La C¨¢mara de Cuentas critica el descontrol sobre hospitales privados

El Servicio Madrile?o de Salud (Sermas) no controla la calidad de los servicios que prestan las entidades privadas o fundaciones a las que deriva a los pacientes mediante convenios o conciertos. Es una de las conclusiones a las que llega el informe de fiscalizaci¨®n que la C¨¢mara de Cuentas de la Comunidad de Madrid ha elaborado sobre el programa presupuestario 750 (Atenci¨®n Especializada del Servicio Madrile?o de Salud) del a?o 2007, recientemente aprobado.

La calidad, asegura el informe, se entiende como una actuaci¨®n continua "dirigida a mejorar la prestaci¨®n de los servicios", pero en la que el Sermas "no ejerce una funci¨®n de control, ya que no verifica si los datos que le remiten los centros referentes a los objetivos de calidad son acordes con la actividad efectivamente desarrollada por el hospital". El hecho de no verificar la informaci¨®n "genera una incertidumbre en relaci¨®n con estos valores", resume el informe en sus conclusiones.

El ¨®rgano de fiscalizaci¨®n y control del sector p¨²blico tambi¨¦n se ocupa de la modalidad de gesti¨®n elegida por la Consejer¨ªa de Sanidad para prestar atenci¨®n sanitaria. Sobre la colaboraci¨®n con entidades privadas o p¨²blicas (fundaciones), afirma: "No se han aportado informes, memorias, dict¨¢menes o cualquier otra documentaci¨®n en los que se justifique la procedencia del sistema elegido". Tampoco en las que se acredite la "forma de financiaci¨®n", a?ade, "por la actividad realizada o capitativa [n¨²mero de tarjetas sanitarias del ¨¢rea a cubrir]". De hecho, el informe recomienda que, antes de elegir una modalidad de atenci¨®n u otra, "la Consejer¨ªa de Sanidad deber¨ªa estudiar, en t¨¦rminos de econom¨ªa, eficiencia y eficacia, las distintas formas de gesti¨®n", compar¨¢ndolas entre s¨ª y con las que resultar¨ªan si diera el servicio directamente con sus hospitales.El informe ¨²nicamente fiscaliza el a?o 2007, el de la puesta en marcha del primer hospital de gesti¨®n enteramente privada en Madrid, Valdemoro. Al a?o siguiente entraron en funcionamiento otros seis nuevos hospitales de gesti¨®n mixta, es decir, con personal sanitario p¨²blico y no sanitario aportado por las concesionarias que ganaron el concurso para construir y gestionar los centros.

Entre sus recomendaciones el informe se?ala que, con la puesta en funcionamiento de los nuevos hospitales y otros que est¨¢n en fase de licitaci¨®n, "en ejercicios futuros ser¨¢ necesario que Sanidad refuerce sus unidades de control" para garantizar que la asistencia sanitaria "sea prestada en condiciones de equidad e igualdad a todos los ciudadanos". Y le se?ala tambi¨¦n que "deber¨ªa evitar el env¨ªo repetido" de pacientes a realizar pruebas diagn¨®sticas a centros privados con los que no tiene convenio o contrato.

La C¨¢mara de Cuentas se ocupa del Programa 750 de los presupuestos, el que financia la atenci¨®n especializada que presta el Sermas, ente de derecho p¨²blico adscrito a la Consejer¨ªa de Sanidad. Los hospitales tradicionales (La Paz, 12 de Octubre...) quedan fuera porque tienen sus propios programas. Los centros de asistencia especializada concertados que analiza el informe son la Fundaci¨®n Jim¨¦nez D¨ªaz y el hospital de Valdemoro (privados) y Alcorc¨®n, Fuenlabrada y G¨®mez Ulla (p¨²blicos), adem¨¢s de las decenas de cl¨ªnicas privadas con las que tiene suscritos convenios y contratos. El informe constata, analiza y hace recomendaciones:

- Carencias. El informe destaca algunas "carencias" en los convenios, conciertos y contratos que mantiene el Sermas con entidades privadas. "No todos incluyen el presupuesto", asegura. "Los m¨¢s antiguos se prorrogan de forma t¨¢cita y ¨²nicamente establecen las tarifas a aplicar por cada prestaci¨®n".

- Penalizaciones. En algunos casos el Sermas no penaliza si los centros no cumplen: "Solo en 6 de los 10 convenios o conciertos analizados se prev¨¦ un sistema de penalizaciones y/o minoraciones en la contraprestaci¨®n de los servicios como consecuencia de demoras en la prestaci¨®n de asistencia sanitaria o deficiencias de calidad y servicios".

- Objetivos difusos. Los objetivos que se marca el Sermas tienen que servir para mejorar la eficiencia, dice el informe. Sin embargo, esos objetivos "no reflejan los resultados espec¨ªficos que se espera obtener con los recursos financieros asignados, lo que no es conforme con la t¨¦cnica de planificaci¨®n a la que, en teor¨ªa, responden". Los indicadores que se usan "no sirven para medir la eficiencia de las actuaciones", a?ade. El an¨¢lisis "se limita a cuantificar la actividad realizada".

- Reclamaciones. No se sabe cu¨¢ntas recibi¨® el Sermas porque, dice el informe, "no ha aportado la memoria anual". Su falta "limita el an¨¢lisis del n¨²mero total de sugerencias, quejas y reclamaciones presentadas, su distribuci¨®n por clases y centros y los tiempos de respuesta".