El pabell¨®n de Castillejo, otra ruina

El 27 de noviembre de 2004, un concierto de la orquesta de RTVE sirvi¨® para inaugurar el enorme pabell¨®n sociocultural que Cajasur hab¨ªa levantado junto al Parque Joyero de C¨®rdoba. El presupuesto destinado para este gigante -que fue bautizado con el nombre del entonces presidente de la caja, el sacerdote Miguel Castillejo- termin¨® dispar¨¢ndose hasta superar los 35 millones de euros. A 31 de marzo de 2005, Cajasur ya hab¨ªa desembolsado 33,4 millones. A pesar del millonario gasto, desde su apertura, el centro apenas ha sido utilizado, al margen de la feria anual de joyer¨ªa Joyacor y otros eventos puntuales. Adem¨¢s, por sus deficiencias constructivas, se han tenido que hacer reformas este a?o. El pabell¨®n fue cedido en 2008 al Centro Andaluz de Dise?o.

La compra del edificio se hizo sin permiso de los ¨®rganos de la caja

El inmueble est¨¢ valorado en 8,8 millones, seg¨²n la ¨²ltima tasaci¨®n

Originalmente, el edificio fue encargado por los empresarios que impulsaron el Parque Joyero. Se dise?¨® para albergar muestras expositivas de car¨¢cter comercial. Pero cuando lo compr¨® Cajasur, se decidi¨® ampliar sus funciones para que pudiese acoger todo tipo de eventos culturales de gran aforo. As¨ª, se convirti¨® en el ¨²nico edificio cerrado de C¨®rdoba en el que, en teor¨ªa, pod¨ªa ofrecerse un espect¨¢culo para 6.000 personas. Cuando se inaugur¨®, la superficie total construida era de 33.150 metros cuadrados, repartidos entre dos plantas y s¨®tano.

Como se explica en un informe de la Subdirecci¨®n General de Auditor¨ªas de Cajasur, de mayo de 2005, la relaci¨®n de la entidad con el proyecto del pabell¨®n comenz¨® el 16 de mayo de 2003, cuando la caja se hace con el inmueble y la obra del mismo, que comenzaba a construirse, pagando 19,9 millones. La auditor¨ªa destaca que, en el momento de la compra, "no exist¨ªa ni conocimiento ni autorizaci¨®n previa para esta operaci¨®n por parte de ¨®rganos de gobierno". La adquisici¨®n se realiz¨® con el estilo poco claro que caracterizaba la gesti¨®n de la caja, controlada por la Iglesia. As¨ª, de la operaci¨®n no se tuvo noticias en la direcci¨®n hasta seis meses despu¨¦s, cuando la compra fue ratificada por el consejo de administraci¨®n el 14 de noviembre. Un mes despu¨¦s, por la asamblea.

Enseguida, los 19,9 millones que Cajasur hab¨ªa desembolsado comenzaron a crecer. Un testigo que entonces se encontraba en la direcci¨®n de la entidad se?ala que Castillejo decidi¨® de manera unilateral acometer importantes cambios en el proyecto, que trajeron de cabeza a los t¨¦cnicos. "Quer¨ªa que all¨ª pudiesen celebrarse grandes ¨®peras", afirma, "y aquello se hab¨ªa dise?ado para ferias". Para cumplir los deseos del presidente, Cajasur aprob¨® una inversi¨®n estimativa de 7,5 millones.

Pero fue s¨®lo el principio. El pabell¨®n termin¨® convirti¨¦ndose en un sumidero de dinero para la caja cordobesa. As¨ª, como destacaba la auditor¨ªa, justo un a?o despu¨¦s de la compra del recinto, el consejo de administraci¨®n aprob¨® un informe que actualizaba la valoraci¨®n inicial de las mejoras. En una nueva tasaci¨®n se comprob¨® que la inversi¨®n en las reformas hab¨ªa ascendido a 9,9 millones. Pero en el informe se se?alaba adem¨¢s que exist¨ªan otras partidas nuevas que no se hab¨ªan contemplado, como el mobiliario, la creaci¨®n de un escenario y otros gastos. Todo ello fijaba un presupuesto final, a obra terminada, de 35,1 millones de euros.

Entre estos nuevos gastos que inflaron los costes destacan los destinados al mobiliario, de 2,3 millones de euros. Tambi¨¦n despuntan los 1,5 millones para el sistema de ac¨²stica virtual, los 4,9 del sistema de aislamiento ac¨²stico y los 1,6 millones del sistema de aire acondicionado. En su informe, la auditor¨ªa criticaba que la acometida de trabajos no contemplados en los presupuestos aprobados no contaba "con el preceptivo estudio que aconseje su realizaci¨®n". Y segu¨ªa: "De igual manera dichas desviaciones no cuentan con el conocimiento y visto bueno de los ¨®rganos de gobierno".

En octubre de 2004 se solicit¨® a la sociedad de tasaci¨®n Tinsa una valoraci¨®n del inmueble. Calcul¨® que el edificio val¨ªa entonces 32 millones, con la condici¨®n de que el pabell¨®n generase 5,3 millones al a?o. Pero s¨®lo un lustro despu¨¦s, en octubre de 2009, otra tasaci¨®n situaba su valor en 8,8 millones, lo que multiplica las p¨¦rdidas de la caja.