Vuelta a la normalidad
Las pruebas de solvencia son la base para que se recuperen el cr¨¦dito y el interbancario en Europa
Las pruebas de resistencia (stress tests) de la banca europea, esperadas con gran expectaci¨®n por los inversores y los Gobiernos, han confirmado la percepci¨®n general de que las entidades financieras del ¨¢rea euro tienen un grado de solvencia razonable. Solo siete entidades europeas, entre los que se encuentran CajaSur, cuatro grupos de cajas espa?olas en proceso de fusi¨®n, el nacionalizado Hypo Real Estate alem¨¢n y el griego Atebank, han suspendido las pruebas, mientras que los espa?oles Santander y BBVA se sit¨²an entre los mejores ratios de capital (10% y 9,3%, respectivamente) de la eurozona. El Banco Central Europeo (BCE), los Gobiernos y la Comisi¨®n Europea se apuntan un tanto, puesto que han jugado con ¨¦xito la carta de la transparencia como el mejor remedio para combatir los rumores poco fundados sobre la debilidad de la banca europea y, al mismo tiempo, se demuestra que los costosos programas de rescate y recapitalizaci¨®n (236.000 millones en toda Europa) han tenido ¨¦xito.
El caso de las cajas espa?olas que no han pasado el examen (el grupo Caixa Catalunya, Caixa Tarragona y Caixa Manresa, el formado por Caja Duero y Caja Espa?a, la Banca C¨ªvica, Unimm y CajaSur) tampoco se aparta del gui¨®n previsto. Como puede apreciarse, est¨¢n incursas en procesos de fusi¨®n y requerir¨¢n en conjunto una recapitalizaci¨®n de poco m¨¢s de 2.000 millones de euros para cumplir con los requisitos de solvencia en el peor de los escenarios establecidos. En funci¨®n de los resultados conocidos de los ex¨¢menes, est¨¢ claro que el Fondo de Reestructuraci¨®n Ordenada Bancaria (FROB), cuya pr¨®rroga autoriz¨® ayer Bruselas, est¨¢ suficientemente dotado para hacer frente a la recapitalizaci¨®n de la banca espa?ola. Las pruebas demuestran adem¨¢s la malevolencia de las interpretaciones seg¨²n las cuales el hecho de que el FROB hubiese aportado apenas 11.000 millones de los 99.000 que entre capital y avales ten¨ªa como dotaci¨®n era prueba inequ¨ªvoca de que el sistema espa?ol requer¨ªa fort¨ªsimas inyecciones de capital que el Gobierno y la propia banca se negaban a reconocer. Pues bien, el Banco de Espa?a ha facilitado toda la informaci¨®n necesaria sobre el 95% del sistema financiero espa?ol, un esfuerzo de transparencia muy por encima del que han realizado otros pa¨ªses europeos (Francia solo examin¨® a cuatro bancos). Lo propio ahora es que las entidades suspendidas acuerden con el Banco de Espa?a si el nuevo capital que requieren puede ser privado.
En apariencia, con las pruebas de resistencia publicadas ayer los inversores y las entidades financieras tienen la informaci¨®n necesaria como para tomar decisiones razonablemente seguras. Dif¨ªcilmente tendr¨¢n los mercados y los propios bancos por otras v¨ªas una informaci¨®n tan detallada y exacta como la que se dio a conocer ayer en Londres. Los controles son m¨¢s duros que los que se aplicaron a la banca estadounidense hace algo m¨¢s de un a?o. Los mercados abiertos recibieron ayer con subidas los resultados de las pruebas. Por tanto, en condiciones normales deber¨ªan despejar las dudas sobre la solidez financiera europea (y espa?ola), tal como ayer sugiri¨® el gobernador, dar por superada la primera fase de la crisis bancaria e iniciar la segunda, que ser¨¢ la recuperaci¨®n del cr¨¦dito y la normalizaci¨®n de los pr¨¦stamos interbancarios, que se hab¨ªan secado.
Ahora bien, los mercados pueden empecinarse en mantener la desconfianza con el argumento de que los datos facilitados son falsos, las estad¨ªsticas est¨¢n trucadas o los requerimientos legales de solvencia de un pa¨ªs son demasiado laxos. La banca espa?ola sufre de graves problemas de liquidez en el interbancario por la sencilla raz¨®n de que en Europa se calcula que su exposici¨®n al hundimiento inmobiliario no se refleja en una tasa de morosidad excesivamente baja. Si esa desconfianza se mantiene, estar¨ªamos ante un caso de mala fe.
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