Alonso roza la perfecci¨®n en Monza

La ilusi¨®n comenzaba ya a ser un bien escaso en el equipo Ferrari, cuando ayer Fernando Alonso remont¨® el vuelo y logr¨® la primera posici¨®n en la parrilla por delante de Button y de Massa. La situaci¨®n del equipo no es la que todo el mundo esperaba despu¨¦s de que en Bahrein el asturiano debutara en la escuder¨ªa de Maranello con una inesperada victoria. Tal vez aquel ¨¦xito prematuro levant¨® unas expectativas que no se correspond¨ªan con la calidad del coche que durante el invierno hab¨ªa construido el equipo m¨¢s poderoso del mundo. Sin embargo, tampoco nadie imaginaba que, a falta de seis carreras para la conclusi¨®n, la situaci¨®n ser¨ªa ya tan desesperada que no admite ning¨²n error hasta la conclusi¨®n del campeonato. En Monza Alonso se juega sus opciones al t¨ªtulo. Los 41 puntos que le separan del l¨ªder, el brit¨¢nico Lewis Hamilton, le colocan en una encrucijada dif¨ªcil de resolver: solo le valen victorias y podios y tal vez ni eso le baste.

"No quiero estresarme pensando en la victoria, solo pido consistencia", cuenta Alonso

Todo este conglomerado de elementos se debat¨ªa en la cabeza de los responsables del equipo y de sus dos pilotos, cuando Ferrari lleg¨® a Monza despu¨¦s de un ¨²ltimo gran premio en Spa en el que no hubo ning¨²n podio y donde Alonso equivoc¨® la estrategia y no logr¨® ni siquiera acabar la carrera. Se enfrentaban no solo a la expectante mirada de sus tifosi, sino tambi¨¦n a la necesidad absoluta de mejorar el rendimiento del F10. Mostraron buenas maneras desde el viernes, en los primeros entrenamientos libres. "El coche es competitivo", dijo ya entonces Alonso. Y ayer, todos estos augurios se confirmaron cuando el piloto asturiano, doble campe¨®n mundial, realiz¨® una vuelta en la que roz¨® la perfecci¨®n y consigui¨® alzarse con la primera posici¨®n en la parrilla de salida. No era un ¨¦xito balad¨ª. Alonso no lograba una pole desde el a?o pasado en Hungr¨ªa, cuando todav¨ªa corr¨ªa para Renault. Pero Ferrari deb¨ªa mirar mucho m¨¢s lejos: la ¨²ltima que logr¨® databa de finales de 2008, cuando Massa se la adjudic¨® en Brasil; hab¨ªan transcurrido 31 carreras.

"Fue una bonita sorpresa cuando al salir del coche me dijeron que era el primero", confes¨® un emotivo Alonso. "Estaba preparado para perder la pole, como ya me hab¨ªa ocurrido al menos tres veces esta misma temporada por media d¨¦cima. Pero esta vez, no. Fue fant¨¢stico el sabor de boca que me qued¨®: ser el primero de la parrilla con un Ferrari y en Monza". Los gestos lo dijeron todo. Alonso subi¨¦ndose al cap¨® del coche y se?alando el escudo de Ferrari en su casco ante miles de aficionados entregados. Montezemolo levantando el pulgar en se?al de victoria y luego aplaudiendo a Fernando antes de abrazarlo frente al pabell¨®n de Ferrari. Stefano Domenicali, director de la escuder¨ªa, abraz¨¢ndose a ingenieros y mec¨¢nicos. Y todo el mundo felicit¨¢ndose. "Fernando y Felipe hicieron un buen trabajo y nosotros les dimos un coche muy competitivo esta vez", reflexion¨® Domenicali. "Es bonito recuperar estos sentimientos, despu¨¦s de tanto tiempo. Pero no olvidamos que lo que cuentan son los puntos, y se ganan en las carreras".

Hay un sentimiento en Ferrari de que hoy el equipo puede lograr un doblete, si sus dos pilotos arrancan bien en la salida. Pero existe tambi¨¦n la percepci¨®n de que han debido combinarse varios elementos para poder cuadrar este ¨¦xito: el error de Hamilton en la configuraci¨®n de su McLaren (sin conducto f y con problemas de adherencia), la dif¨ªcil adaptaci¨®n de Red Bull a este trazado tan r¨¢pido, la perfecta vuelta que dio Alonso y el acierto de Ferrari en la puesta a punto del coche y en colocarle el octavo motor. En carrera las cosas pueden cambiar. "Necesitamos al menos un podio para mantenernos en la lucha por el t¨ªtulo", asegur¨® Alonso. "No quiero estresarme pensando en la victoria. Solo pido consistencia, porque si todo sale bien no hay raz¨®n para no luchar por ganar".

Los mimbres est¨¢n puestos. La pole de Alonso y el tercer puesto de Massa certifican el buen momento del F10. Pero a lo largo de la temporada se han cometido tantos errores -fallos de estrategia, accidentes, roturas- que al equipo le falta confianza. Una victoria en Monza ante su afici¨®n ser¨ªa el mejor revulsivo para un equipo y un piloto que a¨²n no han tirado la toalla y que necesitan recuperar la ilusi¨®n.