Puerta del Sol con Tuga

Lo que ocurri¨® el jueves con Tuga, artista de mimo, en la Puerta del Sol es digno de una zarzuela o una pel¨ªcula muda de Charlot. Tuga en la vida surreal se llama Rodolfo Meneses y es chileno. ?ltimamente tiene mucho ¨¦xito haciendo a la gente partirse de risa con sus espect¨¢culos callejeros en pleno centro de la capital.

Estos son los hechos, como narr¨® ayer en este peri¨®dico Sara Espa?a. Estaba el mimo haciendo de las suyas ante medio millar personas, cuando, de repente, aparece la Polic¨ªa Municipal y exige con buenos modos al artista su documento de identidad. A continuaci¨®n lo conducen a comisar¨ªa. All¨ª permanece cerca de una hora. La conversaci¨®n tuvo que ser memorable, porque Tuga, acorde con su arte y sin salirse de su papel, no pronunci¨® una sola palabra durante 45 minutos. No le permitieron escribir sus contestaciones en una pizarra. Es decir, espect¨¢culo vertiginoso, fusi¨®n de zarzuela y Chaplin. Pero el interrogatorio ten¨ªa que haber sido ejecutado en la calle y en presencia de los espectadores, uno de los cuales jur¨®: "A Dios pongo por testigo que nunca perdonar¨¦ al polic¨ªa municipal que me priv¨® de ver y o¨ªr la escena del interrogatorio. Lo retuvieron para hartarse de re¨ªr en privado. Estoy seguro de que lo grabaron en v¨ªdeo. ?Ese v¨ªdeo tiene que ser del pueblo!". Lo soltaron al cabo de una hora. El artista se despidi¨® de ellos y a continuaci¨®n les puso una denuncia.

Los artistas callejeros y las estatuas vivientes est¨¢n siendo objeto de una obsesiva persecuci¨®n por la autoridad. Dicen que alborotan el tr¨¢fico y que son como la miel para los carteristas. Madrid carece de ordenanzas adecuadas y los c¨®micos tienen que ir huyendo de la pasma como geisha por arrozal. Tendr¨ªa que haber muchos m¨¢s Tugas y estatuas vivientes. Algo que nos ayude a alucinar. Los pol¨ªticos debieran expresarse solamente con mimo. Qu¨¦ risa, dios.