Disidentes de ETA salen de la c¨¢rcel para trabajar o estudiar
Instituciones Penitenciarias concede la prisi¨®n atenuada a I?aki Rekarte y Andoni Mu?oz con informes favorables del fiscal y el juez
Dos presos con condenas por delitos de terrorismo, I?aki Rekarte y Andoni Mu?oz de Vivar, han accedido a un programa penitenciario personalizado que les permite salir de la c¨¢rcel cada d¨ªa para trabajar o estudiar con la obligaci¨®n de volver a prisi¨®n los fines de semana. Los reclusos, condenados a 203 y 67 a?os de c¨¢rcel, respectivamente, han podido alcanzar este r¨¦gimen espec¨ªfico de prisi¨®n atenuada tras ser expulsados de ETA, condenar expresamente la violencia terrorista y comenzar a satisfacer las indemnizaciones a las v¨ªctimas de los cr¨ªmenes que cometieron. El ex dirigente de la banda Jos¨¦ Luis ?lvarez Santacristina, Txelis, tambi¨¦n ha solicitado el paso a esa situaci¨®n. Instituciones Penitenciarias est¨¢ a¨²n estudiando su petici¨®n.
Los internos han accedido a un r¨¦gimen espec¨ªfico flexibilizado
Jos¨¦ Luis ?lvarez de Santacristina, 'Txelis' ha pedido acogerse a la misma f¨®rmula
Ambos condenan la violencia y hacen frente a sus indemnizaciones
El juez concedi¨® a Txelis un nuevo permiso la semana pasada
Rekarte y Mu?oz de Vivar forman parte del grupo de presos disidentes que han dejado de cumplir sus condenas en c¨¢rceles alejadas del Pa¨ªs Vasco y Navarra tras distanciarse de la organizaci¨®n terrorista. Instituciones Penitenciarias orden¨® su traslado a la prisi¨®n de Nanclares de Oca (?lava), donde cumplen su pena en un "m¨®dulo de respeto", en terminolog¨ªa penitenciaria, junto a otros 17 reclusos que tambi¨¦n se han desmarcado de la violencia. Conviven con otros presos comunes en un modelo implantado ya en 42 centros penitenciarios cuyo objetivo es que los internos se impliquen directamente en su propio proceso de resocializaci¨®n. Los reclusos se encargan ellos mismos de la limpieza, del orden o de servir la comida y tienen comisiones de convivencia encargadas de resolver los conflictos.
Los presos de ETA de Nanclares de Oca est¨¢n clasificados en segundo grado -el r¨¦gimen ordinario-, que permite, si se cumplen ciertos requisitos, acceder a permisos. Para autorizar el r¨¦gimen espec¨ªfico de Rekarte y Mu?oz, con salidas diarias para trabajar o hacer cursos de formaci¨®n, se les ha aplicado el art¨ªculo 100.2 del reglamento penitenciario, que permite a Instituciones Penitenciarias flexibilizar las condiciones de cumplimiento de la condena en casos en los que el interno va a seguir programas laborales, de formaci¨®n o de tratamiento m¨¦dico que no podr¨ªan llevarse a cabo dentro de la prisi¨®n. Es decir, se autorizan algunas condiciones del r¨¦gimen abierto, siempre y cuando haya un pron¨®stico favorable de reinserci¨®n, a presos que no las tendr¨ªan seg¨²n su clasificaci¨®n penitenciaria. Los equipos t¨¦cnicos de las prisiones son los que analizan la evoluci¨®n de los reclusos e informan a favor de la concesi¨®n de esta medida. Su propuesta se eleva a la junta de tratamiento, la encargada de clasificar a los presos en primer, segundo o tercer grado y, en su caso, de informar a favor de la libertad condicional. Una vez aprobada la medida, la ¨²ltima palabra sobre su concesi¨®n la tiene la Direcci¨®n General del Instituciones Penitenciarias. La ley impone que se env¨ªe al juez de vigilancia penitenciaria para que d¨¦ el visto bueno previo informe del fiscal.
La medida concedida a Rekarte y a Mu?oz de Vivar ha sido instada por la junta de tratamiento de Nanclares de Oca -que destac¨® su alejamiento de la banda terrorista, su condena expresa de la violencia y su intenci¨®n de satisfacer las indemnizaciones que le fueron impuestas-, concedida por Instituciones Penitenciarias y finalmente supervisada por el juez central de vigilancia penitenciara de la Audiencia Nacional, Jos¨¦ Luis de Castro, con el informe favorable del Ministerio Fiscal.
