Los renglones torcidos de Sof¨ªa
Cartas in¨¦ditas destapan la morri?a de esta cronista b¨¦lica del siglo XIX
Un ba¨²l verde dormitaba en el s¨®tano del n¨²mero 38 de la calle Aleje Ujazdowskie con los ¨²ltimos manuscritos de Sof¨ªa Casanova, hasta que un incendio provocado por las tropas nazis puso fin a su labor de cancerbero en el hogar varsoviano de esta gallega en tierra extra?a. Las llamas fueron las ¨²nicas que silenciaron a esta cronista que abri¨® brecha en el XIX, cuando ser mujer y tener vocaci¨®n literaria parec¨ªan terminos incompatibles.
La coru?esa fue librando batallas para deshacerse de las mordazas hasta que falleci¨®, en 1958. Entonces s¨®lo le tem¨ªa al olvido, que nunca le lleg¨®. El Instituto de Estudios Galegos Padre Sarmiento (IEGPS) sigue haciendo memoria medio siglo despu¨¦s, y rescata su figura de la vor¨¢gine hist¨®rica con la publicaci¨®n de Vida e tempo de Sof¨ªa Casanova, un libro colectivo coordinado por Ant¨®n M. Pazos, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC).
Una productora gallega prepara un documental sobre su vida y obra
Pazos: "Casanova tomaba partido y eso desconcertaba a los hombres"
"Descubr¨ª la apasionante vida de esta mujer mientras editaba el Archivo Goma de la Guerra Civil espa?ola y me top¨¦ con su nombre en varias cartas remitidas desde Polonia para apoyar al bando nacional", cuenta Pazos, quien se queja de la "falta de visi¨®n" de las autoridades encargadas de divulgar la cultura gallega y reclama un lugar privilegiado para Casanova, una de las primeras corresponsales de guerra de este pa¨ªs, despu¨¦s de Carmen de Burgos.
La obra que llega ahora a las librer¨ªas dibuja la figura de una adelantada a su tiempo, que no se resign¨® a mantenerse a la sombra de su marido -el diplom¨¢tico polaco Vicente Lutoslawski-, junto con el que vivi¨® algunos de los sucesos m¨¢s relevantes de principios del siglo XX, y se convirti¨® en cronista de la lucha sufragista en Inglaterra, de la formaci¨®n del partido bolchevique en la Rusia zarista,de las dos guerras mundiales.
"Sof¨ªa tomaba partido en cualquier situaci¨®n y eso desconcertaba a todos los hombres de su alrededor", explica Pazos. Sus opiniones fueron muy controvertidas, porque Casanova no se cas¨® con nadie en aquella ¨¦poca convulsa. Ni siquiera con ABC -el peri¨®dico en el que trabaj¨® como corresponsal durante m¨¢s de 30 a?os-, que vet¨® su punto de vista acerca del bando fascista en la Segunda Guerra Mundial. Esta decisi¨®n editorial de Luca de Tena decepcion¨® profundamente a la autora gallega, que no quiso plegarse a sus exigencias y, con 80 a?os, decidi¨® dar libertad a su pluma para contar por su cuenta el "martirio" de Polonia a carboncillo. Quiz¨¢s por eso, Casanova es la ¨²nica reportera de guerra de esta publicaci¨®n que no aparece en el libro de Alfonso Rojo, La historia secreta de los corresponsales, como destaca Olga Osorio.
La guerra evit¨® que sus ¨²ltimos art¨ªculos vieran la luz, calcinados en el fondo de aquella valija verde, pero Rosario Mart¨ªnez ha conseguido rescatar para este libro editado por el IEGPS diez cartas in¨¦ditas de la periodista coru?esa que se encontraban en la Biblioteca Nacional. Las epistolas est¨¢n manuscritas con letras deformadas que la autora escrib¨ªa casi por intuici¨®n, debido a la miop¨ªa degenerativa que acab¨® por dejarla ciega.
"Esta correspondencia es de una sinceridad valios¨ªsima y aporta datos esclarecedores sobre su manera de pensar y sus inquietudes vitales", declara Mart¨ªnez, autora de la biograf¨ªa Sof¨ªa Casanova, Mito y literatura, que ha dejado al descubierto el lado m¨¢s humano de esta mujer, que sufri¨® el rechazo de su esposo por no haber tenido descendencia masculina.
La periodista nunca confes¨® esta sensaci¨®n de fracaso a su ¨ªntima amiga, Blanca de los R¨ªos, a la que remite fragmentos de a?oranza como ¨¦ste: "Te aseguro que s¨®lo la obediencia que debo a Lutoslawski, detiene las l¨¢grimas en mis ojos. ?Amo tanto a mis hermanos!". De los R¨ªos le mandaba noticias de Galicia en las largas temporadas que pasaba apartada de su tierra natal, Almeiras (Culleredo), pero eso no paliaba la morri?a de la coru?esa: "?Ya ves que somos tres los seres que desde aqu¨ª suspiramos por la patria ausente! (...) Doy largos paseos, atravesando campos inmensos,(...)pensando en mis cari?os de Espa?a".
Ant¨®n M. Pazos ha adelantado que la productora gallega Saga TV est¨¢ preparando un documental sobre Casanova que se suma a la amplia bibliograf¨ªa que ya existe sobre esta gallega, entre la que destaca Ex¨®ticas e escritos xornal¨ªsticos, una recopilaci¨®n de textos traducidos al gallego que public¨® la Xunta en conmemoraci¨®n del 50 aniversario de su muerte, en 2008.
![Retrato de Sof¨ªa Casanova.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/KCZGEOU7MLPZUG2KZLZ6S555CU.jpg?auth=88d0127ec9ea00cba00ba266126ed55fa7d5741b72bffdf5677289f91ac191f9&width=414)
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