La librer¨ªa m¨¢s antigua, expropiada

La actividad fren¨¦tica que se vive en el interior de los poco m¨¢s de 100 metros cuadrados de la librer¨ªa Balmes es la propia del inicio del curso escolar. En el suelo se amontonan bolsas con libros de texto, mientras un comercial ofrece las ¨²ltimas novedades editoriales o reediciones de ¨¦xitos que nunca perecen. Y es que en este establecimiento de Lugo lo ¨²nico que tiene fecha de caducidad es el inmueble, que acoge desde 1887 la que est¨¢ considerada como la librer¨ªa m¨¢s antigua de Galicia.

Saber qui¨¦n fund¨® el negocio es un objetivo imposible, pero da la sensaci¨®n de que lo ubic¨® en el lugar equivocado, en el n¨²mero 2 de la Plaza de ?ngel Fern¨¢ndez G¨®mez, pegada a la parte posterior del Ayuntamiento. Y es que es el propio Consistorio el que ha acordado iniciar los tr¨¢mites de expropiaci¨®n para ampliar las instalaciones municipales y habilitar el inmueble de la librer¨ªa y otro anexo, el n¨²mero 4, como un centro de nuevas tecnolog¨ªas.

La Balmes fue abierta en 1887 y era frecuentada, entre otros, por ?nxel Fole

Si el Gobierno local no ofrece m¨¢s dinero, los due?os echar¨¢n el cierre

"Soy el de la Balmes, vino el libro de Religi¨®n que le faltaba". Es la informaci¨®n que traslada telef¨®nicamente a un cliente Jos¨¦, uno de los tres socios que se quedaron con el negocio cuando se jubilaron las anteriores propietarias, que, a su vez, lo heredaron, a mediados del pasado siglo, de su t¨ªo, ?lvaro Gonz¨¢lez Castrod¨¢.

Mientras tanto, el comercial no para de activar su port¨¢til ofertando t¨ªtulos. "Empez¨® ayer una serie de Los Pilares de la Tierra y hay una edici¨®n nueva", dice el vendedor. "Pues pida tres", le responde la mujer de Vicente, otro de los copropietarios, ¨²nica trabajadora al margen de los due?os. Y es que la obra de Ken Follet, junto con el misterio de El C¨®digo Da Vinci, son, tal vez, los t¨ªtulos m¨¢s vendidos en la larga historia de esta reputada librer¨ªa.

Entra luego un chaval muy joven, aunque con una vestimenta cargada de nostalgia. Luce una camiseta de la Roja, pero rotulada con el nombre de Ra¨²l. Con ese atuendo que desprende tanta a?oranza como pol¨¦mica gener¨® en su d¨ªa, recoge el material escolar que le faltaba y se marcha con un rictus de nulo entusiasmo. Es la vida de la Balmes, que desde hace m¨¢s de 120 a?os se reproduce cada d¨ªa.

Vicente, que comenz¨® a trabajar en el negocio a los 15 a?os y que desde hace seis lo hace como copropietario, asegura que hay familias que guardan con el establecimiento una fidelidad "de pel¨ªcula", que se prolonga hasta la cuarta generaci¨®n.

En las estanter¨ªas de este espacio alquilado se amontonan miles de vol¨²menes. ?Cu¨¢ntos? "No lo s¨¦, pero son muchos, meu rei", responde Vicente, que hace un poco las funciones de portavoz, pegado al busto m¨¢s ilustre de la literatura espa?ola, Miguel de Cervantes. Pero si desde el Ayuntamiento de Lugo no se vuelven atr¨¢s, pronto quedar¨¢n vac¨ªas. La intenci¨®n municipal es consumar la expropiaci¨®n y acondicionar los inmuebles con cargo a fondos del plan Urban, lo que quiere decir que las obras deber¨¢n estar iniciadas antes de 2013 y concluidas, como muy tarde, en 2015.

Al lado de la Balmes, los propietarios poseen otro negocio de papeler¨ªa y objetos de regalo que no entra en el proceso de expropiaci¨®n, pero que por s¨ª solo, dicen, "no se mantiene". A d¨ªa de hoy, estos libreros est¨¢n un poco aturdidos. Han recibido "las mejores palabras" de los vecinos del Gobierno local, pero la cifra que les propusieron pagarles "es de risa". "Con lo que nos pusieron en el papel, no da ni para un utilitario", matiza.

Quieren mantener vivo un negocio tantas veces visitado por el narrador y dramaturgo ?nxel Fole, el Premio Nacional de Literatura Infantil Paco Mart¨ªn (sobrino de las anteriores propietarias), el escultor Paco Pestana o el pintor Quique Bordell. De hecho, ya sondearon los precios de bajos por las inmediaciones, pero "est¨¢ imposible". "Tendr¨ªamos que pagar m¨¢s del triple y para eso, el negocio no da", se lamentan los propietarios de la librer¨ªa. Si en "el papel", como denominan a la oferta que les traslad¨® el Ayuntamiento, no aparecen otras cifras, Vicente lo tiene claro: "Cerramos".

Mientras el futuro de la Balmes est¨¢ en el aire, los socios propietarios no paran de recibir llamadas interes¨¢ndose por la situaci¨®n de la emblem¨¢tica librer¨ªa. Hay clientes que les proponen iniciar una campa?a de recogida de firmas y otros les piden que no se queden de brazos cruzados. Es algo que los libreros agradecen "infinitamente" y no descartan la adopci¨®n de alguna medida si el entendimiento con el Ayuntamiento de Lugo no llega. Ellos todav¨ªa no han acabado de pagar el precio que pactaron en su d¨ªa por hacerse con un negocio en el que pr¨¢cticamente se han criado y que, subrayan, "forma parte de la historia de Lugo y casi de Galicia".