El PSE asume que Prieto apuesta por Cristina Gonz¨¢lez para presidir Vital
Ya sin Rojo, el l¨ªder socialista consigue promocionar a su candidata en la caja
El socialismo alav¨¦s est¨¢ en manos de Txarli Prieto. Ya lo demostr¨® incluso ante el Gobierno vasco cuando abort¨® el "esp¨ªritu del cambio" en ?lava que dej¨® al PP sin el apoyo suficiente para arrebatar al PNV la Diputaci¨®n de este territorio. Incluso en Vital, sus puntuales decisiones han hecho historia. Primero, porque su oposici¨®n a un acuerdo con el PP permiti¨® prolongar una batalla judicial que ha acabado con la etapa de Gregorio Rojo en Vital. Y ahora, con su decisi¨®n de colocar a la parlamentaria Cristina Gonz¨¢lez como su candidata a presidir la principal entidad financiera alavesa, de la que es consejera.
La suerte est¨¢ echada, aunque la habilidad pol¨ªtica de Prieto le ha aconsejado reunirse de dos significativos pata negra del partido para evitar as¨ª que pueda proyectarse la sensaci¨®n de un pronunciamiento personalista sobre el candidato que deben proponer al PNV para que, en aplicaci¨®n del pacto entre ambas formaciones, se convierta en presidente de Vital. Todo ello se va a cumplir bajo el manto de la unanimidad como se encarg¨® de recordar el propio Prieto cuando ayer opin¨® sobre la crisis abierta en la caja alavesa.
La ejecutiva debati¨® el efecto que supone ir ahora junto al PNV alav¨¦s
En esta esperada intervenci¨®n, el secretario general de los socialistas alaveses no dud¨® la ocasi¨®n para deshacerse en elogios hacia Gregorio Rojo. Pese a este expl¨ªcito reconocimiento p¨²blico de su gesti¨®n y de su profesionalidad, el ex presidente de Vital no figura junto a Prieto, Patxi Lazcoz y V¨ªctor Garc¨ªa Hildago en el equipo de sabios creado para definir el perfil m¨¢s id¨®neo del futuro responsable de la entidad financiera.
Seg¨²n opiniones recabadas ayer por este diario, esta significada exclusi¨®n actualiza los momentos de tensi¨®n vividos por Rojo y Prieto en Vital. Aunque p¨²blicamente ambos se han prodigado en gui?os bienintenciados, sus discrepancias han sido evidentes. Eso s¨ª, ninguna tan sangrante como la que se produjo al romper Prieto el acuerdo que Rojo hab¨ªa alcanzado con el PP para que se acabara de una vez la disputa judicial sobre la validez de su mandato en la caja alavesa. Con el paso de los acontecimientos, es evidente que aquellos vientos han tra¨ªdo estos lodos, aunque Prieto siempre ha subrayado que manten¨ªa una identificaci¨®n plena con Rojo en los temas de Vital.
Pese a ello, resulta f¨¢cil de comprensible que ambos socialistas no coinciden en el perfil que debe reunir un presidente de Vital. Rojo quiere a S¨¢nchez Corchero para proyectar para este puesto a un empresario y desterrar de una vez el perfil pol¨ªtico del cargo. Prieto, en cambio, defiende una posici¨®n antag¨®nica y de ah¨ª que la figura de Cristina Gonz¨¢lez le encaje como anillo al dedo. Adem¨¢s, la inmediata apuesta por S¨¢nchez Corchero tras la dimisi¨®n de Rojo, y en aplicaci¨®n de evidentes criterios profesionales, ha podido jugar en su contra. Ayer, en Vitoria, de hecho, hab¨ªa quienes se lamentaban de que "se hab¨ªa quemado demasiado pronto" su alternativa al difundirse que Rojo le ofrec¨ªa su respaldo. Por todo ello, resulta elocuente que la elecci¨®n de Gonz¨¢lez es otro golpe directo a Rojo.
En realidad, no es la primera vez que apuesta por Gonz¨¢lez, toda una revelaci¨®n en su carrera ascendente dentro del socialismo alav¨¦s. En Vital, todav¨ªa se recuerda cuando el l¨ªder socialista pretendi¨® que Gonz¨¢lez accediera al Consejo de Administraci¨®n en el puesto de vicepresidenta que dej¨® vacante De Miguel. Pero no fragu¨®: cuando los servicios jur¨ªdicos advirtieron de que Cristina Gonz¨¢lez deb¨ªa abandonar su actual cargo de parlamentaria por incompatibilidad, Prieto desisti¨® de la idea.
Frente a la situaci¨®n creada en Vital, en fuentes socialistas existe el firme convencimiento de que este proceso de interinidad "ni debe ni va a durar mucho". A ello, a?aden, contribuir¨¢n dos factores que les parecen determinantes: de un lado, porque la presidencia provisional de I?aki Gerenabarrena no ofrece la mejor imagen en estos momentos; de otro, porque el perfil del candidato ya est¨¢ decidido. Hay incluso quien apunta que "veinte d¨ªas pueden ser suficientes". Como es obvio, desde el PP alargan este plazo porque siguen persudiados de que la sentencia de la Audiencia conlleva la anulaci¨®n de la lista en la que figuraba Rojo y, de paso, valida la entrada de sus tres representantes en el Consejo de Administraci¨®n. Aunque se produjera esta incorporaci¨®n, PNV (6) y PSE(6) mantienen el absoluto control de un ¨®rgano formado por 16 representantes.
No ha trascendido si esta cuesti¨®n fue debatida en la ejecutiva convocada de urgencia para el pasado viernes, y a la que no pudo acudir Javier Rojo pero s¨ª est¨¢ comprobado que nadie habl¨® sobre posibles alternativas a presidente de Vital. La pelea dial¨¦ctica, por tanto, no existi¨® dentro, y s¨®lo se vive en voz baja y con car¨¢cter an¨®nimo. La unanimidad es real dentro del socialismo alav¨¦s despu¨¦s de la renovaci¨®n ejecutada por Txarli Prieto, todo un s¨ªmbolo de c¨®mo se controla la vidainterna de un partido pol¨ªtico y que, a su vez, ha aportado los mejores resultados electorales. Prieto super¨® en votos a Ibarretxe en ?lava.
En clave interna, en la ejecutiva del viernes se evit¨® el debate sobre candidatos a Vital. Pero fuera, no. Prieto sabe que un sector dentro de su partido, y por supuesto abiertamente en el mundo empresarial, hay quienes prefieren a S¨¢nchez Corchero antes que a Cristina Gonz¨¢lez. Sin embargo, todo hace indicar que la unanimidad secundar¨¢ la candidatura de Gonz¨¢lez. Adem¨¢s, el peso de Patxi Lazcoz y de V¨ªctor Garc¨ªa Hidalgo es insignificante ante el poder real de Prieto en el supuesto, nada probable, de que plantearan un candidato alternativo.
Sin este debate, a los socialistas alaveses les dio tiempo, siempre en un ambiente muy sereno, a profundiza en el grado de relaci¨®n con el PNV. El delicado momento pol¨ªtico de sus actuales compa?eros de viaje no es el m¨¢s id¨®neo para que el PSE aparezca a su lado, fue una de las principales conclusiones. Con el paso del tiempo y cada vez m¨¢s cerca de las elecciones, nadie dud¨® de que las derivadas del caso De Miguel son la munici¨®n perfecta para la ofensiva del PP, vencedor moral de la pelea judicial abierta contra Gregorio Rojo, pero a quien Prieto dif¨ªcilmente va a perdonar la permanente actitud hostil que mantienen.
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