"Quiero ser el ¨²ltimo en besar la Copa"
El t¨¦cnico albiceleste, un mito del f¨²tbol todav¨ªa a los 49 a?os, reflexiona su propio papel como entrenador, sobre la figura de su estrella, Leo Messi, las comparaciones con ¨¦l, sobre las posibilidades de ganar el Mundial y sobre el estilo de la selecci¨®n espa?ola
Pide un abrigo para pelearle al fr¨ªo. Su adrenalina no alcanza para combatir la noche dura de Pretoria. En otro Maradona, esa incomodidad hubiera provocado la suspensi¨®n de la entrevista, m¨¢s cuando sus dos relojes marcan m¨¢s all¨¢ de las 11 de la noche. Pero este Maradona de Mundial tiene ganas de hablar, de cumplir respetuosamente su palabra. Solo se lo oye a ¨¦l, m¨¢s cerca del entrenador que del personaje, ¨¦se que aparecer¨¢ reci¨¦n al final de la entrevista.
Pregunta. ?Messi ya est¨¢ para ser el Maradona del 86 o hay que pensar en el Maradona del 82?
Respuesta. Messi rompi¨® los moldes. Hay que terminar con las comparaciones. Ya est¨¢ para salir a la cancha con la corona.
P. Lionel declar¨® que est¨¢ como est¨¢ por usted.
"Ac¨¢ la magia la tienen los de pantalones cortos, hasta la ¨²ltima pelota"
"Muchos entrenadores han dejado algo, pero a trav¨¦s de los jugadores"
"Nunca pens¨¦ en un Messi est¨¢tico. ?l ten¨ªa que decidir d¨®nde deb¨ªa jugar"
"Llego en el momento justo... Madur¨¦ como un f¨®rmula uno, el Mundial lo exige"
"Si las porter¨ªas estuvieran en los costados, Espa?a hubiera ganado 10-1"
"Me gusta mucho Mourinho. Tengo su tel¨¦fono. Ante una duda, lo llamar¨ªa"
R. Yo le agradezco, pero L¨ªo est¨¢ en este nivel porque ¨¦l quiere. Se le ve feliz, contento. Disfruta, me pide jugar. Para toda la gente que dec¨ªa que Messi no cantaba el himno, que lo ve¨ªan triste... ?A qui¨¦n le gusta perder? Y nosotros perd¨ªamos en las eliminatorias. Ahora todo cambi¨® y hacerlo feliz a Messi es orgullo de todos. Incluidos los compa?eros, porque hoy lo ves y se tira un chiste con Pastore, con Garc¨¦, con quienes no se hab¨ªa cruzado en su puta vida. O habla con Ver¨®n. Yo los esp¨ªo. La Bruja es un intelectual del f¨²tbol: sabe mucho m¨¢s de f¨²tbol que L¨ªo, pero se trenzan a hablar y el guacho [sic] le responde, ?j¨¢, j¨¢ j¨¢! Es lindo estar en el medio de esa conversaci¨®n.
P. Estaba preocupado por Messi y fue a Barcelona. ?Ah¨ª empez¨® la transformaci¨®n? ?Qu¨¦ cambi¨® adem¨¢s de la posici¨®n?
R. Nunca pens¨¦ en un Messi est¨¢tico en una posici¨®n. Yo quiero que ¨¦l se sienta cerca de la pelota. Cuando ¨¦l tiene esa posibilidad hay chances de salir de contra, de tenerla, de crear una situaci¨®n de gol o de meter un pase de gol. Todav¨ªa no pudo meter ninguno, pero no se olviden de que yo aparec¨ª en los cuartos en M¨¦xico 86. Ah¨ª lo vamos a ir todos a abrazar.