Jos¨¦ Luis ?lvarez Santacristina, Txelis, ex jefe del aparato pol¨ªtico de ETA y condenado por ordenar el asesinato de Manuel Broseta y por su relaci¨®n con el cobro del impuesto revolucionario, est¨¢ a¨²n esperando una respuesta a su petici¨®n. El ex dirigente de ETA -detenido en Francia en 1992- redact¨® una carta el pasado mes de octubre en la que reafirmaba su rechazo a la violencia y su ruptura con la banda terrorista -que le expuls¨® de sus filas hace m¨¢s de una d¨¦cada, en 1998, despu¨¦s de que Txelis firmara una carta rechazando el asesinato del concejal popular de Ermua Miguel ?ngel Blanco-. En febrero de 2008 fue formalmente excluido del colectivo de presos de ETA -al que, en realidad, ¨¦l, junto con Kepa Pikabea, hab¨ªa renunciado a seguir perteneciendo meses antes-. Txelis dirigi¨® tambi¨¦n una carta en 2003 al juez de vigilancia penitenciaria de la Audiencia Nacional en la que insist¨ªa en su condena a la violencia. Txelis est¨¢ ya disfrutando de permisos concedidos por el magistrado, el ¨²ltimo de ellos a finales de esta semana.
Previsiblemente, otros presos de la banda seguir¨¢n el camino emprendido por Rekarte, Mu?oz y ?lvarez Santacristina. Muchos de los presos superan los 50 a?os y necesitar¨ªan cursos de formaci¨®n para una eventual reinserci¨®n en la sociedad. Entre los que aspiran a poder acceder a esta nueva situaci¨®n en alg¨²n momento se encuentran hist¨®ricos de la banda como Kepa Pikabea y Valent¨ªn Lasarte (en la prisi¨®n de Villabona), abiertamente cr¨ªticos con ETA. En Nanclares de Oca est¨¢ preso tambi¨¦n Joseba Urrusolo Sistiaga -expulsado de la banda terrorista en 1994 por indisciplina y desvinculado del colectivo de presos desde 2008-, que en su ¨²ltimo juicio en la Audiencia Nacional, celebrado el pasado 5 de julio, asegur¨® ante el tribunal que "la lucha armada ten¨ªa que haber terminado hace tiempo". El acceso a distintas f¨®rmulas de beneficios penitenciarios ha sido una de las demandas planteadas por los disidentes de la banda durante los ¨²ltimos meses. En mayo, ocho internos hist¨®ricos de ETA hablaron por primera vez en una carta de la necesidad de reparar a las v¨ªctimas de la banda y animaron al colectivo de presos a intervenir activamente en el fin del terror.
En el escrito, firmado por Urrusolo, Carmen Gisasola, Pikabea, Rafael Caride, Andoni Alza, Koldo Carrasco, Fernando de Luis Astarloa y Josu Garc¨ªa (presos en Nanclares) animan al resto de los internos de la banda a participar "en la reflexi¨®n pol¨ªtica del proceso" y a acogerse a beneficios penitenciarios. "Aqu¨ª sigue siendo tema tab¨² el poder salir de permiso, el poder salir en tercer grado o en libertad condicional", se?alaban, mientras criticaban que la c¨¢rcel siga siendo un frente de lucha dentro de la izquierda abertzale y ped¨ªan que se cambiara la mentalidad que "ha impedido que los presos podamos acogernos a algunos derechos que nos corresponden". Lamentaban tambi¨¦n que para los presos de ETA solo hubiera dos opciones: pertenecer al colectivo de presos o el "abismo" que hay tras la ruptura, y que tiene "consecuencias" para ellos, sus familiares y su entorno. ETA impone a sus miembros en prisi¨®n una disciplina f¨¦rrea. Les proh¨ªbe pedir permisos, la evoluci¨®n de grados penitenciarios o la libertad condicional, pagar indemnizaciones a las v¨ªctimas, tener abogados de su elecci¨®n o trabajar o colaborar en las actividades de la prisi¨®n. Y les obliga a seguir todas sus pautas en materia de actos de protesta -encierros en las celdas, concentraciones en los patios...-. Quien conculca los mandamientos es castigado con la expulsi¨®n.
Tanto I?aki Rekarte como Andoni Mu?oz fueron expulsados del colectivo de presos el pasado mes de enero junto a Esteban Murillo y Jorge Uru?uela -presos en Nanclares- y Valent¨ªn Lasarte -en Villabona- por "haberse salido de la disciplina".
