'Contradictio in terminis'
Pueden parecer simples cuestiones sem¨¢nticas, pero quiz¨¢ ocultan algo m¨¢s: la ancestral querencia humana a justificar lo injustificable. Obvio es que la revoluci¨®n -sea esta pol¨ªtica, social o econ¨®mica- es un contrapoder, un movimiento antiinstitucional; en el momento en que la revoluci¨®n alcanza el poder y se instala en el establishment deja inmediatamente de ser revoluci¨®n.
Tan obvio es lo anterior que se ignora por completo, especialmente en reg¨ªmenes comunistas, pero no solo en ellos. En Cuba la revoluci¨®n lleva cuatro d¨¦cadas gobernando a sus ciudadanos, y en M¨¦xico gobern¨® durante 70 a?os el Partido Revolucionario Institucional (PRI), la m¨¢s flagrante contradicci¨®n posible.
Quiz¨¢s todo se reduzca a una pura cuesti¨®n de marketing, que el t¨¦rmino revoluci¨®n sea tan querido por los ciudadanos que no se dan cuenta de que ya termin¨®.
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