P. ??l le dijo d¨®nde se sent¨ªa m¨¢s c¨®modo?
R. No, no. Yo le fui a contar a Messi que a m¨ª nadie me dijo d¨®nde ten¨ªa que jugar [se golpea una mano sobre la otra]. Entonces, yo no le ten¨ªa que decir a Messi d¨®nde deb¨ªa jugar. ?l ten¨ªa que decidirse a jugar donde ¨¦l quisiera [sigue golpeando las manos]. Y ya era grandecito y hombrecito como para tener las pelotas de decir 'esta pelota es m¨ªa, muchachos, soy el que la sabe interpretar mejor que nadie'. Yo lo hice en su momento, ahora le toca a Messi.
P. El mensaje para Lionel fue 'yo te voy a bancar [respaldar], pero tienes que rebelarte, ser usted mismo'.
R. Es que los tiempos te van marcando. No es el mismo Messi el de los 18 a?os que el que hoy cumple 23. Los tiempos lo van llevando a madurar a toda velocidad, porque as¨ª te lo requiere el mundo, el Barcelona, la selecci¨®n argentina, los ¨¢rabes, ?ja, ja! Y vos ten¨¦s que estar preparado como est¨¢ L¨ªo. A m¨ª me pone b¨¢rbaro cuando me dice 'quiero jugar', como pas¨® antes de Grecia. 'Daaaale, poneeeeme', me pidi¨®. Eso es algo maravilloso para m¨ª. Aunque yo lo iba a poner en cualquier caso. Eso es lo que yo le quiero contar a la gente: el amor de Messi por la pelota y por la camiseta argentina.
P. ?Su perfil como entrenador es dejar hacer al jugador?
R. S¨ª, pero cuidado. Dejarle hacer al que entiende qu¨¦ hay que hacer. Vos no le pod¨¦s dejar hacer lo mismo a Messi que a Bolatti o Jon¨¢s o Burdisso. Hay que ver a qui¨¦n dej¨¢s hacer. Eso es una interpretaci¨®n m¨ªa en la cancha. Y tengo que ver con qui¨¦n se lleva mejor, con qui¨¦n tiene mejor feeling, a qui¨¦n prefiere.
P. Otra diferencia en Messi es su cara. Antes hablaba mirando para abajo, ahora va con la cabeza arriba.
R. Es un hombre, es un hombre [remarca]. Y es muy lindo estar a su lado en este momento. Poder hablar con ¨¦l, no aconsejarlo porque tiene a sus padres, pero s¨ª estar cerca.
P. Leo dijo que en las eliminatorias no era ¨¦l. ?A usted le pasaba lo mismo?
R. Ahora tengo tiempo. Y si vos ten¨¦s tiempo para trabajar, las cosas van saliendo. M¨¢s con estos jugadores. Pod¨¦s inventar, dejar volar tu imaginaci¨®n para una pelota parada entre Ver¨®n y Messi, pero despu¨¦s sale sola. Si hay dos en la barrera y vos ten¨¦s dos para patear, si Messi se la toca a Ver¨®n todos van con ¨¦l y L¨ªo queda solo. Y ah¨ª el mano a mano de Messi es mortal. ?Por qu¨¦ no aprovechamos eso entonces?
P. Habla del potencial de los jugadores. Y se dice que el valor de la selecci¨®n pasa por ellos. ?Se siente orgulloso o desvalorizado?
R. Orgulloso. Yo quisiera ser el ¨²ltimo en besar la Copa, porque la ganaron los jugadores. Que eso quede bien claro. Yo quiero ser un hombre feliz con la camiseta argentina.
P. ?De todos modos percibe un respeto al Maradona t¨¦cnico que antes no hab¨ªa?
R. Yo nunca cre¨ª todo lo que me dec¨ªan algunos. Sab¨ªa de mi capacidad, lo que pod¨ªa dar. Y como no les cre¨ª, no es tanto el choque de lo que dec¨ªan en las eliminatorias a lo que pueden opinar. Siempre tuve mi personalidad y sab¨ªa que este momento iba a llegar, que iba a tener al Mascherano que tengo hoy y no al Mascherano que estaba con el 50% de su cabeza en el Real Madrid y el otro 50% en el Barcelona. Sab¨ªa que iba a tener a este Messi, a este T¨¦vez...
