"Puede que alguno se niegue a jugar"
Domenech comparece solo y explica que no sabe si podr¨¢ contar hoy con todos sus futbolistas ante Sud¨¢frica mientras Francia se averg¨¹enza de su selecci¨®n
De mal en peor. As¨ª est¨¢ la situaci¨®n en la concentraci¨®n de la selecci¨®n francesa a medida que pasan los d¨ªas. A la lista de calamidades que se suceden desde que el s¨¢bado se hicieron p¨²blicos los insultos que Anelka dirigi¨® a Raymond Domenech tras perder contra M¨¦xico se sumaron ayer las declaraciones del propio t¨¦cnico en una conferencia de prensa. El t¨¦cnico dijo que no pod¨ªa garantizar que todos sus jugadores vayan a acudir hoy al partido contra Sud¨¢frica.
Domenech, que es el entrenador que ha dirigido durante m¨¢s partidos a les bleus, compareci¨® solo ante los medios de comunicaci¨®n. Junto a ¨¦l no estuvo el capit¨¢n, Evra, como es habitual en las ruedas de prensa de los d¨ªas previos a los partidos.
Para el t¨¦cnico, el plant¨®n de los jugadores fue "una imbecilidad"
A la pregunta de por qu¨¦ no estaba el lateral del Manchester United respondi¨®: "Porque he considerado que las excusas, las explicaciones, todo lo que los jugadores hubieran querido expresar, no tiene ahora sentido. Lo que se espera de ellos es un comportamiento sobre el terreno de juego".
Cuestionado por la posici¨®n que ocupar¨¢n hoy en el encuentro los l¨ªderes del mot¨ªn, entre los que se encuentra el propio Evra, Domenech respondi¨®: "Solo pienso en hacer el mejor equipo posible con aquellos jugadores que hayan sido capaces de pasar por encima de todo esto. Es mi ¨²nica preocupaci¨®n".
Respecto al boicot al entrenamiento del domingo, en el que los jugadores se negaron a ejercitarse para expresar el rechazo a la expulsi¨®n de su compa?ero Anelka, Domenech dijo que se trat¨® de "una aberraci¨®n, una imbecilidad, una estupidez sin nombre".
El entrenador, que cuando acabe el Mundial ser¨¢ relevado por Laurent Blanc, explic¨® que durante 45 minutos intent¨® que los jugadores cambiaran de opini¨®n: "Con los miembros de la federaci¨®n tratamos de convencer a los jugadores de que, como integrantes de la selecci¨®n francesa, no se pod¨ªan permitir hacer eso [no acudir al entrenamiento]. Despu¨¦s, me dije que hab¨ªa que acabar con ese desprop¨®sito y cog¨ª el comunicado, lo le¨ª y me fui. Pero yo no avalo en absoluto ese texto".
En la nota que dedicaron el domingo a la prensa, los jugadores franceses aseguraban que comparecer¨ªan con normalidad a su cita de hoy con Sud¨¢frica, aunque Domenech no descart¨® una nueva acci¨®n de rebeld¨ªa: "A lo mejor alg¨²n jugador se niega a jugar. No s¨¦ qu¨¦ equipo construir¨¦ en estas condiciones, pero ser¨¦ yo quien confeccione la alineaci¨®n".
Respecto a la pol¨¦mica sanci¨®n a Anelka, que ha sido expulsado de la selecci¨®n por la federaci¨®n y ya est¨¢ de vuelta en Londres, Domenech, que asumi¨® su parte de responsabilidad en la crisis, se mostr¨® contundente: "Apoyo completamente a la federaci¨®n. Nadie tiene derecho a comportarse as¨ª ni en un vestuario ni en ninguna parte. Los deportistas de alto nivel deben ser un ejemplo importante".
Mientras tanto, toda Francia es un clamor. En la televisi¨®n, en la peluquer¨ªa, en la calle, en los peri¨®dicos, en el mercado, en el metro, en el trabajo o viendo cualquier otro partido. No se habla de otra cosa (ni se va a hablar en d¨ªas) que del calamitoso paso de su selecci¨®n por el Mundial y de los sentimientos de "verg¨¹enza", "indignaci¨®n", "rid¨ªculo", "apuro" y "rabia", entre otros, que los jugadores del equipo m¨¢s detestado de este pa¨ªs en este momento despierta.
Todos los peri¨®dicos llenaban ayer su primera p¨¢gina con el denominado "psicodrama" de les bleus. Mientras que los pol¨ªticos franceses, hasta ahora a rega?adientes y por lo general implicados con la selecci¨®n, se apresuraban a desmarcarse de este grupo como de un pelot¨®n de apestados.
Ahora nadie quiere pensar en el partido que se jugar¨¢ hoy. Da la impresi¨®n de que a nadie le importa de verdad.
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