"Nadie me ha llamado..."
En el penal de Guanajay, el disidente cubano Miguel Galv¨¢n espera con angustia noticias sobre su liberaci¨®n
Suena el tel¨¦fono y es de la prisi¨®n de Guanajay, una c¨¢rcel de m¨¢xima seguridad situada a 45 kil¨®metros al oeste de La Habana. "Soy Miguel Galv¨¢n, del Grupo de los 75. ?Es el corresponsal de EL PA?S?". La voz de este ingeniero de mec¨¢nica automotriz, con varias maestr¨ªas a sus espaldas y 45 a?os de edad, suena como un ca?¨®n, pero en sus palabras se percibe tambi¨¦n la angustia: "Todav¨ªa nadie me ha llamado, sigo esperando...". Con igual incertidumbre, otros presos aguardan la llamada del cardenal Jaime Ortega, principal mediador de la Iglesia cat¨®lica ante el Gobierno, quien desde hace d¨ªas contacta personalmente con cada uno de los opositores en prisi¨®n para saber qu¨¦ quieren hacer.
Ricardo Alarc¨®n afirma que todos los opositores "pac¨ªficos" ser¨¢n excarcelados
"Le dir¨¦ que me voy si puedo marcharme con toda mi familia
[una decena de personas, entre hermanos, sobrinos, cu?ados]. Tambi¨¦n quisiera poner un ramo de flores en la tumba de mi madre", asegura. A Galv¨¢n, condenado a 26 a?os de c¨¢rcel (la tercera pena m¨¢s elevada de aquellos juicios sumar¨ªsimos de la primavera de 2003), le preocupan las condiciones de llegada en Espa?a. Es uno de los objetivos de esta llamada: "?Sabe usted algo de c¨®mo van las cosas por all¨¢?".
Otros dos prisioneros de conciencia en Guanajay, H¨¦ctor Ra¨²l Valle Hern¨¢ndez y Alfredo Felipe Fuentes, se enfrentan al mismo dilema: todav¨ªa no los han llamado aunque se quieren marchar, y comparten las mismas angustias. El cuarto miembro del Grupo de los 75 que cumpl¨ªa su sentencia en esta prisi¨®n, Jos¨¦ Ubaldo Izquierdo, habl¨® hace d¨ªas con Ortega y saldr¨¢ hacia Espa?a junto a un grupo de otros siete opositores esta misma semana. Galv¨¢n vuelve a la carga: "?Se sabe ya qu¨¦ pasar¨¢ con los que no quieran marcharse?". Todav¨ªa hay muchas cosas que no est¨¢n claras, y las m¨²ltiples indefiniciones tienen "mal" a los presos, afirma este sindicalista opositor, que en el momento de su detenci¨®n trabajaba como periodista de la agencia disidente Havana Press. Despu¨¦s de nuestra conversaci¨®n a toda prisa ("los presos tenemos solo 25 minutos semanales de llamadas telef¨®nicas"), el presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarc¨®n, despej¨® algunas dudas: el Gobierno liberar¨¢ a todos los presos pol¨ªticos que no carguen con hechos violentos ni delitos de sangre, no solo a los 52 miembros del Grupo de los 75; y los que decidan quedarse en Cuba podr¨¢n hacerlo. "Lo que dice el acuerdo, (es) que podr¨¢n viajar al exterior (...), pero en Cuba hay personas que fueron liberadas de prisi¨®n hace a?os y que est¨¢n en su casa. Esto es lo mismo", declar¨® en entrevista con France Presse en Ginebra.
Pero ?cu¨¢ntos presos pol¨ªticos "pac¨ªficos" pueden beneficiarse de la medida? El presidente de la Comisi¨®n Cubana de Derechos Humanos, Elizardo S¨¢nchez, aclara que una vez salgan los 52 presos del Grupo de los 75, en las c¨¢rceles quedar¨¢n 101 presos "por motivos pol¨ªticos". "De estos, 36 pertenecen a organizaciones opositoras, alrededor de 60 no han realizado ning¨²n hecho violento y 69 pudieran acogerse ahora mismo a la libertad condicional, aplicando las leyes cubanas". S¨¢nchez no da nombres por "elemental discreci¨®n", pero sus informes ya est¨¢n en manos de organizaciones humanitarias. Otra noticia es que, gracias a gestiones de la Iglesia, el Gobierno permitir¨¢ salir directamente hacia EE UU a Ariel Sigler Amaya, parapl¨¦jico, liberado recientemente.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.