P. Es el ¨²nico entrenador que da besos. ?Tiene un estilo distinto? El otro d¨ªa se lo pregunt¨® un periodista ingl¨¦s.
R. Siempre fue lo mismo. Si quer¨¦s podemos laburar [trabajar] ma?ana, mediod¨ªa, tarde y noche, pero si no hay feeling con los jugadores, no hay historia. Esta historia se escribe a trav¨¦s de los futbolistas. Que nadie se crea que hay un mago. Ac¨¢ la magia la tienen los de pantalones cortos y la tendr¨¢n hasta la ¨²ltima pelota del mundo. Existen los Guardiola, los Mourinho, los Rafa Ben¨ªtez, los Menotti, los Bilardo, los Basile, hay un mont¨®n de t¨¦cnicos que han dejado cosas. Pero lo han hecho a trav¨¦s de sus jugadores.
P. ?Qu¨¦ le diferencia de esos entrenadores?
R. Que llego en el momento justo, con una camada de jugadores argentinos que se han juntado para darle alegr¨ªa a la gente. Quiz¨¢s a otros t¨¦cnicos le faltaba uno, o se quedaba el otro en el camino. Yo gracias a Dios los tengo a todos y est¨¢n sanos. ?Entonces, qu¨¦ m¨¢s puedo pedir?
P. Los que definen son los jugadores, claro, pero hay t¨¦cnicos que chocan Ferraris. ?Usted se siente en su mejor momento para no chocar?
R. Puede ser. Yo madur¨¦ como un f¨®rmula 1, porque el Mundial te exige tomar decisiones r¨¢pidas. Igual, esto se ven¨ªa gestando hace mucho tiempo. Yo sab¨ªa que cuando nos meti¨¦ramos en la cabeza lo que era la camiseta argentina, lo que es un Mundial, se nos iba a dar. Como dec¨ªa de Messi...
P. ?Vio a alg¨²n futbolista que se le acerque?
R. En este Mundial no vi otro jugador ni al 30% de Messi. No s¨¦ si ma?ana dir¨¢n que soy soberbio, pero tampoco vi a alguien que sea el 30% de T¨¦vez. Porque Carlitos te emociona jugando. Yo amo a mi equipo. El favorito que me vendieron con Xavi e Iniesta perdi¨® 1 a 0 con Suiza. Y no es que toc¨® la pelotita. Voy a usar una frase del Negro Enrique: si los arcos estuvieran en los costados y no de un lado y del otro, Espa?a hubiera ganado 10 a 1. Y es verdad. Porque la tienen, la tienen, la tienen, ?pero cu¨¢ndo vamos a atacar? Cuando yo dije que no merecimos perder con Espa?a, en Buenos Aires se me cagaron de risa. Porque ellos tuvieron la pelota, pero si nosotros los empom¨¢bamos con Di Mar¨ªa, les sac¨¢bamos dos de diferencia y olvidate.
P. ?Dice que no est¨¢n entre los favoritos para que eso no lleve al ¨¦xtasis argentino?
R. Hay que dejar que los favoritos sean los otros y que se rompan la cabeza entre ellos. Nosotros vamos partido a partido. Ahora tenemos M¨¦xico, en el cruce de octavos.
P. ?Qui¨¦n dibuja en el pizarr¨®n las jugadas a bal¨®n parado?
R. Lo hablamos entre los tres, con Mancu y El Negro. Cuando vemos v¨ªdeos nos vienen jugadas. Aunque a veces me vienen m¨¢s a m¨ª. Soy el m¨¢s alocado. La jugada de Heinze en el gol contra Nigeria sali¨® porque vi que ellos defend¨ªan fuerte. Entonces dije: 'Si ¨¦stos se creen fuertes, les voy a poner gente fuerte y no van a salir de la l¨ªnea del ¨¢rea. Les voy a poner tres muros: a Samuel, T¨¦vez, Demichelis. Y vas a ver que los morochos [morenos] no van a poder salir. Y El Gringo en el punto de penal les va a romper el arco'. La hicimos ac¨¢ en una pr¨¢ctica y no pudieron salir nuestros defensores. Yo sab¨ªa que ¨ªbamos a abrir el partido as¨ª. Por eso, cuando hicimos el gol, no lo grit¨¦. Yo gritaba: '?Sali¨® la jugada!".
