Mercadona aligera el almac¨¦n
La firma de distribuci¨®n apuesta por la log¨ªstica como palanca de las ventas
Mercadona ha logrado convertirse en el l¨ªder espa?ol de la distribuci¨®n por volumen de ventas aplicando la l¨®gica y la racionalidad a su desarrollo y crecimiento, seg¨²n les gusta explicar a sus directivos. Con este criterio se abri¨® hace cuatro a?os como una gran apuesta estrat¨¦gica el almac¨¦n log¨ªstico de Ciempozuelos, Madrid, desde donde se reparten mercanc¨ªas a sus centros de 23 provincias espa?olas, con una red de 400 supermercados.
El primer almac¨¦n totalmente automatizado de la cadena, que tuvo su origen en la idea de este grupo familiar de que lo que puede hacer una m¨¢quina no lo debe hacer el hombre, dista tan solo a dos kil¨®metros, autov¨ªa de por medio, de la irracionalidad urban¨ªstica de la macrociudad de Sese?a que construyera Francisco Hernando, conocido como El Pocero.
20.000 pal¨¦s diarios se tratan de forma autom¨¢tica para ir a 400 supermercados
Los 20.000 pal¨¦s que hacen su recorrido diario completan un proceso totalmente mecanizado (la planta cuenta con 70.000 fotoc¨¦lulas y 15.000 sistemas motorizados de movimiento autom¨¢tico de mercanc¨ªas) que ha sido estudiado por las principales firmas multinacionales entre ellas la estadounidense Wal Mart, l¨ªder mundial del sector de distribuci¨®n.
El complejo cuenta con 54.000 huecos para pal¨¦s y otros 800.000 para formatos de caja. Sin apenas ruido (se oye la m¨²sica ambiente en amplias zonas), el marasmo de robots perfectamente organizados va colocando en su sitio los pal¨¦s con mercanc¨ªas sin dejar un hueco libre, se?alan fuentes de la empresa durante el recorrido del trayecto.
El almac¨¦n del siglo XXI, como le denominan en Mercadona, fue una apuesta que ahora se ve como un fil¨®n en la gesti¨®n y los resultados econ¨®micos, pero que provoc¨® "cierta dosis de p¨¢nico a priori por el alcance y la dimensi¨®n de sus inversiones". Varios equipos de t¨¦cnicos recorrieron Europa y Estados Unidos en busca de la tecnolog¨ªa m¨¢s adecuada y finalmente, y siempre asumiendo el riesgo de lo nuevo, se apost¨® por la tecnolog¨ªa de la firma Witron para conseguir instalar el almac¨¦n que la propia familia Roig considera que es "la Capilla Sixtina de la log¨ªstica comercial".
Se invirtieron 300 millones de euros y la compa?¨ªa familiar, cuyo engranaje de funcionamiento interno ha llegado a ser estudiado en la Universidad de Harvard, se adentraba en un terreno que exig¨ªa un gran esfuerzo de organizaci¨®n. La empresa ha puesto en marcha el segundo de este nivel tecnol¨®gico en Villadangos del P¨¢ramo, Le¨®n, tras las prestaciones que ha dado el centro de Ciempozuelos. Los 200.000 metros cuadrados del almac¨¦n log¨ªstico cercano a Madrid siempre est¨¢n a pleno rendimiento porque los 600 trabajadores que all¨ª trabajan lo hacen en tres turnos por jornada en seis d¨ªas a la semana.
En esta peque?a ciudad entran y salen a diario 3.000 camiones para carga y descarga, que vienen con cita previa como el que va al dentista. Ahora se est¨¢ experimentando con camiones con gas para contaminar menos.
El grado de automatizaci¨®n del almac¨¦n hace que la plantilla sea de 600 personas en lugar de las 1.800 personas que ser¨ªan necesarias si el complejo log¨ªstico fuera convencional. El trabajo de almac¨¦n es una de las tareas con m¨¢s grado de penosidad por su exigencia de esfuerzo corporal y su car¨¢cter repetitivo. Por ello, la incorporaci¨®n de tecnolog¨ªa es un mandamiento para la estrategia de recursos humanos que incide por supuesto en la rentabilidad de la empresa. "Nuestro leitmotiv es eliminar trabajos penosos, pero, por supuesto, buscamos la eficiencia y la rentabilidad para que se refleje en la cuenta de resultados", dicen los directivos de Mercadona.
La tecnolog¨ªa del centro permite que el 40% de la plantilla sean mujeres cuando en un almac¨¦n cl¨¢sico este porcentaje no sobrepasa el 4% por el esfuerzo f¨ªsico requerido. La conciliaci¨®n de la vida laboral y familiar es otro de los renglones en el cat¨®n laboral de Mercadona y por ello no se olvidaron de abrir en las instalaciones del complejo un centro de educaci¨®n infantil con capacidad para 100 ni?os para los hijos de los trabajadores que est¨¢ abierto durante las horas de trabajo. Mercadona como norma no contrata a trabajadores que vivan a m¨¢s de 15 minutos del centro de trabajo para evitar que a la vuelta de uno o dos a?os ya busquen y pidan el traslado a un centro m¨¢s cercano a su domicilio.
Otra faceta que incide en la racionalidad de la que presume el grupo de distribuci¨®n es lo que llaman la descarga silenciosa. A trav¨¦s de un acuerdo con el Ayuntamiento de Madrid han logrado que un tr¨¢iler (que lleva la carga de varios camiones de reparto) descargue a las tres de la ma?ana sin entorpecer el tr¨¢fico ni generar ruido en zonas muy castigadas por estos dos problemas como la calle de Bravo Murillo de Madrid, entre otras.
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