Y a las sartenes, Xabier Arbizu
"El avestruz est¨¢ de moda. Tiene alimento y poca grasa", dice el cocinero de Espa?a
El filete de Reina no dura en la plancha ni dos segundos; el de Busquets, si se deja dos horas y parece la suela de un zapato, mucho mejor.
Nacido en Ciordia, un pueblo de Navarra, Xabier Arbizu, el cocinero de la selecci¨®n espa?ola, lleg¨® a San Sebasti¨¢n en 1964 para aprender el oficio y trabaj¨® durante 10 a?os en el m¨ªtico restaurante de Juanito Kojua. Dicen que fue el inventor de la merluza con almejas, un plato que hac¨ªa con piel y hueso para sacarle la gelatina, aunque ahora se sirve con lomos y ha perdido textura. En 1974 se independiz¨® y en el casco viejo de la capital donostiarra refund¨® el Salduba hasta que despu¨¦s del Mundial de Francia 1998, por temas de salud y familia, lo traspas¨® para dedicarse exclusivamente a la federaci¨®n, con la que colaboraba ya desde 1991.
"Estos van a ser campeones", dice. En ese caso les har¨ªa cocochas para cenar
Arbizu es tremendamente querido por los jugadores porque es capaz de darles de comer bien en lugares de lo m¨¢s insospechados, aunque sostiene que la suya es una cocina tremendamente light. Desde que lleg¨® a Potchefstroom lleva 10 kilos de espaguetis al d¨ªa, mucho pollo, mucha verdura y ensalada y mucho avestruz: "A los m¨¦dicos les encanta. Tiene alimento, poca grasa... Est¨¢ de moda".
Recuerda que el seleccionador m¨¢s f¨¢cil de contentar era Javier Clemente: "Con un plato de cuchara bastaba: porrusalda, lentejas...". Explica, orgulloso, una frase que escuch¨® a Bakero: "En la selecci¨®n igual no juegas, pero... ?c¨®mo comes!". "Los pinchos de chistorrita..., ?qu¨¦ ricos!", le reconoce uno de los jugadores de Vicente del Bosque.
Arbizu tampoco para de fre¨ªr huevos y hamburguesas desde que, en la Eurocopa de 2008, Casillas convenci¨® al m¨¦dico de que les dejara darse un homenaje el d¨ªa de fiesta. Y advierte de que la experiencia en la Copa Confederaciones, en 2009, le ha ayudado mucho a llevar la cocina con m¨¢s solvencia en este Mundial y que no ha tenido problemas para el material. Adem¨¢s, agradece a su jefe de cocina, Nelson, su profesionalidad y la del grupo. "Trabajan bien, con buena cara, y est¨¢n bien dirigidos", asegura. Y tiene una intuici¨®n: "Estos van a ser campeones". En ese caso, si no le pasa como en Neustift -"?no cen¨® ni dios despu¨¦s de la final!"-, les preparar¨ªa unas cocochas.
Se le ve feliz, aunque confiesa que lo que peor lleva cuando llegan campeonatos tan largos es separarse de Arantxa Gabilondo, su esposa, con la que lleva tantos a?os casado que ni se acuerda y con la que tiene tres hijos: Aitziber, Gorka y Jon. Y no es por meter presi¨®n, pero est¨¢ loco por ser abuelo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.