P. ?Usted era un jugador t¨¢ctico. ?Cu¨¢ndo se dio el traspaso del jugador al t¨¦cnico?
R. Es que ten¨¦s que pasar ese r¨ªo de preguntas y resolverlas en tu casa, pensar en el equipo. Dejar las cr¨ªticas de lado y darle m¨¢s bola a lo que pod¨¦s hacer con los jugadores. Me pas¨¦ todo un tiempo mirando jugadores. Por eso fue dif¨ªcil armar la lista.
P. ?De qui¨¦n tom¨® cosas como entrenador?
R. Me gusta mucho Mourinho. Y aparte de por c¨®mo me trat¨®. Estuvimos varias horas hablando de f¨²tbol. Mourinho me pareci¨® un tipo para llev¨¢rtelo a la mesita de luz y preguntarle cosas. Tengo el tel¨¦fono suyo, as¨ª que por ah¨ª lo llamo.
P. ?Ser¨ªa capaz de llamarle durante el Mundial?
R. S¨ª, ante una duda, lo llamar¨ªa.
P. Pero no le copiar¨ªa la t¨¢ctica del partido de la Champions entre Inter y Bar?a.
R. Noooo. Seguro que no. Pero bueno, eso le dio resultado. Es el campe¨®n de la Champions, imaginate que vos y yo quedamos como boludos si decimos eso. 'Ah, los boludos estos dicen que no lo har¨ªan. ?Y a m¨ª qu¨¦ me importa?', podr¨ªa decir.
P. A prop¨®sito de estilos. ?Cu¨¢ndo cambi¨® la idea de los cuatro centrales a este equipo ofensivo?
R. Hace mucho que lo ten¨ªa en la cabeza, pero no contaba con los jugadores para hacerlo. Uno estaba cansado, el otro ven¨ªa con problemas, el otro se quer¨ªa ir de donde estaba... Hab¨ªa unos problemas muy grandes. Pero cuando los tuve libres mentalmente, les dije 'corran para adelante que saben hacerlo'. No es solo defender.
P. ?En ese punto esta selecci¨®n se parece a la del 94, en tener la pelota?
R. Es una premisa que repito todos los d¨ªas: si la tenemos nosotros, no la tienen ellos. Y este equipo est¨¢ capacitado para manejar mucho m¨¢s la pelota que cualquier otro equipo del mundo por el pie que tiene. Todos juegan bien. Vos lo ves salir a Demichelis del fondo y dec¨ªs 'si lo pongo de 9 por ah¨ª te engancha'. Lo ves a Jon¨¢s y dec¨ªs 'mir¨¢ este flaco desgarbado', pero te llega al fondo y engancha.
P. ?Tiene alg¨²n rival al que quiera enfrentarse?
R. Noooooo, que vayan saliendo. No tengo un rival para elegir.
P. Antes hablaba de Espa?a.
R. Si lo tenemos en el precipicio, lo vamos a empujar. En un Mundial nadie te perdona. Lo mismo ellos, ?eh!: si nos tienen a nosotros ah¨ª, nos van a empujar. No te van a dar la mano para agarrarte. Te van a pisar los dedos para que te caigas. Es as¨ª.
P. ?Qu¨¦ dar¨ªa por salir campe¨®n del mundo?
R. Un brazo. Yo dar¨ªa un brazo por esa Copa.
P. Hace fr¨ªo para ir desnudo al Obelisco. ?Lo pens¨® bien?
R. S¨ª, pero no dije cu¨¢ndo iba a ir, ?ja, ja. ja!
Un corte de manga y se fue.
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