Sorpresas en Madrid
Las primarias dan un giro interesante: ayudan a los dos candidatos socialistas y perjudican al PP
La batalla en el seno del PSOE por la candidatura a la presidencia de la Comunidad de Madrid ha producido ya algunos datos sorprendentes. Las primarias son un fen¨®meno relativamente nuevo en Europa, que est¨¢n poniendo a prueba a sus dirigentes con resultados inciertos, pero enriquecedores para la democracia. Por ello, tienen raz¨®n quienes ahora dentro del PSOE defienden las elecciones internas para elegir al candidato que le ha de disputar el trono a Esperanza Aguirre.
La realidad es que Rodr¨ªguez Zapatero intent¨® evitar las primarias convenciendo a Tom¨¢s G¨®mez de que abandonara la carrera en favor de su nueva apuesta, Trinidad Jim¨¦nez; y ahora se contradice cantando las excelencias del proceso democr¨¢tico haciendo de la necesidad virtud. Los ciudadanos, como muestran las encuestas, siempre han estado a favor de las primarias, en todos los partidos, porque creen que es una buena manera de fortalecer la democracia interna. Los partidos las aborrecen como la peste.
A este lado del Atl¨¢ntico, las primarias solo se celebran para resolver disputas generadas por las luchas internas, para resolver crisis como la provocada por G¨®mez con una rebeli¨®n que el partido est¨¢ digiriendo con dificultades. Que es as¨ª lo demuestra la decisi¨®n de devolver precipitadamente el derecho al voto a unos 600 militantes de M¨®stoles castigados por G¨®mez en su momento (y que podr¨ªan inclinar la balanza en favor de Jim¨¦nez) o la negativa del comit¨¦ federal a que ambos aspirantes se enfrenten en televisi¨®n, con un argumento tan sonrojante como que defienden el mismo programa. Quiz¨¢ un cara a cara sea ofrecer en bandeja la imagen de la divisi¨®n, pero aportar¨ªa argumentos a los militantes y a los ciudadanos para optar por uno de ellos.
El intento del PP de descalificar el proceso es sintom¨¢tico. El partido opositor tiene razones para la preocupaci¨®n. Con G¨®mez de candidato, Aguirre solo pod¨ªa contar con una nueva e inapelable victoria. Hoy, los dos contendientes socialistas son bien conocidos entre el electorado. El menos notorio, G¨®mez, no solo cuenta con un perfil personal reforzado por su osad¨ªa, sino que ha logrado en tres semanas el grado de conocimiento p¨²blico que no alcanz¨® en los tres a?os anteriores. Y desde que se anunciaron las primarias, el electorado socialista parece estar superando el ap¨¢tico distanciamiento ocasionado por la mala gesti¨®n econ¨®mica de Zapatero.
El desenlace est¨¢ abierto. Son s¨ªntomas negativos las maniobras del comit¨¦ federal del PSOE y la falta de debate de fondo entre los dos bandos enfrentados. Pero los socialistas est¨¢n a tiempo de reconducir la situaci¨®n y aunar fuerzas en Madrid en torno al ganador para intentar privar de su sue?o a Aguirre. Una tarea, la de descabalgar a la presidenta de Madrid, que promete ser ardua para el PSOE, seg¨²n muestra el sondeo publicado ayer por este peri¨®dico, pero que, al menos con los datos que cosecha Trinidad Jim¨¦nez, no resulta ya impensable.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.