El Kaiser contra La Pulga

A M¨¦xico se la conoce como la tricolor y, por tanto, no deber¨ªa extra?ar que tenga tres capitanes. El m¨¢s conocido y titular es Rafa M¨¢rquez, central del Barcelona, futbolista de t¨¦cnica exquisita, representante de los m¨ªticos zagueros que actuaban como libres. Los mejores entrenadores coinciden en que un buen equipo se concibe a partir de la defensa, y M¨¢rquez funcion¨® siempre como el punto de partida del juego de M¨¦xico y del Bar?a hasta que irrumpi¨® Piqu¨¦. M¨¢rquez es el eslab¨®n intermedio entre Koeman y Piqu¨¦ en el Camp Nou, sobre todo por su manera de concebir el juego de ataque y especialmente por su capacidad para golpear el bal¨®n y por sus cambios de orientaci¨®n a las dos bandas.

La p¨¦rdida de protagonismo en el Bar?a le ha llevado a solicitar una entrevista con Guardiola para reconducir su carrera, por m¨¢s que tenga contrato hasta 2012. M¨¢rquez y Henry fueron los dos jugadores con los que el t¨¦cnico azulgrana se entrevist¨® cuando fue nombrado entrenador y despu¨¦s de que descartara la continuidad de Ronaldinho, Deco y Eto'o. A M¨¢rquez le defendi¨® por ser el origen del juego y a Henry porque le daba profundidad al equipo. Transcurridos dos cursos, ni uno ni otro parecen tener sentido en el Bar?a, protagonistas la mayor¨ªa de veces de actuaciones reprobables, nada fiables.

"Si hay alguna posibilidad de salir del Bar?a, saldr¨¦", comenta M¨¢rquez. "Depende de lo que quiera el t¨¦cnico". M¨¢rquez es utilizado m¨¢s como referente de los j¨®venes centrales del filial, como Bartra, Muniesa o Font¨¤s, que como rival de Piqu¨¦, Puyol, Milito y Chigrinski. Tampoco parece la mejor opci¨®n para sustituir a Tour¨¦ como pivote tras la confirmaci¨®n de Busquets. A M¨¢rquez, por tanto, le conviene reivindicarse con M¨¦xico para ganarse un traspaso al extranjero, preferentemente al calcio. Aunque en su decisi¨®n puede influir el destino de su seleccionador, el Vasco Aguirre, que aspira entrenar a un equipo tras este Mundial.

Ambos, M¨¢rquez y Aguirre, desean liderar hoy a M¨¦xico ante la Argentina de Messi y Maradona, en un duelo de octavos de final que ya se dio en el Mundial de Alemania. Argentina elimin¨® entonces a M¨¦xico en Leipzig con un extraordinario gol de Maxi Rodr¨ªguez en la pr¨®rroga que anul¨® la igualada, convertida precisamente por M¨¢rquez. "No me planteo el partido como una revancha", responde el central. Y se centra en su compa?ero, en su amigo. "Leo est¨¢ disfrutando. Es un jugador ambicioso desde la honestidad y la humildad. Conduce bien la pelota, es r¨¢pido, cambia de ritmo en cualquier momento y si le concedes espacio, est¨¢s muerto. Pero jugamos contra Argentina y no contra Messi". "Los argentinos", matiza, "son temibles en ataque, pero no les veo tan convincentes en defensa". El pelot¨®n de delanteros mexicanos, futbolistas revoltosos y peloteros, pueden sacar del partido a los diseminados zagueros argentinos. "La clave es quitarnos de encima el pesimismo mexicano", acaba M¨¢rquez.

M¨¦xico s¨®lo ha accedido a cuartos en los dos torneos disputados en su pa¨ªs, en 1970 y 1986, y ya lleva seis a?os sin derrotar a Argentina. M¨¢rquez y Torrado, sin embargo, formaron en el equipo que gan¨® a la albiceleste en el Mundial Sub 20 de Nigeria, en 1999. "Si estamos finos y somos inteligentes, podemos volver a vencer", concluye M¨¢rquez, que a sus 31 a?os y por una vez exento de lesiones est¨¢ completando su tercer Mundial, el ¨²ltimo de su carrera tras debutar como internacional a los 17, con una excelente hoja de servicios: un gol decisivo ante Sud¨¢frica; la asistencia al Chicharito Hern¨¢ndez que provoc¨® el desplome de Francia; y el 84% de acierto en los pases. M¨¢rquez vuelve a ser el Kaiser de Michoac¨¢n. Hoy le aguarda La Pulga Messi.