"Nos falta cre¨¦rnoslo"
Javier Aguirre (Ciudad de M¨¦xico, 51 a?os) hered¨® una selecci¨®n en ca¨ªda libre. El paso del sueco Sven-G?ran Eriksson caus¨® tal cataclismo en el equipo que su 14? presencia en los Mundiales, la quinta consecutiva, pendi¨® de un alambre. "Solo se sumaron tres de los primeros nueve puntos y percib¨ª un des¨¢nimo generalizado en el entorno, en todo. Los propios futbolistas que compiten en Europa no ven¨ªan con hambre de querer ser seleccionados... El ambiente estaba un poquito enrarecido. Ped¨ª una tregua de seis meses para que todos entendieran que el enemigo no ¨¦ramos los propios mexicanos, sino que estaba fuera. Me dejaron trabajar y, al final, cuadramos las cuentas. Ahora tiramos todos del carro. Me result¨® f¨¢cil engancharme con los jugadores porque conoc¨ªa el medio. As¨ª, poco a poco, hemos armado un rompecabezas. Sabemos a lo que jugamos. El equipo camina".
"Barrera, Ju¨¢rez y Aguilar, decididos y ligeritos, van a ser grandes sorpresas"
Pregunta. Llevan cuatro ediciones sin pasar de los octavos y las dos veces que llegaron a los cuartos fue como anfitriones.
Respuesta. En Estados Unidos 1994 nos ech¨® Bulgaria en los penaltis. En Francia 1998 lo hizo Alemania. Gan¨¢bamos por 1-0 y en diez minutos le dieron la vuelta por m¨¢s que sab¨ªamos que a los alemanes hay que matarlos y rematarlos... A m¨ª me toc¨® en Corea del Sur y Jap¨®n 2002 contra Estados Unidos. ?ramos favoritos y un despiste al comienzo nos hizo cambiar todo. Nos falt¨® un bal¨®n detenido, una estrategia en el medio campo, algo. Y luego, en Alemania 2006, un golazo de Maxi Rodr¨ªguez desempat¨® un partido igualad¨ªsimo frente a Argentina. Esa ha sido la historia. Y si as¨ª fue es porque a veces no cuidamos los peque?os detalles. ?Carajo!, nos falta cre¨¦rnoslo. Tenemos que romper con el pasado, como Espa?a en la ¨²ltima Eurocopa.
P. Sobre el papel, su grupo parece de los m¨¢s parejos.
R. Es una inc¨®gnita. Dudo mucho de que alguien se atreva a cruzar apuestas por dos favoritos. Hasta la misma Sud¨¢frica, que con todos los respetos da la impresi¨®n de estar a otro nivel, sobre todo t¨¦cnico-pr¨¢ctico, sube enteros gracias a la presencia de Parreira, que hizo campe¨®n a Brasil en 1994, y por su condici¨®n de local. Nuestra intenci¨®n es dar el primer golpe en la inauguraci¨®n, aunque el roce internacional que adquirieron les hizo mucho bien en la Copa Confederaciones: a Espa?a le dieron mucha guerra, jugaron una final muy digna contra Brasil... No les fue nada mal. Luego vendr¨¢ Francia, que ser¨¢ lo que sea, pero, hoy por hoy, es el subcampe¨®n del mundo. Est¨¢ claro que le cost¨® llegar al Mundial, como a Uruguay, que tuvo que superar en la repesca a Costa Rica, pero ya pas¨® ese momento. Ya se termin¨®. ?Qu¨¦ puedo decir de Uruguay? ?Entre Forl¨¢n y Luis Su¨¢rez habr¨¢n metido 2.000 goles! Van a ser tres partidos terror¨ªficos. Ser¨¢n tres encerronas, pero hemos encontrado un estilo y no lo vamos a cambiar.
P. ?C¨®mo juega M¨¦xico?
R. No somos muy veloces, con lo cual no nos gusta bajar a nuestro campo y recuperar la pelota muy atr¨¢s porque luego tenemos que volver. Por eso intentamos recuperarla en campo rival y tener all¨ª la posesi¨®n permanentemente. Por lo general, intentamos llegar con muchas unidades al frente, presionando muy arriba y con el portero muy adelantado.
P. ?Qu¨¦ estilo les incomoda?
R. Los equipos que sean capaces de contraatacarnos de manera muy r¨¢pida nos pueden pillar muy lejos de la porter¨ªa y mal colocados. Lo ideal es que seamos capaces de terminar las jugadas. Si vamos con tanta gente al frente y no la terminas, te puedes quedar un poco al aire. Si somos contundentes, no concederemos goles. Nosotros no hacemos muchos. Generamos muchas ocasiones, pero nos cuesta concretarlas.
P. Cuenta con una banda izquierda muy fuerte: Osorio, Salcido, Guardado, Giovani...
R. Como pocas veces en la historia, tenemos muchos jugadores zurdos. Tambi¨¦n llamar¨¢n la atenci¨®n dos o tres j¨®venes, que espero que rompan: Pablo Barrera, Efra¨ªn Ju¨¢rez y Paul Aguilar. Todos tienen 20 o 21 a?itos y son muy ligeritos y muy decididos. Creo que van a ser grandes sorpresas.
P. Le gusta acaparar la presi¨®n para liberar a los jugadores.
R. Me gusta canalizar todo aquello que venga del entorno. Por ejemplo, el pasado verano, contra Panam¨¢, en la Copa de Oro, el equipo no estaba bien y, en un acto reprobable, interrump¨ª el juego y me expulsaron. Pero sirvi¨® de motivaci¨®n para los jugadores. Les despresuriz¨® y vali¨® para decir: "Ahora, por el mister, nos vamos a romper la cara y nos vamos a dejar el alma". Y as¨ª fue. Fuimos campeones.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.