Bibliotecas con wifi pero sin enchufes

Para sacar provecho a la revoluci¨®n tecnol¨®gica es bueno tener enchufes porque los ordenadores, que ofrecen herramientas de trabajo y conducen al extenso mar de conocimiento de Internet, funcionan con electricidad. El problema de los usuarios de las bibliotecas municipales de Madrid es que "no hay enchufes para todo el mundo", seg¨²n un portavoz de la Concejal¨ªa de Cultura, as¨ª que el Ayuntamiento les ha prohibido que conecten el port¨¢til a la red el¨¦ctrica.

"Yo me lo traigo cargado, pero la bater¨ªa me dura dos horas. Suelo quedarme a medio camino", cuenta El¨ªsabet Rinc¨®n, estudiante de Historia de 18 a?os, en la biblioteca de Ciudad Lineal, donde hay un cartel que dice: "De acuerdo a normas b¨¢sicas de prevenci¨®n y seguridad NO podr¨¢n conectarse bater¨ªas de ordenador port¨¢til a los enchufes".

El uso del ordenador en las salas queda condicionado a lo que dure la bater¨ªa

De las 28 bibliotecas municipales solo hay una que permita utilizar la red el¨¦ctrica, un centro reci¨¦n inaugurado llamado ?ngel Gonz¨¢lez, en honor al poeta asturiano fallecido en 2008. En las dem¨¢s no se puede. Para poes¨ªa, la explicaci¨®n que da el Ayuntamiento a los ciudadanos que presentan quejas por la ausencia de este servicio. "La finalidad de la norma es la de evitar los distintos problemas que la conexi¨®n indiscriminada de aparatos a la red est¨¢ provocando: desaparici¨®n de dispositivos, acaparamiento de los mismos por unos pocos usuarios en perjuicio de otros, disputas entre lectores por utilizar los enchufes (...)", se puede leer en una de las circulares dados en junio por la Direcci¨®n General de Archivos, Museos y Bibliotecas, en los que se bas¨® esta semana el grupo municipal de Izquierda Unida para criticar p¨²blicamente la situaci¨®n.

En esa misma respuesta se cita, en ¨²ltimo lugar, otra causa para el veto de los enchufes: "La ausencia de una infraestructura adecuada en todas las bibliotecas".

La prohibici¨®n trae problemas a los estudiantes. "Hay muchas asignaturas que solo se pueden estudiar con ordenador, porque ya no dan apuntes; va todo con PowerPoint [un programa inform¨¢tico para ver im¨¢genes y textos]. Y en Historia del Arte no utilizamos libros, vemos las obras en el ordenador", afirma El¨ªsabet Rinc¨®n.

Otra chica que estudia en Ciudad Lineal, Romina Posadas, estudiante de Ingenier¨ªa de Obras P¨²blicas, de 23 a?os, da un ejemplo in situ de la penitencia de los enchufes. Est¨¢ en una mesa de color verde aguado, con un rotulador, dos bol¨ªgrafos y muchos folios. "Ahora mismo me he olvidado de unas cosillas de normativa que podr¨ªa encontrar en Internet", comenta. Nunca lleva ordenador porque conoce la norma.

Lo mismo le ocurre a muchos otros usuarios que acuden all¨ª consultando libros de papel para la redacci¨®n de trabajos cuya presentaci¨®n pasa obligatoriamente por el teclado de un ordenador.

En las 16 bibliotecas de la Comunidad de Madrid tampoco hay facilidades para la vida digital pese a que, al igual que en las municipales, el wifi est¨¢ generalizado. La Consejer¨ªa de Cultura afirma que en 14 se puede pedir el uso de un enchufe "para una carga puntual", mientras que en dos (inauguradas en 2008 y 2010) ya hay enchufes junto a las mesas de las salas de lectura. Llamando a sus bibliotecas se descubre un mundo de confusi¨®n en el que caben toda clase de opciones.

Buenos d¨ªas, ?ah¨ª se puede enchufar el ordenador para cargar la bater¨ªa? "No, son las normas de todas las bibliotecas de la Comunidad" (biblioteca de Canillejas). "S¨ª, pero solo hay dos enchufes" (Puente de Vallecas, 202 puestos de lectura). "No, por si hay una sobrecarga de luz" (Puerta de Toledo). "Aqu¨ª no estamos adaptados para esas cosas" (Moratalaz). "La normativa dice que no, pero si viene bajo su responsabilidad, yo le dejo" (Moncloa).

El muro digital de las bibliotecas se justifica, en el caso de la Comunidad, con razones variopintas y con la prohibici¨®n expresa en las del Ayuntamiento. Y los usuarios siguen pendientes de sus bater¨ªas, esperando a la llegada de la electricidad para todos.