨ªn de rivalidades, ya sean hist¨®ricas (Celtics-Lakers), personales (Allen-Bryant) o est¨¦ticas (dorado y morado chill¨®n-verde majestuoso y blanco).
Es hora de acabar con esas teor¨ªas de la conspiraci¨®n... ?O no?
Gracias a la tempranera eliminaci¨®n de James, a otro desplome de Vince Carter y al rejuvenecimiento del concepto de equipo en Boston, la NBA tiene una oportunidad m¨¢s de explotar la gran rivalidad entre los Lakers y los Celtics. Y, desde la perspectiva de la NBA, ?por qu¨¦ no? Al fin y al cabo, James es joven y deber¨ªa tener muchas oportunidades de jugar un mont¨®n de finales del campeonato.
Y, lo que es m¨¢s importante, James no necesita jugar la final de este a?o para formar parte de la final de este a?o. Los seguidores de la NBA, desde Cleveland hasta Kamchatka, estar¨ªan pendientes de cada una de sus palabras tanto si estuviera haciendo cestas en Los ?ngeles como si las estuviera vendiendo en Abu Dabi. Y, si hubiese estado vestido de corto en la final de este a?o, James ya habr¨ªa formado parte del argumento. Habr¨ªa habido margen para las conjeturas sobre "?ad¨®nde ir¨¢ James a continuaci¨®n?", pero no demasiado. Para deleite de los ejecutivos de la televisi¨®n, en la final de este a?o hay dramatismo dentro de la cancha y fuera de ella.
Juego de marcianitos: ?ya no tienen los locutores nada de qu¨¦ hablar? Aqu¨ª viene el reportero a pie de cancha para ponernos al d¨ªa sobre el ¨²ltimo sitio web que se ha construido espec¨ªficamente para retener a James en Cleveland.
Como sabe cualquier ni?o de 12 a?os, los mejores circos tienen tres pistas, no dos. James es una excelente tercera pista. Los Lakers, una; los Celtics, dos, y la futura casa de James, tres.
Vale, es exagerado pensar que nos encontramos en este punto debido a un plan secreto de la NBA. De verdad que no creo que los playoffs est¨¦n ama?ados. Pero, bien pensado, han sido perfectos para la NBA. Realmente, ?sale todo tan bien alguna vez en la vida?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.