I?aki Rekarte perteneci¨® al comando Mugarri, desarticulado en 1992. Cumple una condena de 203 a?os por un atentado con coche bomba en Santander, el 19 de febrero de 1992, que cost¨® la vida a tres personas. Desde su detenci¨®n, ha pasado por las prisiones de El Puerto de Santa Mar¨ªa I y Topas (Salamanca). Su proceso de acercamiento a Euskadi comenz¨® con el traslado, en noviembre de 2008, a la c¨¢rcel de Villabona (Asturias), donde comenz¨® a trabajar en el economato del centro y se dio de alta en la Seguridad Social. De ah¨ª dio el salto a Nanclares de Oca, donde tiene un buen pron¨®stico de reinserci¨®n.
Andoni Mu?oz de Vivar fue integrante del comando Lambroa hasta que fue desarticulado el 25 de octubre de 1994. Fue condenado a 67 a?os de c¨¢rcel por la colocaci¨®n de tres artefactos explosivos. Lleva 16 a?os en prisi¨®n.
Fuentes cercanas a estos dos casos se?alan que se est¨¢ cumpliendo estrictamente la legalidad y con todos los requisitos establecidos para hacer flexible el segundo grado. Instituciones Penitenciarias ha declinado hacer declaraci¨®n alguna sobre la situaci¨®n de Rekarte y Mu?oz y sobre la petici¨®n de ?lvarez de Santacristina.
LOS PRESOS QUE HAN OBTENIDO LA PRISI?N ATENUADA
I?aki Rekarte
- EDAD: 39 a?os.
- CONDENA: 203 a?os y seis meses de prisi¨®n por haber colocado un coche bomba en Santander en 1992 que mat¨® a tres personas.
- INDEMNIZACI?N: 901.518 euros a las v¨ªctimas y sus herederos.
- A?OS EN PRISI?N: 18 a?os en
El Puerto I, Topas, Villabona y Nanclares.
- ABANDONO DE LA BANDA: Apartado del colectivo de presos en 2009 y expulsado de ETA en enero de 2010.
Andoni Mu?oz de Vivar
- EDAD: 44 a?os.
- CONDENA: 67 a?os de c¨¢rcel como integrante del comando Lambroa hasta que fue desarticulado. Coloc¨® artefactos explosivos en Portugalete, Sestao y en una v¨ªa f¨¦rrea en mayo, junio y agosto de 1994.
- A?OS EN PRISI?N: 16 a?os.
- ABANDONO DE LA BANDA: Deja
el colectivo de presos en enero de 2010 por situarse "fuera de su disciplina
y de su respaldo".
EL PRESO QUE M?S VECES HA PEDIDO PERD?N
Jos¨¦ Luis ?lvarez, 'Txelis'
- En solo un a?o y medio pas¨® de ser el jefe del aparato pol¨ªtico de ETA a solicitar el fin de la lucha armada. Jos¨¦ Luis ?lvarez Santacristina, Txelis, es, probablemente, el preso que m¨¢s veces ha pedido perd¨®n por sus delitos.
En noviembre de 1993 ya envi¨® una carta a la direcci¨®n de ETA en la que renunciaba expresamente a la violencia
y apostaba por la v¨ªa institucional y pol¨ªtica. El arrepentimiento de Txelis, hombre profundamente religioso que curs¨® sus estudios universitarios en la Universidad de la Sorbona (Francia), le llev¨® a redactar otros dos escritos en 1997 en los que ped¨ªa a ETA una tregua indefinida, asum¨ªa que los efectos del terrorismo eran "terribles" y calificaba de injustificable la violencia callejera. En 1998 fue expulsado de la banda porque, seg¨²n ETA, hab¨ªa alentado "un intento de escisi¨®n". Su salida se produjo tras enviar otra carta a sus ex compa?eros de armas en la que condenaba sin paliativos el asesinato en 1997 de Miguel ?ngel Blanco, concejal del PP de Ermua.
Art¨ªculo 100 del Reglamento Penitenciario
Dispone c¨®mo debe clasificarse a los presos. El primer grado se corresponder¨¢ con un r¨¦gimen en el que las "medidas de control y seguridad ser¨¢n m¨¢s estrictas", el segundo, con el r¨¦gimen ordinario -en el que est¨¢n clasificados los presos de ETA de Nanclares de Oca- y el tercero con el r¨¦gimen abierto.
El apartado segundo permite flexibilizar los grados: "Con el fin de hacer el sistema m¨¢s flexible, el equipo t¨¦cnico podr¨¢ proponer a la junta de tratamiento que, respecto de cada penado, se adopte un modelo de ejecuci¨®n en el que puedan combinarse aspectos caracter¨ªsticos de cada uno de los mencionados grados, siempre y cuando dicha medida se fundamente en un programa espec¨ªfico de tratamiento que de otra forma no pueda ser ejecutado. Esta medida excepcional necesitar¨¢ de la ulterior aprobaci¨®n del juez de vigilancia correspondiente, sin perjuicio de su inmediata ejecutividad".
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