Car¨¢cter riojano

Cuando el ingenio se une a la honestidad y la aspiraci¨®n por la excelencia con el buen hacer, los resultados suelen acompa?ar a los deseos. Y m¨¢s en el campo vitivin¨ªcola, que exige rigor cient¨ªfico e inspiraci¨®n creativa. Es el caso de Fernando Rem¨ªrez de Ganuza, cuya integridad profesional se acompa?a de una gran fortaleza de ¨¢nimo, suficiente como para afrontar los peores golpes de la vida. En 2004 inicia un proyecto familiar para dotar a tres hijos -Javier, Mar¨ªa y Cristina- de bodega propia. Un a?o m¨¢s tarde, la joven y prometedora Mar¨ªa muere en un accidente de coche, hecho que interrumpe el proyecto. Pero el vino con el que los hermanos pensaban iniciar su andadura en solitario sigue su curso, envejeciendo en la bodega paterna. He aqu¨ª una hermosa met¨¢fora y el mejor homenaje a la hija.

Lo dem¨¢s es lo de siempre en esta bodega ejemplar, que mima el viejo y cuidado vi?edo con m¨¢s de 70 a?os, perfecciona peque?os dep¨®sitos troncoc¨®nicos de fermentaci¨®n, dise?a bolsas de membrana para un suave prensado y escoge en su sofisticada mesa de selecci¨®n los hombros de la uva para elaborar este tinto de elegante y eficaz dise?o, procedente del vi?edo de cinco hect¨¢reas que le da nombre.

Se trata de un vino de afrutado cautivador, con un aroma umbr¨ªo de hojarasca y frutos de sotobosque, que muestra delicadas especias, un frescor bals¨¢mico y el arco arbotante de cedro y mineral que transmite a sus persistentes taninos un intenso y armonioso car¨¢cter riojano.